(Enviado especial a Washington) Javier Milei ya se encuentra en la ciudad de New York, adonde trabaja junto a su comitiva para preparar las reuniones que protagonizará mañana con la administración de Joseph Biden y el Fondo Monetario Internacional. Cerca del mediodía (hora de Manhattan), El presidente electo llegó al mítico Hotel Plaza tras visitar la tumba de Menachem Mendel Schneerson, conocido como el rebe de Lubavitch. Al cementerio de Montefiore fue acompañado por su hermana Karina y Gerardo Werthein, quien sería el embajador de la Argentina ante la Casa Blanca.
Mientras tanto, el posible ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, el designado jefe de Gabinete, Nicolás Posse y Santiago Caputo, principal consejero político de Milei, se quedaron en el Plaza para tomar contacto con inversores y banqueros de Wall Street que tienen inversiones en el país.
La agenda de “Toto” Caputo, Posse y Santiago Caputo aún no trascendió, pero se explicó a Infobae desde New York que “sólo será una aproximación” para explicar las bases del futuro programa económico de Milei.
-¿Las reuniones son para pedir fondos frescos?-, preguntó este enviado especial.
-No. Las reuniones son para explicar hacia dónde va el futuro gobierno y que pretende el futuro presidente. Es una aproximación. Nada más que eso.
Después de las reuniones en el Plaza, Milei tiene previsto encontrarse con Bill Clinton, expresidente de los Estados Unidos. Clinton es amigo personal de Werthein y cuando terminé este cónclave, Milei y la comitiva viajará hasta New Jersey para tomar el avión privado y volar hacia Washington.
En la capital de Estados Unidos, el presidente electo mañana completará su gira con reuniones en la Casa Blanca, el Departamento de Estado, la Secretaria del Tesoro y el FMI.
En DC confirmaron a Infobae que Jake Sullivan, el consejero de Seguridad Nacional de Biden, recibirá a Milei en el Ala Oeste, y que es poco probable que Kristalina Georgieva reciba a Milei en sus oficinas de la calle 19.
El presidente electo arribó a Estados Unidos pasadas las seis de la mañana (ocho en la Argentina), tras un vuelo de once horas que unió Buenos Aires con New Jersey. Junto al presidente electo viajaron Luis “Toto” Caputo, que aparece muy firme como ministro de Economía; Karina Milei, Nicolás Posse y Santiago Caputo, sus principales consejeros; Gerardo Werthein, quien sería embajador argentino ante la Casa Blanca, y el embajador estadounidense en Buenos Aires, Marc Stanley.
Caputo fue protagonista del viaje nocturno que emprendió Milei rumbo a Estados Unidos. Y la inclusión del exministro de Macri no fue un hecho casual: “Toto” (como lo llaman sus amigos) se transformó en la piedra angular en el programa de gobierno de la Libertad Avanza, ya que su propio peso desplazó a Emilio Ocampo como candidato a Presidente del Banco Central y forzó la renuncia anticipada de Demian Reidel, que aparecía sucediendo a Ocampo en la lista de partida.
Milei quiere a “Toto” Caputo en el Palacio de Hacienda y su decisión de invitarlo a la gira fortalece su cambio de marcha. El exministro de Finanzas de Macri no comparte el cierre del Banco Central, ni la dolarización de la Economía, pero estas dos objeciones ya no son un obstáculo programático para el presidente electo.
Tras su llegada a Estados Unidos, con una temperatura apenas por arriba de cero grados, Milei y su comitiva partieron al cementerio de Montefiore, adonde esta enterrado Menachem Mendel Schneerson, un rabino clave en la historia del judaísmo. El presidente electo viajó protegido por el Servicio Secreto de los Estados Unidos, y cuando llegó a Montefiore fue recibido por los líderes de la comunidad judía en New York.
El diseño político e institucional de la gira fue un trabajo conjunto de Stanley y Werthein, que coordinaron esfuerzos para ajustar una agenda acorde a un presidente electo de la Argentina que accederá al poder en medio de una profunda crisis económica.
En la tarde de Manhattan, Milei y su pequeña comitiva volará a DC para cumplir una agenda que diseñó Stanley junto a Werthein. Ya en Washington serán muy importantes las citas en el Consejo de Seguridad y en el FMI como pasos previos para poner on track el programa firmado entre Sergio Massa y Kristalina Georgieva.
Como es presidente electo, Milei no será recibido por Joseph Biden en la Casa Blanca. Se trata de un protocolo diplomático que sólo rompió George Bush para recibir informalmente a Lula da Silva, que enfrentaba como futuro mandatario de Brasil una compleja situación económica. Obvio: en la geopolítica de DC, Brasil pesa más que Argentina.
De todas maneras, Milei visitará el Ala Oeste de la Casa Blanca. Allí será recibido por Sullivan y Juan González, consejero de Seguridad Nacional de Biden para América Latina. González es colombiano de origen, conoce a fondo la situación económica y política del país, y fue designado por Biden para representar a los Estados Unidos en la jura presidencial del 10 de diciembre.
Además, si no hay cambios de último momento, el futuro mandatario tendrá reuniones en el Departamento de Estado, la Secretaría del Tesoro y el Fondo Monetario Internacional (FMI). A esos encuentros, que aquí son considerados como el fortalecimiento de una agenda común entre ambos países, Milei llegará con Karina Milei, Santiago Caputo, Luis Caputo, Nicolás Posse y Gerardo Werthein.
El presidente electo propone una agenda lineal con Estados Unidos, a diferencia de lo sucedido con Alberto Fernández, que se movió en zigzag ante la perspectiva geopolítica de la administración Biden. Milei regresaría el martes a la noche. Doce días antes de asumir como Presidente en la Casa Rosada.