Lograr un candidato único a presidente y fortalecer el partido eran los dos objetivos que la UCR se había propuesto para esta elección, luego del frustrado gobierno de coalición con Mauricio Macri en 2015. El primero fracasó y el segundo se terminará de poner a prueba este domingo. El partido centenario logró convertirse en el centro de las negociaciones en los cierres de listas, donde hizo valer su territorialidad, pero no logró establecer una estrategia electoral conjunta para imponerse ante el PRO dentro de Juntos por el Cambio.
En las últimas semanas de la campaña para las PASO, los dirigentes radicales se convirtieron en figuras deseadas por el PRO. Tanto Horacio Rodríguez Larreta como Patricia Bullrich buscaron mostrarse con los correligionarios, con el objetivo de mostrar mayor apoyo en la pelea por ganar la interna de la coalición opositora.
Además de Gerardo Morales, actual precandidato a vicepresidente, el ala moderada sumó a Facundo Manes a sus filas. El jujeño y el neurólogo eran los dos dirigentes que protagonizaron la pelea por convertirse en el presidenciable radical pero ninguno de los dos llegó a la meta.
Manes era el outsider de la UCR que había logrado cosechar un importante caudal de votos en la provincia de Buenos Aires en las legislativas del 2021. Con ese antecedente buscó encolumnar al radicalismo detrás de su figura y ampliar Juntos por el Cambio con el peronismo cordobés de Juan Schiaretti. Su plan fracasó y se sumó a las filas de Rodríguez Larreta, como consecuencia, rompió su alianza con el titular del Comité Provincia, Maximiliano Abad.
El marplatense quedó del otro lado y, tras quedarse afuera de la fórmula presidencial de los halcones del PRO, pasó a convertirse en el radical con grandes chances de pelear lugares de poder, en caso de ganar este domingo con la lista que lo tiene como postulante al Senado. Además, sumó peldaños en la relación con Bullrich, en medio de los coqueteos de Alfredo Cornejo con Rodríguez Larreta, en el marco de su campaña por ganar la Gobernación de Mendoza. Como respuesta al apoyo de Manes al jefe de Gobierno porteño, la ex ministra de Seguridad logró una foto con Ernesto Sanz en un acto en Mar del Plata.
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El único correligionario que no se expresó por ninguno de los dos sectores es Gustavo Valdés. El gobernador correntino recibió en reiteradas oportunidades a ambos precandidatos en su provincia pero evitó mostrarse en un bando particular. Sin embargo, según deslizaron a Infobae desde su entorno, en los últimos días tuvo una “leve inclinación” por el ala dura de Juntos por el Cambio en una seguidilla de gestos en sus redes sociales, entre ellos, reiteradas reuniones con Luis Petri.
La apuesta por sumar territorialidad
Los últimos comicios indican que la UCR no sólo mantendrá la Gobernación en las tres provincias - Jujuy, Corrientes y Mendoza- sino que también podría sumar a Santa Fe. Maximiliano Pullaro se encamina a una victoria en las próximas elecciones del 10 de septiembre, luego de haber cosechado cerca de 500 mil votos en la PASO de Juntos por el Cambio, donde venció a Carolina Losada y Mónica Fein. En su equipo estratégico aseguran que para las generales podrá retener a los seguidores de la senadora radical. De hecho, aseguran que los intendentes que la apoyaron durante la campaña se sumaron a sus filas.
Pero el gran desafío de Evolución será este mismo domingo cuando Martín Lousteau se enfrente a Jorge Macri en la interna porteña de Juntos por el Cambio. El senador busca terminar con 16 años de gobierno PRO en la ciudad de Buenos Aires. Su equipo estratégico apuesta al voto joven y al kirchnerista. Creen que, aunque las encuestas lo favorezcan a Leandro Santoro, no llegará a convertirse en el candidato más votado. “Tiene que tener más de 25 puntos y no llega”, analizaron en diálogo con Infobae.
Además, en Evolución creen que la estructura larretista les jugará a favor en el desarrollo de los comicios. De hecho, le bajaron el tono a la foto que sumó Jorge Macri con el ex presidente, Bullrich y Larreta. “Se sacaron una foto solos, sin gente”, bromean.
Además de los territorios, este domingo se definirá quiénes serán los correligionarios que tomarán el mando en la UCR y encararán la renovación. En caso de que gane Rodríguez Larreta, Gerardo Morales validará su liderazgo al frente del Comité Nacional, en tiempos en que Valdés lo desafía. Si gana Bullrich, la posta quedará en manos del eje Mendoza-provincia de Buenos Aires, territorio de Abad, Cornejo y Sanz.
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