Con el peronismo unido, Sergio Massa relanzó la campaña: “Vamos a dar vuelta la historia, lo peor ya pasó”

(Desde San Miguel de Tucumán, Enviado especial) - El candidato a presidente por Unión por la Patria, Sergio Massa, recibió el apoyo de todos los sectores del peronismo y relanzó la campaña de cara a las elecciones generales del 22 de octubre. Desde Tucumán, planteó fuertes críticas a la oposición y sus propuestas, y también brindó un mensaje dirigido en simultáneo a la militancia del PJ y a sus votantes: “Lo peor ya pasó, viene un nuevo gobierno”, afirmó.

Al rayo de un sol inclemente y casi de verano, el ministro de Economía encabezó un acto multitudinario en el hipódromo de las afueras de la capital tucumana, que convocó a más de 50 mil personas. Fue el corolario de 20 horas febriles de actividades entre la noche del viernes y la tarde de este sábado, que sirvieron para mostrar al peronismo unido y encolumnado detrás de la candidatura de Massa y Agustín Rossi. Convocados por el gobernador local, Juan Manzur, mandatarios provinciales, legisladores, funcionarios, líderes sindicales y de movimientos sociales viajaron a la provincia. Estuvieron de Máximo y Alicia Kirchner, a Alberto Rodríguez Saá, de Pablo Moyano a Emilio Pérsico, de Gildo Insfrán a Hugo Yasky y Victoria Tolosa Paz.

Trece gobernadores, más de 50 diputados y senadores nacionales, ministros, los principales líderes de la CGT y de la CTA, los líderes de movimientos sociales y dirigentes industriales de las provincias del norte del país apoyaron al candidato de Unión por la Patria, que puso en marcha una nueva etapa de la campaña, con una narrativa renovada y un adversario excluyente: el diputado libertario Javier Milei, ganador sorpresivo y aluvional de las PASO.

En simultáneo, Massa estuvo trabajando con el funcionario de la AFIP, Guillermo Michel, los puntos finales de los cambios en el Impuesto Ganancias que serán anunciados mañana, del Presupuesto que presentará en Diputados la semana próximas, y también del fallo de la Justicia de Estados Unidos sobre YPF, que fijó en hasta 16 mil millones de dólares el pago por la expropiación de la petrolera dispuesta por el gobierno de Cristina Kirchner.

De todos modos, la agenda en Tucumán estuvo enfocada 100% en la cuestión política-electoral. El ministro/candidato llegó a última hora del viernes con un avión repleto de funcionarios y dirigentes del peronismo que participaron de un acto institucional en la Casa de Gobierno de Tucumán, donde firmaron una serie de convenios de obras de infraestructura, con varias provincias del norte.

Luego, se fueron a la casa de Manzur, en Yerba Buena, donde se habló con detalle de la situación política y de la etapa que viene. Entre medio de tamales, empanadas fritas, carne y ensalada, los dirigentes del “pan peronismo” hablaron sobre el resultado de las PASO y la sorpresiva irrupción de Milei en las provincias del norte. Hubo mea culpa y catarsis: “Estábamos tranquilos porque a los candidatos de Milei no los votaron, no habían carteles, ni rosca con las listas. Milei se nos metió a los territorios por las redes sociales”, reconoció uno de los gobernadores que participaron de la cena. Todos coincidieron: “No lo vimos venir”.

Más allá de ese encuentro, donde hablaron Manzur, Axel Kicillof, Rodríguez Saá, Alicia Kirchner y cerró Sergio Massa, el peronismo se juramentó mantener la unidad, redoblar los esfuerzos y la militancia y recuperar entre 750 mil y un millón de votos que quedaron en el camino en las PASO por una campaña entre anodina y hecha a media máquina. “A mí también me pasó. Para las primarias estuve más enfocado en el FMI que en la campaña”, dijo Massa.

Más allá del shock por un resultado magro en las PASO -Massa fue el segundo más votado pero Unión por la Patria quedó relegado al tercer lugar, después de Juntos por el Cambio- los líderes del peronismo admitieron haber perdido la batalla en las redes sociales. En Tucumán se confirmó que el comando de campaña del oficialismo puso en marcha una batería de medidas para enfrentar el desafío digital de La Libertad Avanza. Pero los caudillos peronistas insistieron con la necesidad de redoblar la militancia, a la vieja usanza.

“Le quieren ganar al peronismo con el TikTok. ¿De qué estamos hablando, si los únicos que pueden entrar a los barrios somos nosotros? Que ellos sigan con el TikTok, que nosotros vamos a ir a cada casa, en cada pueblo, en cada barrio”, afirmó Manzur en el discurso que dio en el Teatro Mercedes Sosa. Allí ocurrió en la mañana del sábado un encuentro entre la dirigencia que llegó con Massa de Buenos Aires y los intendentes, legisladores provinciales y gobernadores de todas las provincias del norte grande.

