Con lo justo y en el límite del plazo legal máximo, la Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados retomará hoy la actividad y el kirchnerismo espera aprobar el dictamen del polémico juicio político a la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Se trata del último plazo formal y del trámite definitivo para que las acusaciones puedan ser llevadas para su tratamiento en el hemiciclo.
A partir de las 15 horas, la diputada y presidenta de la comisión Ana Carolina Gaillard, abrirá el debate en el curso del proceso que los diputados llevan adelante contra los integrantes de la CSJN, Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Maqueda y Ricardo Lorenzetti por las causales de mal desempeño de su función.
El proceso llegará a su fin porque si no se logra dictamen antes del 29 de noviembre, es decir mañana, el reglamento establece que se cae el proceso y, en todo caso, habrá que comenzarlo nuevamente a partir de marzo del año que viene. El oficialismo buscará dictaminar rápidamente y aprovechar la mayoría propia ya que el bloque del Frente de Todos cuenta con 16 diputados, el de Juntos por el Cambio 14 legisladores y queda un número 15 que es Alejandro “topo” Rodríguez quien se opone y votaría en línea con la actual oposición.
Un problema que, aseguran, está resuelto es que en el bloque del Frente de Todos tiene un voto de una massista que decidió renunciar a la comisión. Micaela Morán, diputada del Frente Renovador presentó la renuncia la semana pasada por lo que hoy deberá ser reemplazada. El otro legislador massista es Ramiro Gutiérrez, pero en este caso continúa en la comisión.
El oficialismo necesita tener a los 16 legisladores propios presentes para poder dictaminar y asegura que lo tienen. “¿Cuándo no los tuvimos?”, señaló una alta fuente del bloque del oficialismo.
El oficialismo, para asegurarse la mayoría de los votos, ordenó una serie de reemplazos en la Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados -que en su comienzos iba a ser solo la salida de Micaela Morán- y luego sumó cinco más: Mara Brawer, Ramiro Gutiérrez, Susana Graciela Landriscini, Paola Vessvessian y Hernán Pérez Araujo.
En su lugar, los nuevos nombres (incluido el reemplazo de Morán) que integran el cuerpo, son Itai Hagman, Mónica Macha, Magalí Mastaler, Paula Andrea Penacca, Carlos Américo Selva y Carolina Yutrovic.
De esta forma la Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados por parte del oficialismo quedó conformada por los siguientes 16 legisladores: Ana Carolina Gaillard, Ricardo Herrera, Itai Hagman, Mónica Macha, Juan Marino, Germán Pedro Martínez, Magalí Mastaler, Leopoldo Moreau, Juan Manuel Pedrini, Paula Andrea Penacca, Carlos Américo Selva, Vanesa Raquel Siley, Rodolfo Tailhade, Eduardo Félix Valdés, Hugo Yasky y Carolina Yutrovic.
El juicio político contra la Corte Suprema comenzó el 26 de enero, hace casi once meses. Tras 25 reuniones y la declaración de 65 testigos el proceso entró en la recta final hace dos semanas con la notificación a los magistrados de las acusaciones provisorias en su contra y de las pruebas recolectadas para que puedan hacer su descargo.
En las últimas sesiones el clima se enrareció más de lo común porque el interbloque de Juntos por el Cambio (JxC) en la Cámara de Diputados pidió que se aparte de la comisión de Juicio Político al legislador del Frente de Todos (FdT), Rodolfo Tailhade, por estar mencionado por un ex policía acusado de espionaje, pero la solicitud fue rechazada por la titular del organismo parlamentario, Carolina Gaillard, quien señaló que “no corresponde ya que no está imputado en ninguna causa, ni figura su nombre en la investigación que lleva adelante el fiscal Gerardo Pollicita”.
Si hay dictamen positivo pasará a la Cámara de Diputados que se transforma en acusadora. Para que eso suceda hacen falta los dos tercios de los votos, algo que es poco probable que suceda y mucho menos a días de que cambie la conformación del recinto y el oficialismo pierda una veintena de votos.
Si se alcanzara ese número, la Cámara deberá elegir a dos diputados que deberán presentar la acusación, en este caso por mal desempeño, en el Senado ya que los miembros de la Cámara Alta deberán resolver si son culpables o no.
Al igual que para iniciar el proceso de Juicio Político en el recinto de Diputados, para que se obtenga un fallo hace falta los dos tercios de los votos en el Senado de la Nación.
Un dato no menor de todo el proceso que se inició hace un año es que, aunque quien empujó el proceso fue el presidente Alberto Fernández, el proyecto de ley fue presentado por legisladores del Frente de Todos porque una vez que obtenga el dictamen la iniciativa de juicio político tiene 3 períodos de estado parlamentario mientras que, si era Fernández el que lo presentaba, el proyecto caía a los 12 meses.