Patricia Bullrich les pidió a los votantes de Milei que “no compren espejitos de colores” y fustigó a Massa por la inflación

En la plaza de Barrancas de Belgrano, en el norte de la Ciudad de Buenos Aires, flamean banderas de Argentina que se mezclan con otras de color amarillo del PRO y algunas blancas con el logo de Juntos por el Cambio (JxC). Miles de personas se acercaron a uno de los últimos actos de campaña a pocos días de una elección presidencial clave. “Hoy los invité para decirles que no están solos. Estamos juntos en esto”, esa arenga fue uno de los momentos más eufóricos del discurso. Es 28 de septiembre de 2019 y Mauricio Macri habló ante la multitud en la primera marcha del “Sí, se puede”, con la que buscaba revertir el resultado de las PASO y meterse en el balotaje: “Vamos a defender el país que queremos, todos juntos”, aclamó el entonces Jefe de Estado. Cuatro años después, en el mismo lugar, con los mismos colores y con tanto sol como en aquella primavera, Patricia Bullrich, candidata a Presidenta de JxC, busca lograr idéntica mística y el mismo objetivo: obtener la cantidad de votos necesarios para llegar a la segunda vuelta electoral.

La ex ministra de Seguridad apostó a recobrar la épica del partido que fundó Macri para alentar a la militancia propia y contagiar a los votantes ajenos e indecisos a que la apoyen el próximo domingo. En un acto ante cerca de 10.000 personas, dio un discurso de casi media hora en el que apuntó contra el kirchnerismo, cuestionó a Sergio Massa, candidato a Presidente de Unión por la Patria, y buscó diferenciarse de Javier Milei, líder de La Libertad Avanza, al considerar que las ideas libertarias son “malas y no se pueden llevar a cabo”.

“Quiero ser Presidenta de la Nación para sacar a la Argentina del pozo que sigue cavando Massa todos los días”, sostuvo Bullrich en un tramo de su alocución. Al conocer el resultado de las PASO, que tuvo a Milei como el más votado y a JxC en la incómoda situación de tener que diferenciarse del libertario y, al mismo tiempo, confrontar con el Gobierno, la mesa estratégica de la ex ministra de Seguridad coincidió en que era necesario generar épica en la campaña hacia las generales del 22 de octubre. Así surgió la idea de la caravana en la Patoneta y, también, los actos al estilo del “Sí, se puede” macrista de 2019.

Hernán Lombardi, que había sido uno de los ideólogos de aquellas marchas del 2019, es hoy uno de los pilares del equipo bullrichista que impulsó la propuesta. Otros dirigentes y asesores del círculo de la candidata también estuvieron de acuerdo -presentes esta tarde en el acto-, como Juan Pablo Arenaza, Damián Arabia, Derek Hampton, Federico Angelini, Sebastián García De Luca o Laura Alonso. “En una campaña la épica y la emoción es fundamental”, sostuvo en esa línea un armador de Bullrich.

Con esa tónica, la ex ministra llegó esta tarde a la plaza de Barrancas de Belgrano. La escoltaron Jorge Macri, candidato a Jefe de Gobierno de JxC, y Horacio Rodríguez Larreta, alcalde anfitrión y recientemente designado como su eventual Jefe de Gabinete si Bullrich llega a la Presidencia. Ambos la precedieron en el uso de la palabra y le dieron euforia a la previa del discurso de cierre, a cargo de la candidata presidencial. “Si mostramos que en la Ciudad se pudo, se va a poder en el país”, sostuvo el jefe de Gobierno y arengó hasta quedarse disfónico: “Se siente, se siente, Patricia presidente”

Jorge Macri, en tanto, expresó que le da “orgullo” estar “parado sobre dos grandes gestiones como son las de Mauricio (Macri) y la de Horacio (Rodríguez Larreta). Como gesto para seducir al radicalismo, el ministro de Gobierno aprovechó el acto para hacer un guiño a Martín Loustau. “Fue un muy buen candidato. Un aplauso para Martin y toda la gente que lo votó. El 56% de los votos que logramos entre los dos tiene que ser un punto de partida”, aseguró el primo del ex Presidente.

