Después de la victoria de Javier Milei en el balotaje, la vicepresidenta Cristina Kirchner suspendió a último momento el viaje que tenía programado esta semana a Italia, a donde tenía previsto dar una conferencia académica en una universidad de Nápoles.
CFK resolvió levantar esa agenda y quedarse en el país, pudo confirmar Infobae, sin conocerse mayores detalles de su decisión. Lo que sí está claro es que una sola cosa cambió desde que la cita europea se confirmó hace menos de una semana: la victoria contundente del candidato libertario sobre el ministro de Economía, Sergio Massa por casi 10 puntos, y un proceso de transición entre el presidente electo y el saliente que asoma como conflictivo y riesgoso para la estabilidad macroeconómica.
La vicepresidenta iba a disertar sobre la “insatisfacción de la democracia” en la cátedra argentina de la Universidad de Nápoles Federico II, el próximo 24 de noviembre. Tenía una exposición programada en la Aula Magna Histórica del Rectorado, dirigida en español para los estudiantes de la Universidad de Nápoles, acompañada por el rector Matteo Lorito, la profesora especializada en derecho romano Carla Masia Doria, que conduce la cátedra para América Latina, y el embajador argentino en Italia, Roberto Carles.
El tema de la exposición estaba a tono con el aniversario de los 40 años de democracia recuperada, y con la situación política actual nacional.
Según la hipótesis política de Cristina Kirchner, y que dejó entrever en otras conferencias académicas como en la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana (EuroLat) y en la Universidad Nacional del Chaco Austral (Uncaus), la irrupción de líderes de extrema derecha como el norteamericano Donald Trump, el brasileño Jair Bolsonaro y ahora Javier Milei en Argentina se debe a la ausencia de herramientas legales para gobernar a los actores económicos y sociales que traban las transformaciones, como la Justicia y las grandes empresas. De acuerdo a CFK, son un “poder que está afuera” de lo que se elige en las urnas y de los principios del sistema republicano del siglo XVIII.
“Los mercados, monopolios, oligopolios, poder financiero internacional, nada de eso figura en nuestras Constituciones” y dijo la vicepresidenta en la apertura de la EuroLat, el 13 de abril de 2022. “Lo peor de todo cuando las sociedades cada cuatro años o cada dos años eligen a sus representantes, no juzgan a ninguno de esos poderes, juzgan a ustedes, a los que están sentados en las bancas, que mucho, mucho, mucho tampoco se puede hacer”, señaló entonces.
“Pero la insatisfacción de las democracias, donde la gente se termina enojando con la política, debería obligarnos a replantear a todos la necesidad de repensar nuestra ingeniería institucional donde se invista de poder a las instituciones, estas o las que haya que crear. Pero estamos a tiempo todavía antes que sea demasiado tarde”, sostuvo Cristina Kirchner en aquella presentación.
Ese enojo hacia un sector de la política se hizo realidad el domingo pasado y Javier Milei se impuso en las urnas en casi todo el país. Aunque con nula visibilidad durante toda la campaña de Sergio Massa, ya en abril Cristina Kirchner había decidido confrontar con el proyecto político del candidato libertario. Vislumbraba, sobre todo, su preocupación de que los jóvenes estén persuadidos por ideas que “fracasaron” en los años noventa. “Esos mamarrachos que andan diciendo que ‘la casta tiene miedo’... ¿De qué tiene miedo?... Si nunca te pasó nada, hermano. ¡Qué me venís a joder con que te tenemos miedo! ¿De dónde te tenemos miedo? ¡Caraduras! ¡Caraduras!”, dijo en su discurso del Teatro Argentino de La Plata.
Para la vicepresidenta, la derecha argentina tienen un condimento adicional a diferencia de los proyectos europeos del mismo espectro ideológico, porque en el Viejo Continente “no se propone eliminar al adversario”. “Acá querían que desapareciera el peronismo, como ahora quieren algunos que desaparezca el kirchnerismo”, afirmó en una entrevista reciente con el ex presidente ecuatoriano Rafael Correa. Cristina está segura que la “supresión del otro” que atizan sus adversarios se materializó en el intento de atentado del 1 de septiembre 2022 en la puerta de su casa, cuando Fernando Sabag Montiel le gatilló un arma a 20 centímetros de su cara.
Hasta el momento, la universidad donde iba a hablar Cristina Kirchner no confirmó la suspensión de la clase magistral. Antes de que se levante su viaje a Italia, estaba la posibilidad de que pudiera llegar a reunirse con el Papa Francisco en el Vaticano. Esa agenda ya no corre ante la novedad del terremoto político libertario y la ausencia de un liderazgo predominante que pueda ordenar al peronismo antes del recambio presidencial.
En sus primeras declaraciones públicas tras ser electo, Javier Milei ratificó su plan inicial de implementar un ajuste con motosierra, en el que incluyó privatizaciones de las empresas públicas y duras medidas monetarias y económicas que provocarán resistencias. Las horas posteriores a la segunda vuelta fueron tomadas por la incertidumbre, con rumores de que Sergio Massa se tomaría licencia como ministro de Economía y los cortocircuitos por las responsabilidades compartidas entre el gobierno saliente y entrante hasta el 10 de diciembre. Tampoco los primeros contactos entre Alberto Fernández y Milei llevaron tranquilidad. Este martes, ambos desayunaron en Olivos para dialogar sobre la transición.
En términos protocolares, CFK también deberá atravesar su propia transición con la vicepresidenta electa, Victoria Villarruel. En 2019, la titular del Senado se reunió sin inconvenientes con Gabriela Michetti, la compañera fórmula de Mauricio Macri durante el gobierno de Cambiemos. Aquel momento quedó ilustrado con una foto: las dos funcionarias posaron sonrientes a la cámara.