Pese a sus internas históricas, la UCR logró unificar una postura en medio de la crisis que atraviesa Juntos por el Cambio. Según pudo reconstruir Infobae, todos los correligionarios de peso coincidieron en que deben dar libertad de acción para el balotaje y, en paralelo, apoyaron la idea de cargar todas las tintas sobre Patricia Bullrich y Mauricio Macri como responsables de que la coalición opositora esté al borde del quiebre. Incluso, en el entorno de Gerardo Morales acusaron al ex presidente de instalar el rumor de un posible acuerdo con Sergio Massa para, luego, usarlo como excusa o trampolín para aliarse con Javier Milei.
La conferencia de prensa convocada por Bullrich y Luis Petri sorprendió a todos los radicales que todavía no lograban reponerse de la dura derrota a nivel nacional. “Ellos abandonaron Juntos por el Cambio. Abandonaron el mecanismo de toma de decisión colectiva dentro de una coalición”, repitió Martín Lousteau, líder de Evolución, luego de que Morales leyera el documento firmado en la sede del Comité Nacional.
El encuentro había sido convocado por Morales el pasado lunes, con el objetivo de poner en común acuerdo la estrategia del partido centenario, en momentos en que crecía el rumor de ciertas negociaciones con Massa. Asistieron, además de Morales y Lousteau, Mario Negri (presidente del bloque en la Cámara de Diputados), su vice Karina Banfi; el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés; el gobernador electo de Chaco, Leandro Zdero; el senador Luis Naidenoff y el referente radical en Tucumán José Cano, entre otros.
Según pudo reconstruir este medio, todos llegaron con la idea de mantener la neutralidad. De hecho, hubo fuertes reproches a María Luisa Storani, vicepresidenta de la UCR, por haber adelantado un posible apoyo al candidato de Unión por la Patria. “Mi idea es llevar a la mesa votar a Sergio Massa, pero no sé si será compartida por el resto los miembros de la mesa. Mi posición, solamente, es en contra de Milei-Villarruel”, había manifestado en una entrevista con C5N.
Durante el debate -que duró al menos dos horas- terminaron de redactar el documento que había llevado Lousteau, donde expresaron que “la UCR no apoyará a ninguno de los dos candidatos. Ninguno de los dos garantiza un futuro de progreso para la Argentina. Sergio Massa es tan responsable como Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner del estado del país, de su empobrecimiento, del proceso inflacionario, la corrupción y del deterioro social y económico de Argentina”.
“El extremismo demagógico de Javier Milei se encuentra en las antípodas de nuestro pensamiento. Su plataforma política y la violencia que se desprende de sus palabras y gestos, atentando siempre contra la convivencia, no tienen nada que ver con nuestro partido. Jamás podríamos tener nada que ver con su espacio”, agregaron.
El llamado a la neutralidad para el balotaje era un postura que se preveía y que, además, muchos radicales ya la habían adelantado, entre ellos, Alfredo Cornejo y Ernesto Sanz. Lo que sorprendió durante la conferencia fue la dura crítica hacia Mauricio Macri, a quien acusaron, entre otras palabras, de utilizar de “vocera” a Bullrich. “Que Macri dé la cara”, reclamó Morales.
Negri fue el que llevó la idea a la Mesa del Comité que sirvió para que la UCR tome la centralidad de Juntos por el Cambio: la coalición no se rompió, Bullrich y Macri la abandonaron. Un lema que también le sirvió a Lousteau para posicionarse en la interna porteña: “Si Jorge Macri busca seguir el mismo camino, no cuenten conmigo”. Con esa idea, más la necesidad de ponderar a los 10 gobernadores cosechados en esta elección, los correligionarios apuestan a la continuidad de la coalición con el rol de oposición. “La gente votó para que seamos oposición, eso hay que respetarlo”, coincidieron.
“Lo importante es sostener la neutralidad, con nuestro rol de oposición, y la libertad de acción”, resaltó Banfi en diálogo con Infobae, representante del radicalismo bonaerense quien, además, se sumó a las críticas hacia Bullrich, al considerar que sus declaraciones generaron una “crisis de identidad” de Juntos por el Cambio para con los votantes.
En medio del enojo con Macri, los dirigentes radicales enviaron señales hacia adelante: plantarán sus bases con los 10 gobernadores, cientos de intendentes, 93 diputados y 24 senadores. Morales también aprovechó para hablar de la renovación de la UCR, donde mencionó a Lousteau como máximo representante. Justamente, el líder de Evolución mantuvo una conversación telefónica con Horacio Rodríguez Larreta luego de las declaraciones Bullrich, lo que indica una buena sintonía para mantener la alianza que sellaron en Costa Salguero y que los consagró en el ala moderada de Juntos por el Cambio.