A las 17:44, para darle clausura al primero de los siete actos de cierre de campaña que hará esta semana, comenzó el discurso de Bullrich. Desde el inicio tuvo un tono enérgico, con la palabra “fuerza” como el eje de su narrativa, el kirchnerismo como principal antagonista y a Milei como punto sobre el cual diferenciarse. “Después de 20 años de kirchnerismo tenemos miedo de andar por la calle, de que nos maten, de que nos bloqueen las rutas y las fábricas”, expresó la candidata y continuó: “Nos duele que nuestros mayores vivan con la jubilación de hambre que viven”.

En esa línea, sostuvo: “No nos vamos a dejar amputar el futuro nunca más”. Y trató de empatizar con el público: “Ustedes saben que hemos peleado con toda la fuerza contra las mafias sindicales, que hemos luchado contra el kirchnerismo corrupto, que nunca aflojé y que nunca voy a dar un paso atrás”.

Al mismo tiempo, se diferenció de Milei al resaltar la “fuerza” de más de 10 gobernadores, 500 intendentes y de mayorías parlamentarias. “No salimos de un repollo, salimos de la lucha de por la república”, expresó. Bullrich pretende mostrar el volumen político y técnico de JxC en detrimento de la propuesta del candidato de La Libertad Avanza. Por eso, habló de llevar adelante un “cambio profundo, verdadero y definitivo” pero remarcó que se trata de un “cambio posible”. De inmediato apuntó contra el libertario: “Le digo a los jóvenes que lo votaron que dolarizar sin dólares no se puede, no se compren espejismos de colores”.

La candidata apeló al significante “mafia” para diferenciarse del de “casta” que usa Milei. Incluso, la militancia coreó “la mafia tiene miedo” con el mismo ritmo que los libertarios gritan “la casta tiene miedo”. En ese contexto, apuntó contra el economista de la Escuela Austríaca por su alianza con el dirigente sindical. “Vos decís que venís a combatir la casta, pero con Barrionuevo a la casta la tenés adentro”, azuzó.

En cuanto a la situación económica, la dirigente catalogó que “Argentina está arruinada” y sostuvo que “a Massa lo único que le importa es su ambición desmedida de poder, se le nota en la cara y en los ojos”. En ese marco disparó contra el affaire de Martín Insaurralde y la “corrupción kirchnerista” Y dijo: “Un día del yate de Insaurralde vale siete años de jubilación mínima”.

Durante el acto, Bullrich fue acompañada por los principales referentes de JxC como los diptuados nacionales del PRO Cristian Ritondo, Diego Santilli, María Eugenia Vidal y de la Coalición Cívica Maximiliano Ferraro. También estuvieron los dirigentes larretistas Clara Muzzio, compañera de fórmula de Jorge Macri, Silvia Lospennato, candidata a diputada nacional, Emmanuel Ferrario, Vicepresidente 1° de la Legislatura, y Julia Pomares, jefa de Asesores de CABA.

Además, estuvieron los candidatos a diputados nacionales por CABA Silvana Giudici, Maximiliano Guerra, Daiana Fernandez Molero, Hernán Iglesias Illa. Los legisladores nacionales Sabrina Ajmechet, Fernando Iglesias. El jefe de campaña de Jorge Macri y hombre de confianza del ex Presidente, Fernando De Andreis, el jefe de campaña porteño de Bullrich, Ezequiel Daglio. El candidato a Parlamenterio del Mercosur, actor y dirigente racial Luis Brandoni. Los dirigentes porteños Roberto García Moritán, de Republicanos Unidos, Sergio Abrevaya, del GEN, y Claudio Avruj, del PRO.

En tanto que asistieron integrantes de la mesa chica bullrichista como Carlos Cortés, jefe de prensa, Federica Suarez Santiago, coordinadora de comunicación, Cristian Larsen, director de la TV Pública por la oposición y a cargo de la logística de campaña, e Iván Velasco, del equipo de campaña de la ex ministra en CABA.