Alberto Fernández recibió este sábado por la tarde a la familia de Morena Domínguez, la nena que fue asesinada en la localidad bonaerense de Lanús cuando se dirgía a la escuela. La víctima fue abordada por dos motochorros que la empujaron y golpearon para robarle el celular. Según pudo saber Infobae, el encuentro duró dos horas y también participó la portavoz Gabriela Cerruti.
El Presidente recibió a las 19.15 a los familiares de Morena, entre ellos, el padre y la madre, el hermano, primos y tíos. En encuentro culminó pasadas las 21 y, según informaron, se tomaron una foto.
El hecho ocurrió el miércoles cuando Morena fue abordada a metros del colegio por dos delincuentes que la golpearon para robarle el celular y la mochila. La secuencia (trágica) quedó grabada. En el video se observa el momento exacto del ataque que dejó a la nena tendida en al asfalto. Previo a eso, se ve cómo el motochorro que viajaba como acompañante se bajó para agarrar las pertenencias de la víctima y luego volvió a abordar el vehículo para escapar. En ese momento, un automovilista intentó encerrar a los delincuentes, que también fueron perseguidos por una persona, pero no hubo forma de detenerlos.
Tras el episodio, se solicitó una ambulancia al 911 que, según el relato de los vecinos, llegó 40 minutos más tarde. Mientras tanto, a Morena la llevaron a la escuela donde la madre de uno de los alumnos, de profesión enfermera, le practicó maniobras de reanimación cardiopulmonar. “Ella estaba acostada en un pupitre, inconsciente. Entonces lo primero que hice fue acostarla en el piso y le empecé a hacer RCP. Pero no hubo reacción ante las compresiones. Entre 5 y 10 minutos después llegó el SAME. Intervinieron los médicos, le pusieron el desfibrilador, la intubaron para pasarle oxígeno, pero siguió sin responder”, contó a Infobae Daiana.
Ante este escenario, a Morena la subieron a la ambulancia y la trasladaron al Hospital Evita de Lanús, donde llegó a las 8.30. Daiana la acompañó en el trayecto. “En todo momento la nena estuvo inconsciente”, reveló la enfermera, que no alcanzó a observar heridas en el cuerpo de la víctima: “Otras mamás dijeron que tenía raspones en la espalda y en la rodilla, pero yo no se las vi”.
A las 9.20, cincuenta minutos después del arribo al hospital, Morena falleció. El deceso lo confirmó a los medios el director médico de la institución, Javier Maroni, quien detalló que la niña llegó inconsciente y con muchas heridas. “Luego de realizar maniobras de reanimación se logró estabilizarla, se la trasladó a terapia intensiva pediátrica, donde finalmente falleció. Para nosotros fue producto de un trauma craneoencefálico grave, pero deberá ser confirmado por la autopsia”, sostuvo.
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Horas más tarde, los detalles preliminares de la autopsia, que se practicó en la Morgue Judicial de Lomas de Zamora, revelaron que Morena murió a causa de una hemorragia interna producto de un desgarro en el hígado causado por el profundo golpe que recibió. En otras palabras: la piña en la panza que le dieron los asesinos a la nena fue mortal.
Para las 10.57 el caso ya encabezaba los principales portales de noticias y despertaba indignación popular. La investigación, a cargo de la fiscal Silvia Bussano, de la Unidad Funcional de Instrucción N° 7 de Lanús-Avellaneda, seguía la pista de las cámaras de seguridad del barrio y alrededores para dar con el paradero de los agresores. Así lo informó el secretario de Seguridad de Lanús, Diego Kravetz, a través de sus redes sociales. También contó que se había reunido con el papá de la víctima.
Para las 12 del mediodía, familiares, alumnos y vecinos del barrio se juntaron en la puerta del colegio, en la calle Coronel Molinedo al 3200 de la localidad de Villa Giardino, para reclamar “Justicia”. Minutos antes de las 14, decidieron movilizarse hasta la Comisaría 5° de Lanús, ubicada a unas once cuadras de donde mataron a la nena. Aunque muchos de ellos llevaban cartulinas y acompañaban el reclamo de manera pacífica, más tarde se terminaron cruzando con los efectivos. Hubo piedrazos y agresiones.
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