En esa sala, de 1.600 butacas que estuvieron en su totalidad ocupadas, hablaron también Rossi y el propio candidato a presidente de Unión por la Patria, que horas antes había compartido un desayuno con los presidentes de todas las delegaciones de la Unión Industrial de las 10 provincias del norte. Ante ese auditorio planteó los riesgos si se llega a imponer el líder libertario, por sus propuestas de eliminar la obra pública, anular la actual la coparticipación federal y desandar el camino de la integración con el Mercosur o el bloque de los BRICS.

Después del encuentro en el teatro ubicado frente a la Plaza Independencia, todos se fueron caminando hasta la Casa Histórica donde se declaró la Independencia, donde se sacaron una foto. Allí, Massa afirmó que “ahora que jugamos por los porotos van a ver al peronismo en la cancha”.

Después del raid de actividades, la delegación de dirigentes peronistas fue al hipódromo de San Miguel de Tucumán, donde se desarrolló el acto central que organizó Juan Manzur, con presencia de militantes y referentes políticos de todas las provincias del norte del país. Los organizadores hablaron de una asistencia de 100 mil personas, pero otras fuentes hablaron de la mitad.

Lo cierto es que el gobernador local pronunció un breve discurso de presentación, en el que le habló a la militancia y expresó su respaldo al candidato de Unión por la Patria: “Andá para adelante, agarrate fuerte del timón y conducí el barco. Los votos que hagan falta para que Sergio Massa sea presidente los pone el Norte argentino”, afirmó.

Por su parte, Massa en su discurso habló de los desafíos que enfrenta la Argentina, reconoció los problemas que tiene en materia económica, pero responsabilizó al gobierno anterior. E insistió con la idea que ya había referido días atrás de “pedir perdón” a aquellos que votaron a la actual gestión por no haber cumplido con sus compromisos.

“Tengamos la humildad y la grandeza de pedirles perdón, de decirles que sabemos que hay muchas cosas que esperaban que no se hicieron, algunas porque no permitió el contexto, otras porque faltó en algún funcionario coraje. Cambiemos a esos funcionarios, pongamos lo que hace falta, pero vayamos a buscar a esos vecinos, a decirles que vengan a trabajar con nosotros”, afirmó.

Tanto en el hipódromo como en la Casa de Gobierno y en el Teatro Mercedes, Massa puso en el escenario un tema que estuvo hasta ahora ausente. Les habló a los jóvenes que trabajan en plataformas como pueden ser la vinculadas a reparto o a servicio de transporte -del estilo Rappi o Uber- y también a aquellos que trabajan en la informalidad o en la denominada “economía informal”. “Defender el trabajo es defender a aquellos a los que todavía el Estado no protegió, es defender esos pibes que están en la economía de plataformas y a esos trabajadores que están en la economía social o en la economía popular. A ellos, el Estado no les dio una respuesta”, reconoció Massa.

Y sobre las críticas a la gestión anterior, el candidato de Unión por la Patria afirmó: “Hace 6 años, Macri llevó a la Argentina a la hipoteca más grande de su historia con el FMI. Puso a la Argentina en convocatoria, nos dejó de rodillas frente al Fondo y frente a los fondos financieros internacionales y nos dejó sin crédito. Viene el tiempo de decirle al Fondo que vamos a juntar nosotros nuestros dólares con nuestro trabajo, vamos a pagar para que se vuelvan a ir de la Argentina y nos dejen decidir de manera soberana”.

“Vienen con las AFJP bajo el brazo, quieren volver a poner en la Argentina el sistema de AFJP. No lo vamos a permitir. Vamos a defender el sistema de jubilación pública, porque nada es más importante que cada generación que trabaja, ayude en ese pacto de unidad social a la generación que se retira del mercado de trabajo. Esa idea de que cada uno se la arregle, es la idea del sálvese quien pueda. No creemos en el sálvese quien pueda”, aseguró, en una crítica que apuntó sobre todo a Milei.

Prometió que va ser “el presidente de los trabajadores en la Argentina, el que le devuelva a nuestros trabajadores el poder de compra que han perdido en el salario. Voy a ser el presidente que le devuelva a los trabajadores la dignidad de discutir y de lograr su mejor ingreso, no a partir de la receta que impone el FMI sino de lo que decidamos en la paritaria libre en la Argentina”.

“Les quiero pedir que de acá al 22 de octubre, barrio por barrio, casa por casa, rancho por rancho, negocio por negocio, fábrica por fábrica, chacra por chacra, vayamos a buscar a cada argentino, digámosles que lo peor ya pasó, que viene un tiempo nuevo, que viene un nuevo gobierno y que lo vamos a hacer juntos”, concluyó.