Luego de las demoras con el voto electrónico que extendió el horario de votación en siete escuelas porteñas, finalmente, cerraron los comicios en la Ciudad de Buenos Aires.
El candidato a Jefe de Gobierno porteño por la Libertad Avanza, Rodrigo Marra, dijo en conferencia de prensa: “Quiero destacar lo vergonzante de lo que pasó en la Ciudad de Buenos Aires. Fue muy grave”.
El candidato del espacio de Javier Milei agregó en relación a los problemas con el voto electrónico que retrasó una hora y media el cierre de los comicios en siete escuelas: “Cambiaron las reglas a último momento. Nosotros lo dijimos, quisieron beneficiar a un candidato en particular y lo que tuvimos fue damnificación a los porteños que fuimos a votar”.
Para cerrar, Marra señaló: “Estamos muy preocupados por lo que pasó”.
El secretario de la presidencia Julio Vitobello pidió “paciencia” este domingo tras el cierre de los comicios en gran parte del país porque el recuento de votos va a ser más lento en algunos distritos. Uno de ellos es la Ciudad de Buenos Aires.
En ese sentido, explicó cómo se procederá una vez que finalice el escrutinio porteño, que la jueza María Servini extendió hasta las 19.30 en 7 escuelas.
Primero se contarán los votos de la elección nacional, con las boletas de papel. “Terminado el escrutinio, se realiza el escrutinio de la otra urna, que es boleta electrónica. Recién cuando se termina el segundo escrutinio se pueden trasmitir los resultados”, dijo Vitobello. Y añadió: “Eso va a retrasar la llegada de los datos”.
La Justicia informó que son siete las escuelas porteñas en las que se extendió la votación hasta las 19.30. Según la decisión de la jueza federal de Capital Federal, María Servini, trata de:
En diálogo con el canal América, la jueza Servini dijo que “el sábado por la noche los técnicos que debían instalar las máquinas no fueron” sino que recién estuvieron esta mañana, “y por eso hubo demoras”, explicó. Y recordó que envió a la Cámara Nacional Electoral “dos actas”.
También la magistrada mencionó que hay países, como Holanda, donde “se está dejando de lado la bolecta electrónica”.
La jueza federal electoral de Capital Federal, María Servini, ordenó que se garantice el derecho de voto de las personas que a las 18 aún están en las filas de los colegios. Así, la magistrada autorizó a extender la votación hasta las 19.30 pero solo para aquellos que ya estaban en los colegios, ya sea afuera o adentro, a la hora del cierre de los comicios.
A raíz de las demoras que se produjeron con el voto electrónico en la Ciudad de Buenos Aires, en algunas escuelas no todos habían podido votar a las 18, cuando se cierra el horario de votación. Por lo que, según fuentes oficiales, se decidió que en aquellos colegios porteños en los que todavía hay cola afuera, “les van a permitir votar hasta las 19.30″.
La Cámara Nacional Electoral manifestó su preocupación por los problemas con el voto electrónico luego que la jueza federal electoral de la Capital Federal, María Servini, enviara dos oficios este domingo por “las demoras, inconvenientes y mal funcionamiento del sistema de votación con boleta única electrónica (BUE)”.
“La Cámara Nacional Electoral informa que ‐de conformidad con lo dispuesto por la magistrada‐ ‘el mal funcionamiento [de] las máquinas de votación de la elección local’, no debe interrumpir la votación en la elección nacional, ‘quedando bajo exclusiva responsabilidad del [Instituto de Gestión Electoral] y de la empresa contratada, las consecuencias [para la ciudadanía] de la situación generada’”, reza el comunicado que fue enviado esta tarde.
Además, desde la Cámara Nacional Electoral repitieron “que la implementación de tecnología en el sistema de votación requiere que se cumplan, para la tutela de los derechos de la ciudadanía, condiciones de seguridad y auditoría indispensables”.
Y destacó que, como se estableció en esas condiciones, para la incorporación de tecnología se “requiere el diseño y ejecución de un exhaustivo e integral plan de auditorías”. Eso incluye, componentes de hardware, software, código fuente, infraestructura de redes, entre otros, con intervención de la totalidad de los sujetos calificados. “Esas condiciones no han sido cumplidas por las autoridades electorales de la Ciudad al implementar el sistema en cuestión”, se indicó.
