José Mayans es uno de los hombres fuertes del Senado de la Nación. Presidente del bloque del Frente de Todos, ahora Unión por la Patria, respetado por sus pares y apoyado por el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, siente que tiene la espalda suficiente como para empezar a plantear el post Cristina Kirchner. Por lo menos en la Cámara alta.
Una de las discusiones más difíciles por estos días en el Senado es quién ocupará la presidencia provisional, que tiene vital importancia no sólo por el rol en la Casa, sino porque es el primero en la línea de sucesión presidencial detrás de la Vicepresidencia de la Nación.
Cristina Kirchner expresó que el cargo de la presidencia de Diputados y la presidencia provisional en el Senado “le corresponde a un o una representante de La Libertad Avanza”. Con esto, muchos hicieron una lectura en donde explicaban que CFK le avisaba a Javier Milei y al PRO que no iban a apoyar a ningún representante que no sea libertario.
Sin embargo, el mensaje también tenía destinatarios dentro de su propia fuerza. En especial en el Senado de la Nación, donde al parecer no todos piensan lo mismo que la ex presidenta. Y el que lo expresó fue Mayans.
“Esa es una visión que tiene Cristina, no así el bloque. La semana que viene vamos a reunirnos, pero yo no comparto esa visión porque hay que cumplir la responsabilidad que nos dio la gente de ser la primera minoría”, dijo el jefe del bloque de Unión por la Patria.
La posición de Mayans marca el primer quiebre respecto a lo que propone Cristina Kirchner. Por lo menos en público. Y un cambio de rumbo respecto de lo que los senadores, o una parte, entienden que es el camino a seguir. Tanto es así que Mayans dijo en una radio porteña que respeta a CFK “como jefa política” pero que ahora “se abre una nueva etapa”.
Los dichos de Mayans retumbaron en los pasillos del Senado. “Tiene buena relación con ella, no sé por qué dijo esto”, reconoció un legislador del oficialismo. “Habrá que esperar si esto es el comienzo de una disputa interna o es un paso de comedia armado entre ellos que siempre se llevaron bien para hacer de policía bueno y policía malo”, señaló una senadora opositora.
Mayans responde políticamente a Insfrán y el formoseño es uno de los hombres fuertes dentro del PJ, que entra en un proceso de nuevos liderazgos por lo menos desde lo partidario. El presidente del partido es Alberto Fernández y el otro dirigente de peso, el titular del PJ bonaerense, es Máximo Kirchner, y a ambos se les cuestiona su liderazgo.
Tanto es así que el senador formoseño no sólo puso en duda el liderazgo de CFK sino que también se refirió al partido: “Hay que repensar el peronismo, muchas personas que estaban con responsabilidades que hoy ya no las tienen y hay nuevas generaciones que reclaman un espacio”. Por si no había quedado clara la ruptura, Mayans no dejó lugar a dudas: “Hoy el peronismo no tiene una conducción definida”.
La semana que viene, el bloque conformado por 34 senadores tendrá su primera reunión formal. El encuentro será un día antes de que se realice la sesión especial para la jura de los nuevos integrantes de la Cámara alta y servirá para empezar a organizar el interbloque. De hecho, la primera decisión será si vuelven a ser un único bloque o si se mantiene dividido en dos.
Esa primera decisión y los primeros pasos que realice Unión por la Patria en el Senado servirán para saber si realmente hay un corte respecto de la ascendencia de Cristina Kirchner o si Anabel Fernández Sagasti, Juliana Di Tullio, Eduardo Wado De Pedro, como referentes del cristinismo, mantienen la representación del poder de la ex mandataria.