Javier Milei decidió tomarle juramento a sus nueve ministros en una ceremonia a puertas cerradas y sin trasmisión oficial. Allí le tocó el turno a su hermana Karina Milei, a quien eligió como secretaria general de la Presidencia y no pudo contener las lágrimas. Ambos terminaron la escena con un abrazo emotivo.
“Licenciada Karina Elizabeth Milei, ¿Jurás por Dios y por la Patria, sobre estos Santos Evangelios, desempeñar con lealtad y patriotismo secretaria general de la Presidencia de la Nación para el que has sido nombrada, cumpliendo y haciendo cumplir en cuento a vos dependa la Constitución de la Nación Argentina?”, leyó Milei entre nervios y emoción.
A su turno, Karina Milei respondió: “Sí, juro”. “Si así no lo hiciere, Dios y la Nación se lo demanden”, terminó Milei.
Karina Milei, según palabras del propio Presidente, es la persona que más lo conoce y en la que tiene mayor confianza. Estudió escenografía y Relaciones Públicas; fue la encargada de diseñar los llamativos actos del “león”, como lo llaman en redes sociales; y de cuidar su imagen. Ve a su hermano o habla con él a diario, lo aconseja y negocia en su nombre. Y trabajó a diario con el estratega de campaña Carlos Kikuchi, a quien convocó para que la ayudara a ensamblar el frente e incorporar dirigentes en todo el territorio a la incipiente fuerza. Junto a él, fue la principal encargada de negociar con punteros, operadores y candidatos en el armado de listas en el interior, la Ciudad y la provincia de Buenos Aires.
El despacho del secretario de la Presidencia suele estar ubicado en el primer piso de la Casa de Gobierno, contiguo a la oficina del Presidente, y oficialmente quien ostenta ese cargo se encarga de asistir al primer mandatario en el diseño de políticas públicas, de elaborar mensajes, hacer tareas de ceremonial y protocolo, y gestionar las relaciones con la sociedad civil. Pero en la práctica, cada jefe del Ejecutivo le da una impronta y tareas según su perfil y necesidades, y el rango de sus ocupaciones es amplio.
La cuenta de X (ex Twitter) Oficina del Presidente Javier Milei posteó esta tarde una foto del Presidente en su despacho del momento en que firmó el decreto de designación de ministros que redujo a nueve las carteras: Interior; Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Defensa; Economía; Infraestructura; Justicia; Seguridad; Salud y Capital Humano.
En los últimos días, Milei había confirmado a Luis Petri al frente del ministerio de Defensa, como parte del acuerdo político que selló con Patricia Bullrich, quien ya perfilaba para desembarcar de regreso a la cartera de Seguridad. Y al mismo tiempo, definió que la vicepresidenta electa, Victoria Villarruel finalmente no tenga la jefatura política de las políticas de cada área, que era el esquema de poder que se preveía antes del triunfo del balotaje.
Con el mapa del Gabinete, Milei definió otros de sus hombres y mujeres clave para llevar adelante sus tareas de colaboración. Como jefe de ministros, el libertario optó por Nicolás Posse, el encargado de coordinar los equipos técnicos del espacio. Se desempeñó además como gerente general de la Unidad de Negocios Sur de Corporación América, bajo el ala de Eduardo Eurnekian.