También remarcó que la Cámara lo había advertido el pasado 27 de julio, “en ocasión de considerar el respectivo convenio de colaboración entre la justicia nacional electoral y la autoridad electoral local, al dejar expresa constancia de las falencias que presentaba en ese sentido la instrumentación del voto con BUE”.
Y concluyó el comunicado: “En este contexto, y sin perjuicio de las medidas que las autoridades competentes adopten en sus ámbitos respectivos, la Cámara Nacional Electoral manifiesta su preocupación por la situación generada, en tanto dificultó la participación de los votantes en la Ciudad y también en el proceso de votación para cargos nacionales, ajeno a las deficiencias de dicho sistema electrónico local”.
El precandidato a Jefe de gobierno porteño de Juntos por el Cambio Martín Lousteau y Unión por la Patria pidieron extender el horario de votación en CABA por las demoras para votar a causa de los problemas que hubo con las máquinas para hacer el voto electrónico.
La decisión de extender el horario o no en las escuelas porteñas la tomará la jueza electoral de la ciudad de Buenos Aires, María Servini, a las 17.30. La magistrada había alertado acerca de una serie de problemas que surgieron con las máquinas que generan las boletas electrónicas con las que se votará en la ciudad para los cargos locales.
Maximiliano Ferraro, precandidato a Diputado Nacional por El Cambio de nuestras vidas, votó en el Instituto Inmaculada Concepción en CABA: “La sociedad, más allá del enojo y la angustia que está atravesando por este momento actual de la Argentina, pone en valor la decisión de poder votar”.
Y agregó: “A 40 años de recuperada la democracia, quiero celebrar y poner en valor que estemos votando. Lo importante es que la gente vaya a votar y participe porque hoy, más que nunca, empieza el primer paso para decidir el futuro de la Argentina”.
A raíz de las demoras en la votación electrónica que se registra en varias escuelas porteñas, que en algunos casos supera la hora y media, desde la Cámara Electoral Nacional responsabilizaron al gobierno porteño por la situación.
“La elección en la Ciudad está a cargo de Servini en lo que respecta a la elección nacional y a cargo de los organismo de la ciudad en lo que corresponde a las categorías locales”, explicó a TN Sebastián Schimmel, secretario de la Cámara Nacional Electoral.
“El juzgado informó con claridad cuando encontró los inconvenientes con el funcionamiento de los dispositivos locales, que es algo bajo responsabilidad de las autoridades locales. Eso se encuentra fuera del ámbito de la competencia de la jueza Servini de Cubría”, precisó.
Si bien hasta el momento no hay ninguna comunicación oficial con respecto a extender el horario de votación en CABA, Schimmel no descartó que pudiera suceder. “Llegado el momento y dada la necesidad ella (Servini) lo informará”, afirmó.
Las quejas por las demoras para votar en la Ciudad de Buenos Aires se multiplican en las redes sociales, donde los usuarios comparten su ubicación y exhiben fotos de las extensas filas para poder sufragar debido al mal funcionamiento de las máquinas que emiten las boletas electrónicas.
En la mesa 824, de la Facultad de Medicina, por ejemplo, los ciudadanos tenían que esperar más de media hora ante de ingresar al cuarto oscuro.
Si bien hay muchos que no saben cómo sufragar con este nuevo sistema y eso hace que se lentifique el trámite más de lo habitual, también se presentan otros problemas. La gente asegura que hay máquinas que no encienden, otras que se apagan y algunas que directamente no imprimen las boletas.
Lo mismo ocurrió en el colegio de San Cristóbal donde votó Leandro Santoro, precandidato a Jefe de Gobierno de Unión por la Patria; y en la escuela de Recoleta donde sufragó Jorge Macri, precandidato a Jefe de Gobierno de Juntos por el Cambio.
En los barrios de Villa Devoto y Palermo, el cuadro era aún más caótico ya que los votantes tenían que esperar más de una hora. En Devoto, por ejemplo, de los cuatro colegios habilitados sólo uno funcionaba con normalidad.
En el barrio de Caballito, en tanto, el enojo de los votantes era tal que muchos optaron por salir de la fila y volver a sus domicilios sin sufragar.