En paralelo a la campaña, Milei rearma su equipo económico y empodera a un dirigente en el ala política

A dos semanas del balotaje, el candidato libertario intenta resguardar el control sobre el área que más le importa de cara a un eventual gobierno. Algunas figuras se fortalecen y otras pierden relevancia. Ratifica que no anticipará quién sería su ministro de Hacienda

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Javier Milei durante la Asamblea Legislativa que proclamó a las fórmulas que competirán en el balotaje (Télam)
Javier Milei durante la Asamblea Legislativa que proclamó a las fórmulas que competirán en el balotaje (Télam)

El segundo puesto en las elecciones no solo tuvo un efecto político en La Libertad Avanza (LLA), cristalizado en el acuerdo con el PRO, sino que tuvo consecuencias también en la distribución de poder interna. En paralelo a la coordinación con Mauricio Macri y Patricia Bullrich, Javier Milei se encuentra abocado a la reconfiguración de su equipo económico de cara a un eventual gobierno, y empoderó, aún más, a Guillermo Francos, que se transformó, junto a su hermana Karina, en su principal representante ante propios y ajenos.

“Hablen con Francos”, suele contestarles últimamente Milei a muchos dirigentes que le acercan dudas o propuestas, según pudo reconstruir Infobae. El momento de coronación expresa del ex diputado, a quien conoció durante su paso por Aeropuertos Argentina 2000, fue el martes pasado, en la reunión que encabezó el ex empresario en el hotel Libertador con legisladores nacionales electos junto a Karina. “Ese día quedó claro como nunca que él es su mano derecha”, contó un referente de confianza del líder, agradecido por el encumbramiento del ex diputado del Frente Cívico de Domingo Cavallo, por encima de armadores que hablaban en nombre de Milei y empezaron a tener menor relevancia. “Él no se dedica a romper y desarmar. Al contrario, su lema es arreglar lo que está flojo. Viene a dar coherencia”, dijo un diputado electo de la primera hora.

Francos, que ocuparía el cargo de ministro del Interior en un eventual gobierno, también fue designado como uno de los voceros del espacio, en un grupo muy reducido que incluye a su compañera de fórmula, Victoria Villarruel, y a la eventual canciller, Diana Mondino. Pasado el tembladeral de los días post-comicios, ellos tres fueron los únicos que brindaron entrevistas en nombre de LLA, siguiendo un plan de comunicación cuidadosamente armado para evitar errores no forzados en el tramo electoral final. Y el que mayor cantidad de entrevistas con canales de TV y programas de radio fue, justamente, Francos.

Villarruel sólo habló una vez, el sábado, con radio Rivadavia, y en el frente de derecha deslizan que se debe a cierto malestar de su parte por “las formas” que eligió Milei cuando eligió arreglar con Macri, sin consultarla ni participarla de las charlas iniciales. Mientras que Mondino hizo lo propio anteayer, aunque sus palabras se transformaron en un problema cuando, ante una consulta periodística, defendió la privatización del sistema de distribución de órganos, una idea que había puesto sobre la mesa su jefe político meses antes. “Sus declaraciones fueron sacadas de contexto”, la defienden los libertarios, que suelen ubicarla entre los mejores cuadros políticos del espacio. “Estamos todos muy cansados, desgastados por las internas y la campaña. Es lógico que pasen estas cosas”, agregó otro dirigente.

Guillermo Francos obtivo mayor preponderancia en LLA después de las elecciones generales (Gustavo Gavotti)
Guillermo Francos obtivo mayor preponderancia en LLA después de las elecciones generales (Gustavo Gavotti)

En paralelo al fortalecimiento de Francos en la campaña y la articulación política con el PRO, Milei está convencido de que tiene mejores chances que Sergio Massa para el balotaje, y se dedicó en los últimos días a reconfigurar el equipo económico para un posible gobierno. En buena parte, admitieron, busca fortalecer ese núcleo para marcarles la cancha a sus nuevos socios, Macri y Bullrich. Ayer, el candidato dijo nuevamente que su plan económico y el nombre del futuro ministro de Hacienda, así como la eliminación del Banco Central, no son negociables, una condición que había puesto sobre la mesa en persona desde el primer día de la flamante asociación, en el encuentro privado en la casa del ex presidente donde se selló el pacto LLA-PRO.

