El Senado de la Nación se mantendrá vacío por un mes más. Solo las personas que realizan las visitas guiadas por el Palacio Legislativo y el personal de seguridad y limpieza entrarán al hemiciclo durante noviembre. En el caso de los senadores, sus bancas no son ocupadas desde el pasado 29 de septiembre cuando se sancionó la modificación del Impuesto a las Ganancias. Luego, el oficialismo y la oposición salieron del recinto y lo más probable es que no vuelvan al hemiciclo hasta diciembre.
La decisión de no volver al recinto no es de nadie y es de todos. Tanto desde el oficialismo como de la oposición señalan que son los otros los que no quieren sesionar.
“Nosotros les propusimos de todo. Les dijimos de hacer una sesión para que juren los senadores nuevos y para hacerle un homenaje a Matías Rodríguez -senador nacional que se suicidó el pasado 18 de octubre- que es algo de uso y costumbre, y no quisieron”, señaló a Infobae una alta fuente del interbloque de Unión por la Patria.
“La idea no era llevar más temas, tanto es así que hasta les propusimos hacer reunión de Labor Parlamentaria -algo que el kirchnerismo no hace en la Cámara alta hace casi 4 años y que aseguraba que no iban a tener sorpresas en el temario- pero nos dijeron que no. Primero era hasta las PASO, después hasta la primera vuelta y ahora ya nos dejaron en claro que hasta después del 19 de noviembre -fecha del balotaje- no van a sesionar”, agregó la misma fuente del oficialismo.
Desde Juntos por el Cambio señalan que ellos no son quienes tienen cerrado el recinto sino que todo lo contrario: “Fueron ellos los que pusieron como fecha después del 19 de noviembre”, según confió una de las voces negociadora del interbloque de la oposición.
En este juego en el que nadie es responsable, el Senado llegará a la última semana de noviembre con muy pocas sesiones durante el 2023 y con una cantidad de proyectos de ley irresueltos.
Una vez que pasen las elecciones quedarán sólo tres semanas de sesiones ordinarias. Esas serán las últimas de Cristina Kirchner al frente de la Cámara alta ya que el 10 de diciembre asumirá Agustín Rossi o Victoria Villarruel en su lugar.
Entre los temas que el oficialismo buscará sancionar antes de que termine el mandato de CFK, y obviando el Presupuesto 2024 que todavía está en Diputados, está el proyecto de Devolución del IVA que tiene media sanción de la Cámara de Diputados, lo mismo sucede con los proyectos con promociones a las industrias del Gas Natural Licuado (GNL) para la exportación y la del calzado. Esto sin tener en cuenta los pliegos de jueces, fiscales y defensores para la Justicia que ya cuentan con dictamen de la Comisión de Acuerdos.
Otro tema, que venía reclamando Sergio Massa en su doble rol de Ministro de Economía y candidato a presidente para tenerlo durante la campaña y que la dinámica del quórum en el Senado lo frustró, es el de monotributo tecnológico, que ya tiene media sanción de Diputados y que permite cobrar en dólares la exportación de servicios.
En la misma línea se encuentra el de alquileres temporales, un proyecto que logró dictamen en acuerdo entre el radicalismo y el Frente de Todos y que desató la furia de Patricia Bullrich. La ex candidata había anunciado que si la norma era aprobada y ella era elegida en las elecciones la iba a derogar.
Por último queda el rescate a los deudores de Créditos UVA, algo que presenta complejidades porque no hay consenso dentro del bloque oficialista.
Para poder lograr todo esto, el Frente de Todos, que había logrado volver a tener el quórum con la anexión de varios senadores del bloque Unidad Federal, ahora nuevamente necesita de JxC por las ausencia del senador fueguino fallecido Rodríguez y del legislador sanjuanino José Uñac, quien sufrió un ACV y, aunque se está recuperando, no está en condiciones de asistir a la sesión.
Para que juren sus reemplazantes se necesita habilitar la sesión y para eso hace falta la presencia de alguno de los representantes de Juntos por el Cambio, algo que hasta el 19 de noviembre es innegociable.