A partir del 10 de diciembre La Libertad Avanza tendrá 38 representantes en la Cámara de Diputados y 7 en el Senado nacional. Ambas bancadas, nada despreciables para un partido que no existía hace apenas tres años, cambiarán por completo la dinámica política que imperó durante los últimos años. Sin embargo, todavía existen muchas incógnitas sobre cómo funcionarán en el recinto y qué alianzas se cristalizarán a la hora de votar.
En Diputados, los libertarios podrán bloquear prácticamente cualquier iniciativa de un eventual gobierno peronista tan solo con votar en sintonía con Juntos por el Cambio, ya que Unión por la Patria -que pasará de tener 118 diputados a 105- ya no podrá llegar al quórum (129) con sus habituales aliados provinciales.
Si Milei es electo Presidente se apoyarán en el pacto de gobernabilidad sellado con Mauricio Macri y Patricia Bullrich para sumar a los “halcones” del PRO y otros monobloques como el de Ricardo López Murphy y el de José Luis Espert. Aun así, los libertarios y sus aliados no superarán los 80 escaños y deberán negociar con sectores del radicalismo o gobernadores peronistas para poder avanzar con su agenda legislativa.
“La negociación va a ser ley por ley”, aseguró Cristian Ritondo, actual jefe del bloque PRO, en la previa de la Asamblea Legislativa que este jueves proclamó las fórmulas que competirán en el balotaje. Por el momento todos esperan el resultado del 19 de noviembre y evitan hablar sobre posibles fracturas en Juntos por el Cambio.
En las filas de La Libertad Avanza también posponen las conversaciones sobre alianzas tácticas. El lunes Milei reunirá a sus diputados y senadores electos en el Hotel Libertador, ubicado en el centro porteño, para ultimar detalles de campaña y ajustar la fiscalización.
La fiscalización también fue el tema excluyente de las dos reuniones previas de los legisladores libertarios, que todavía no saben quién será el jefe del bloque y cómo funcionará el acuerdo táctico con el PRO.
El resultado de las elecciones cambiará por completo la morfología del bloque en la Cámara de Diputados, dado que en caso de ganar tanto Milei como su candidata a vice Victoria Villerruel dejarán sus bancas para ir al Poder Ejecutivo. En cambio, si pierde sería natural que ambos se desempeñen como presidente y vice del bloque.
Ante la consulta de Infobae, uno de los diputados electos insistió en que las cuestiones operativas del Congreso no se resolvieron porque todos los esfuerzos están concentrados en la campaña y en la fiscalización. En ese sentido, reconoció que aún está por verse si los propios libertarios eligen hacer un bloque unificado o como un interbloque, en base a los diferentes partidos con los que Milei negoció a la hora de tejer su armado en las provincias.
“Todos queremos que sea un bloque homogéneo, pero todavía no se puede asegurar”, explicó a Infobae el legislador electo que acumula reuniones con referentes de otros espacios para coordinar la fiscalización.
En cuanto a los puentes con el PRO y el resto de Juntos por el Cambio, explicaron que las cuestiones “políticas” sólo se podrán discutir una vez que se conozca el resultado. “Primero la elección, y después hay que empezar a charlar para confluir con otros”, dijo un diputado electo que además remarcó que “nadie sabe cómo van a quedar los bloques del radicalismo y del PRO”, y por lo tanto todavía no está claro quiénes son los interlocutores válidos para avanzar con eventuales acuerdos. “¿Quién va a conducir al PRO o al Radicalismo?”, se preguntó.
Por otro lado, el flamante bloque enfrentó durante la última semana su primer cimbronazo luego de que trascendiera un comunicado que anunciaba el alejamiento de una senadora y tres diputados nacionales disconformes con el pacto con Macri. No obstante, algunos de los presuntos firmantes de la carta luego negaron estar involucrados.
Según pudo reconstruir este medio, solo Pablo Ansaloni, que proviene del gremio de empleados rurales (UATRE), abandonaría la bancada libertaria.
Desde La Libertad Avanza caracterizaron el episodio como “una operación” y destacaron que el lunes estarán reunidos “el 99% de los diputados y los senadores”. “Tuvimos algunas quejas internas pero nada más. No es nada”, minimizaron.
A dos semanas del balotaje algo es seguro, si Milei gana el domingo 19 el Congreso se convertirá en un hervidero y los primeros meses registrarán una actividad frenética, ya que todas las reformas de fondo anunciadas durante la campaña, como la reducción del Estado, la dolarización o la eliminación de impuestos, necesariamente deberá pasar por las Cámaras.