En principio, en su entorno ratificaron que no anunciará el nombre del técnico que desde hace meses tiene decidido nombrar como titular de la cartera. Al menos hasta después del balotaje. “No hay forma, no hay chances”, dijeron después de los rumores de que estaba próximo a revelarlo para recuperar centralidad en medio de la avanzada de los referentes de PRO. “Lo tiene en la cabeza. Pero ahora está tratando de componer la relación entre el grupo económico que está armando. Es un rompecabezas, pero la prioridad es armar el equipo económico propio”, contó un alfil de la cúpula libertaria.

El proceso de reestructuración del equipo de gestión que más le importa a Milei consiste en la ratificación de algunas figuras, la incorporación de otras, y la merma en la incidencia de referentes de ese área que hasta hace semanas tuvieron protagonismo. El otrora líder del trípode de especialistas, Carlos Rodríguez, ocupa cada vez menos espacio, un hecho que quedó en evidencia el domingo, cuando el ex funcionario menemista hizo público cierto descontento en un hilo de tuits donde se quejaba de haber sido acallado. Mientras que Roque Fernández y Darío Epstein, que respondían a su liderazgo, mantienen el perfil bajo, lejos de la primera plana que supieron ocupar en el primer tramo de la campaña para las Generales.

Mientras tanto, el titular del Banco de Valores (VALO) y ex aspirante a senador nacional, Juan Nápoli, muy cercano al líder libertario, se encuentra envuelto, desde hace días, en una serie de denuncias cruzadas con Laura Luján Vázquez, con quien tuvo una relación extramatrimonial. En LLA no ven un futuro claro para el consejero en temas financieros y puente con Wall Street.

Javier Milei y Patricia Bullrich, la semana pasada, después de sellar el pacto LLA-PRO
Javier Milei y Patricia Bullrich, la semana pasada, después de sellar el pacto LLA-PRO

En cambio, Emilio Ocampo, autor del proyecto de dolarización mejor valorado por Milei -entre los cinco que, contó varias veces, estaba estudiando-, está “firme y fuerte”, cuentan, y sigue siendo el número puesto para liderar el Banco Central (para luego “destruirlo”, según palabras del propio líder). También Alberto Benegas Lynch (h), el “prócer” liberal, mantiene su lugar como referente económico, a pesar de los fuertísimos ruidos que se generaron puertas adentro y afuera del espacio político por el pasaje de su discurso en el cierre de campaña en el Movistar Arena donde criticó vehementemente al Papa y opinó que estaría a favor de una ruptura de las relaciones con el Vaticano.

En tanto, Milei escucha cada vez más seguido y con mayor atención a Héctor Rubini, economista de la Universidad Nacional de Rosario, Máster en Economía del Instituto Torcuato Di Tella y Máster en Finanzas de la Universidad del CEMA, y profesor en Universidad del Salvador, UADE, UBA, que se desempeñó en diversos cargos públicos en Santa Fe y en el BCRA durante la presidencia del fallecido Pedro Pou. Aunque apareció en público contadas veces durante la campaña -por ejemplo, en una charla en Economía Online CREA- está cerca de Milei.

En septiembre del año pasado lo había acompañado en el acto donde presentó su plan para dolarizar y bajar la inflación, en el teatro Broadway, frente a unos 2000 militantes. Entonces sólo era un diputado con -se creía- acotadas chances de acceder a la Casa Rosada. Ese día habían ido a escuchar a Milei el ex ministro de Economía de Carlos Menem, Domingo Cavallo (aunque a través de una plataforma virtual), otro de los políticos de los 90 admirados por Milei; y Federico Sturzenegger, a quien Milei valora y a quien buscaría ubicar en lugar de peso en un eventual gobierno libertario. “Agradezco a Javier porque siempre bancó mi gestión, y eso que a él no le gusta el Banco Central”, había dicho entonces el ex presidente del BCRA del gobierno de Cambiemos.

“Javier valora mucho a Federico, cada vez más”, dijeron en LLA ayer. Y sumaron como figura en ascenso en su órbita, aunque a la distancia, a Guillermo Nielsen, ex presidente de YPF expulsado por La Cámpora y actual embajador de Alberto Fernández en Arabia Saudita, que se mostró dispuesto a colaborar en un posible gobierno libertario.

Mientras baja el perfil y permite, a regañadientes, que Macri y Bullrich cobren protagonismo en la campaña antikirchnerista que podría facilitarle la llave de la Casa Rosada, Milei está decidido a defender, como mínimo, el control sobre el área económica, la que más valora cuando observa el organigrama del Estado nacional que sueña conducir.

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