A lo largo de sus 53 años, Javier Gerardo Milei ha desarrollado una extensa carrera en el sector privado, hasta que un encuentro en un restaurante lo llevó a la televisión para que comenzara su etapa de figura pública, que derivó, con el tiempo, en una incursión política con candidatura Presidencial incluida, aún con final incierto.
El actual líder de La Libertad Avanza nació el 22 de octubre de 1970 en la ciudad de Buenos Aires, en el barrio de Palermo, que fue además el primer lugar donde vivió junto a su familia, de origen italiano.
Es el hijo mayor de Alicia Luján Lucich, ama de casa, y de Norberto Horacio Milei, un empresario del transporte que comenzó como colectivero de la línea 21 y fue creciendo hasta formar parte de las compañías Francisco de Viedma S.A. y Empresa de Transportes Tte. Gral. Roca.
A los pocos años, los padres del ahora referente de la oposición se mudaron a la localidad de Sáenz Peña, en el partido bonaerense de Tres de Febrero, aunque también pasaron por Villa Raffo y Villa Devoto. De adulto, habitó un departamento en el barrio porteño del Abasto hasta que se mudó a una casa en Benavidez, partido de Tigre.
Hasta la pandemia del coronavirus, la relación con su papá y su mamá era mala: “Yo no hablo con mis progenitores. No les digo padres, porque no comparto los valores morales y éticos de ninguno de los dos. Mi padre me hizo las mil y una en mi proceso universitario”, contó en el 2018.
Según sus propias palabras, Norberto, cuando Javier estaba estudiando economía, “en el momento en el que llegaban los finales” le “dejaba de hablar” y le “generaba situaciones de mucho estrés” para que le fuera mal.
“Es la lógica que él tiene, darte algo y después generarte una situación para que te vaya mal y enrostrarte que sos un fracasado, pero eso para mí fue una gran experiencia. Kissinger dice que los mejores momentos son los de crisis porque los cagones se van y los incompetentes se van. Se quedan los que saben y tienen bolas. Yo puedo estar bajo la máxima presión donde nadie soporta nada y yo resuelvo como si nada. Dentro de todo, ese hostigamiento me fortaleció”, recordó durante una entrevista televisiva.
La situación cambió rotundamente durante la pandemia del coronavirus, cuando Milei retomó el vínculo con sus padres, que incluso luego lo acompañaron en varios de los actos políticos que encabezó, ya como candidato a Presidente.
Distinto es el vínculo que tiene con su hermana menor, Karina, con quien siempre se mostró cercano, desde su infancia, cuando asistió al Colegio Cardenal Copello, de Villa Devoto, hasta su adultez, cuando comenzó su carrera a la Casa Rosada y la designó a ella como apoderada de su partido y jefa de campaña.
De chico jugó en el Club El Ideal, ubicado en Villa Lugano, donde compartió plantel con otros jóvenes con quien hoy en día tiene un grupo de WhatsApp, mientras que de más grande atajó en Chacarita Juniors, conjunto en el que estuvo desde 1984 hasta 1989, cuando decidió dejar el fútbol para abocarse a sus estudios.
Licenciado en Economía por la Universidad de Belgrano, el libertario realizó dos maestrías, una en el Instituto de Desarrollo Económico y Social (IDES) y otra en la Universidad Torcuato di Tella, aunque recientemente también obtuvo el título de Doctorado honoris causa de la universidad ESEADE, reconocimiento que recibió de la mano de Alberto Benegas Lynch hijo, a quien considera una de sus mayores influencias.
Si bien nunca tuvo hijos, Milei tiene cinco perros, todos ellos mastines ingleses, una raza similar al dogo y con buen temperamento. A casi todos ellos les puso nombres de economistas de la escuela de Chicago o austriacos: Conan, Murray (por Murray Newton Rothbard), Milton (por Milton Friedman), Robert y Lucas (por Robert Lucas), estos cuatro, hijos del primero.
En cuanto a su vida privada, en la adolescencia tuvo una banda tributo a los Rolling Stones llamada Everest y fue durante mucho tiempo hincha de Boca, hasta que se retiró Martín Palermo y el club contrató nuevamente a Juan Román Riquelme, en su última etapa, lo que consideró una “decisión populista”.
Respecto a su situación sentimental, el economista está de novio con la actriz e imitadora Fátima Flórez (cuyo nombre original es María Eugenia Flórez), y previamente solo se le conoció otra relación pública, que fue con la cantante Daniela Pérez, con quien estuvo entre 2018 y 2019.
En el aspecto laboral, se desempeñó como economista jefe en Máxima AFJP; fue coordinador en el Estudio de Miguel Ángel Broda; fue economista senior en el banco HSBC y durante años estuvo como economista jefe en la Corporación América.
Fue, de hecho, cuando trabajaba en Corporación América que, en 2012, conoció al conductor de televisión Alejandro Fantino, con quien comenzó su periodo de exposición en los medios de comunicación.
Extrovertido e histriónico frente a las cámaras, rápidamente el economista se ganó un lugar en los paneles de debate periodístico hasta que, en 2021, decidió dar el paso a la política y preparó su primera campaña electoral, en ese momento, como candidato a diputado nacional. Tan solo dos años después, este joven nacido en Palermo y con una historia familiar con vaivenes, logró armar alianzas en todo el país y alcanzar el balotaje. Hoy se definirá si finalmente llega a la Presidencia.