La UCR se convirtió en el foco de atención luego de la derrota que sufrió Juntos por el Cambio el pasado domingo. Las fuertes críticas que Javier Milei lanzó durante toda su campaña presidencial a los radicales generaron especulaciones sobre un posible apoyo a Sergio Massa para el balotaje del próximo 19 de noviembre. De hecho, según pudo reconstruir Infobae, un sector ya se había acercado al candidato de Unión por la Patria luego de las PASO, molestos con la estrategia nacional de Juntos por el Cambio. Sin embargo, en las últimas horas, los dirigentes enfrentados a las autoridades del Comité Nacional salieron a aclarar que no cerrarán ningún tipo de acuerdo sino que, por el contrario, apostarán a la unidad de la coalición opositora -contra todo los pronósticos- y darán libertad de acción para la votación. “Los dirigentes no somos los dueños de los votos”, aseguran.
En medio de la interna y las especulaciones, Gerardo Morales convocó a la Mesa Nacional de la UCR. En su entorno aseguraron a este medio que tanto Mauricio Macri como un sector del PRO ya acordó con Milei, por lo que buscarán acercar posiciones cuando se reúnan desde las 14 en la sede de la calle Alsina. El gobernador jujeño arrastra profundas diferencias con el ex presidente: lo cruzó cuando trató a Hipólito Yrigoyen de populista, lo responsabilizó por operaciones mediáticas en su contra y ahora -junto con Evolución, el espacio que lidera Martín Lousteau- lo acusan de ser el ideólogo de la estrategia electoral que los llevó a la derrota con Patricia Bullrich como candidata.
En la previa al encuentro de mañana, María Luisa Storani - vicepresidenta de la UCR- adelantó que llevará a la Mesa Nacional la idea de votar a Massa en el balotaje: “No sé si será compartida (la propuesta) por el resto los miembros de la mesa. Mi posición, solamente, es en contra de Milei-Villarruel”. Durante la entrevista con C5N, la dirigente aclaró: “Es un espacio donde vamos a debatir esto, pero tampoco se toma la decisión mañana. Tenemos posiciones distintas con la gente de otras provincias, porque son realidades diferentes”.
Sus declaraciones enfurecieron al sector enfrentado a las autoridades del partido centenario. Los radicales que jugaron con Bullrich en los últimos comicios denuncian que Storani no representa al espacio y que, además, salió a hablar por un pedido de Morales. “Ella dijo lo que en Jujuy no se animan a decir: que quieren jugar con Massa pero no quieren pagar el costo”, detallaron en diálogo con Infobae. Otros menosprecian la figura de Morales, Lousteau y de Storani ya que, pese a dirigir el Comité Nacional, fueron derrotados en sus territorios. “Ya no pueden hablar en nombre de la UCR”, dicen.
Con la derrota de Lousteau en la ciudad de Buenos Aires en manos de Jorge Macri, y la pérdida de dos senadores jujeños, sus adversarios creen que ahora las decisiones deben tomarlas lo gobernadores electos. Pese al mal desempeño electoral del domingo pasado y la pérdida de bancas en el Congreso, la UCR se consagró este año en cinco provincias. Según pudo reconstruir este medio, son los que impulsan la unidad de Juntos por el Cambio, pese a la fuerte interna que atraviesa la coalición, el peligro de ruptura y la feroz interna en el PRO.
De hecho, luego de la reunión que convocó Morales para en el Comité, a las 19 habrá una reunión de los 10 gobernadores de Juntos por el Cambio en la Casa de Corrientes, entre ellos, Alfredo Cornejo (Mendoza), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Ignacio Torres (Chubut), Marcelo Orrego (San Juan), Claudio Poggi (San Luis), Leandro Zdero (Chaco) y Carlos Sadir (Jujuy), más Gustavo Valdés. Maximiliano Pullaro (Santa Fe) no podrá concurrir por un compromiso que tiene en Estados Unidos.
Entre los gobernadores radicales que asistirán a la Casa de Corrientes hay un discurso unificado: “Hay que mantener unido a Juntos por el Cambio”. Se niegan a expresarse a favor de Massa o de Milei ya que creen que sus declaraciones o apoyos no garantizan la victoria de ninguno. “Nadie está esperando a ver qué decimos para elegir a uno de los dos. Nadie es dueño de los votos”, insisten.
Es más, algunos se aventuran a asegurar que hay militantes correligionarios que están dispuestos a optar por los libertarios, pese a la catarata de insultos que recibieron por parte del líder de la Libertad Avanza. “Hay muchos radicales que se niegan a votar por un peronista”, advierten.
En público y en privado ningún radical se anima a hablar de un acuerdo con Massa, aunque todos reconocen que ya existen negociaciones y no descartan futuros acuerdos. “Todos son acuerdos individuales. Massa puede ofrecer Ministerios y habrá radicales que acepten, pero nunca en nombre del partido”, resaltan. Justamente, los gobernadores electos tienen sus propias alianzas locales con las que deben acordar estrategias, por lo que descartan un pronunciamiento público. “Tenemos que estar unidos y acordar una estrategia para poder dialogar con el futuro presidente”, analizan.