Javier Milei ingresará hoy al Congreso de la Nación para jurar como Presidente de la Nación. Lo recibirán cuatro diputados y cuatro senadores junto a las autoridades de las Cámaras que lo guiarán hasta el estrado de la Presidencia de Diputados.
Frente a él tendrás 329 pares de ojos de senadores y diputados que lo observarán con atención. Mirarán cada detalle de sus movimientos tratando de escudriñar qué piensa el nuevo jefe de Estados ahora que ocupa el Sillón de Rivadavia.
Por su parte, el libertario sacará cuentas. En la Cámara baja cuenta con 40 bancas -sumando a sus aliados salteños de Ahora Patria- y en el Senado tiene sólo 7 votos. Hasta ahora no logró sumar ninguna otra voluntad. Tan solo el 15% de las voluntades totales del Congreso de la Nación.
Del otro lado hay 282 votos que deberá salir a captar si tiene la intención de que el Parlamento apruebe alguno de sus proyectos. Además, tendrá que buscar consensos en un Congreso muy fragmentado.
Hasta ahora Unión por la Patria parece ser el sector que muestra mayor unidad. Con 101 diputados y 33 senadores representa el 47% de los votos totales. Sin embargo, la tardanza que mostró el bloque en la Cámara Alta para bajar a sesionar y las disputas internas entre los diferentes sectores por los cargos generaron una luz de esperanza en los operadores de LLA. Si a esto se le suman las posibilidades de negociar directamente con los gobernadores peronistas por separado -para evitar cualquier intromisión de los senadores y aislando a los sectores más kirchneristas-, entienden que hay posibilidades de éxito.
Otra grieta que aprovecharán e incentivarán es que tanto en el Senado como en Diputados quedó demostrado que la experiencia de Juntos por el Cambio llegó a su fin. Por lo menos en su versión parlamentaria.
En el caso de Diputados, el PRO tendrá un bloque de 41 legisladores pero no participará de la mesa de coordinación que formaron el resto de los partidos que hasta hace unas semanas era JxC. La UCR (35), la CC-Ari (6) y Cambio Federal (9) suman 50 bancas y tendrán como jefes de bloque a Rodrigo De Loredo, Miguel Pichetto y Juan López, respectivamente. “Estamos todos menos ellos”, explicó a Infobae un hombre que participó de las negociaciones.
Con JxC roto, los libertarios podrán pescar buena parte de sus votos en esa pecera. Pero no es suficiente porque no logrará llevarse la totalidad, y ahí aparece el bloque Hacemos por Nuestro País (HxNP), bancada del peronismo cordobés, que mantendrá su número a partir del aporte de 5 representantes del oficialismo provincial de Córdoba -que facilitó funcionarios al gobierno de Milei-, junto a dos del socialismo santafesino más el bonaerense Florencio Randazzo, exc andidato a presidir la Cámara a propuesta de un sector de LLA.
La izquierda alcanzará su pico máximo de representación parlamentaria, con 5 diputados; en tanto que Ser Santa Cruz -fuerza provincial del gobernador electo de extracción sindical Claudio Vidal- tendrá dos legisladores.
Por último, el jujeño Guillermo Snopek, distanciado de UxP, conformará un monobloque, al igual que la sanjuanina Nancy Picón, del espacio del gobernador electo Marcelo Orrego, quien por el momento decidió no integrarse a ninguno de los espacios derivados de lo que fue el interbloque JxC, al que reportaba su jefe político. A esto se le suman los partidos provinciales de Misiones, Neuquén, Rio Negro y Salta presentaron un bloque de 9 integrantes, que se denominará Innovación Federal, y que sumó volumen en relación a los cuatro integrantes que tenía hasta ahora.
Esta fragmentación también quedó plasmada en el Senado en donde Juntos por el Cambio tampoco tendrá interbloque. El radicalismo contará con sus 13 senadores, el PRO solo con 6, y cada bancada tendrá su presidente. “No podemos formar un interbloque que sea de la oposición si hay sector que está en el Gobierno y el PRO tiene funcionarios en el gobierno de Milei”, explicaron desde la UCR. “Pensamos diferentes y se nota que estamos en esos lugares, sería muy forzado un interbloque”, señaló un a voz del PRO.
En este contexto dividido, se les podrían sumar las cuatro voluntades del bloque de Cambio Federal.
Mieli jurará frente a un Congreso que hoy mostrará un sentimiento común, por lo menos aquellos que no son de LLA. La decisión de no hablar ante la Asamblea Legislativa generó malestar en todos los bloques -salvo el propio-. “Es una falta de respeto, no somos diputados, somos el Poder Legislativo y el Poder Judicial reunidos y el Poder Ejecutivo decide darnos la espalda”.