Enviado especial a Mar del Plata - “Estoy convencido de que estamos en un momento histórico, crucial para definir el futuro de nuestra querida Argentina. Esta es la última oportunidad, Argentina ha empezado a tener indicadores sociales y económicos similares a países que antes no mirábamos, porque en su mayoría han sido mucho más pobres que nosotros, como los países de centroamérica o los pertenecientes a la región andina. La obstinación de la dirigencia por mantener un rumbo a pesar de las cambiantes situaciones nos ha llevado al desastre. No nos queda mucho tiempo para rectificar el rumbo y tener una salida que genere empleo, riqueza y producción”.
Con ese pedido urgente, y un extenso aplauso de pie de los presentes en el auditorio del hotel Sheraton, el ex senador Esteban Bullrich cerró este viernes el coloquio de IDEA de Mar del Plata antes de las palabras finales de los organizadores, y pidió un acuerdo entre los sectores público y privado.
“Un país mejor requiere de dirigentes políticos, empresarios, religiosos y comunitarios más comprometidos, valientes y con decisión. Para sacar a la Argentina adelante hacen falta dirigentes con valores, hacen falta equipos en todas las instituciones con ganas de transformar equipos diversos, con diferentes orígenes, que hayan transitado la gestión pública y el sector privado y que puedan coordinarse sin medias tintas”, agregó.
“Creo que esta elección es clave para tomar ese camino de progreso, por eso hoy les voy a hablar de cómo veo nuestra Argentina. No voy a hablar de ningún candidato presidencial, aunque tengo una preferencia y no es porque sea de la familia”, aseguró el ex ministro de Educación en alusión a Patricia Bullrich, y despertó las risas del auditorio.
En mayo pasado, el ex ministro había presentado su propuesta de “12 puntos para un acuerdo nacional” que conversó con diversos sectores políticos, empresarios y sindicales. Entre ellos, con la cúpula de IDEA.
“En última instancia todos seremos juzgados y a medida que pasen los años seguramente nos juzgaremos a nosotros mismos por el esfuerzo que hemos contribuido a construir una nueva sociedad, y hasta qué punto nuestros ideales y objetivos han dado forma a ese acontecimiento. Nuestro país es maravilloso, pero durante años fue mal gestionado, nos pasamos hablando de los temas sociales y de los problemas que tenemos y no terminamos de entender que la mejor forma que tenemos de salir de la pobreza es la educación de calidad y la generación de empleo”, resaltó.
Bullrich cargó, además, contra “el populismo”: “Durante años se ha encargado de destruir con la polarización y la posverdad”, dijo. “Es como si yo dijera que estoy parado frente a ustedes con una coca en la mano como si eso fuera posible”, subrayó.
“Hay que ir por un cambio profundo de una vez. Las instituciones democráticas se encuentran en peligro, tenemos que volver a recuperar el valor de la palabra, con la confianza, las sociedades que mejor funcionan, como ya lo escribía muy bien el maestro Francis Fucuyama, son las que tienen confianza en sí misma. Somos una sociedad que no confía en nosotros mismos, y tampoco existe la confianza entre nosotros. La única forma de lograr un cambio en serio es construir esa confianza que hemos perdido. Hay que recuperarla como valor transversal. La palabra es clave. La verdad es un valor innegociable en la Argentina que se viene, tenemos que volver a creer, tenemos que estar convencidos de que los países que se desarrollaron tardaron muchos años, no lo hicieron con soluciones mágicas, seguimos buscando siempre el salvador de turno, alguien que nos resuelva los problemas rápido, sin dolor y sin darnos cuenta, cuando no es así en la vida de uno”, remarcó.
El jueves, el ex senador había participado de una actividad vinculada a la educación en el Torreón del Monje, frente al mar, junto al intendente Guillermo Montenegro y el candidato a gobernador bonaerense de Juntos por el Cambio, Néstor Grindetti. El evento iba a contar con la presencia de la candidata presidencial de JxC, pero la ex ministra de Seguridad prefirió enfocarse en su disertación en el coloquio: fue la única postulante a la Presidencia que viajó hasta esta ciudad y su presentación se dio a la misma hora en que Javier Milei organizó una contracumbre en un restorán sobre la calle Rawson.
“Tengo la convicción de que podemos sacar a nuestra Argentina de la situación calamitosa en la que se encuentra. No va a ocurrir mañana o el mes que viene, pero estemos seguros de que trabajando juntos los argentinos podemos construir un mejor futuro. Estamos en un momento que podemos hacer historia, tenemos la oportunidad de hacer cambios significativos y transformar nuestra realidad como país. Debemos dejar atrás la apatía y volver a ilusionarnos con un futuro próspero y justo. Es posible, ahora viene lo mejor y es para siempre. Ahora viene lo mejor, que Dios los bendiga”, cerró el ex legislador su exposición, mientras los ejecutivos de empresas ya empezaban a preparar la vuelta a Buenos Aires.