La inauguración del gasoducto Néstor Kirchner, concretada este 9 de julio, generó un nuevo cruce entre Cristina Kirchner y Mauricio Macri, por los detalles en la ejecución de la obra que buscará transportar el gas que se produce en el yacimiento Vaca Muerta, situado en la provincia de Neuquén.
Luego del acto que compartieron la vicepresidenta, junto al presidente Alberto Fernández y al ministro de Economía y precandidato a presidente, Sergio Massa, Macri había cuestionado los tiempos y el costo que demandó para el gobierno actual la concreción del proyecto. Además, había ironizado respecto de la manera en que el oficialismo actual decidió bautizar la obra, homenajeando al ex presidente Néstor Kirchner. “Disculpen si no lo llamo por su nombre oficial”, escribió el ex jefe de Estado en sus redes sociales.
Menos de 24 horas después llegó la respuesta de la titular del Senado. “A propósito de los números sobre los que charlábamos ayer en la inauguración del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner que, con sus 573KM, permite incorporar, en esta primera etapa, 11 millones de m3/día a la red troncal de gas”, desarrolló, también en su cuenta de Twitter.
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A su vez agregó: “Entre 2003 y 2015 se instalaron 3.211KM de gasoductos troncales y 290.690 HP en plantas compresoras que permitieron ampliar la capacidad de transporte de producción de gas nacional en 26 millones de m3/día”, dijo, para empezar a marcar un contraste entre su gestión, la del extinto presidente Néstor Kirchner, y la administración de Macri.
“Entre 2016 y 2019 se instalaron 53KM de gasoductos troncales y 3.100 HP en plantas y turbocompresoras, cifras que -como los propios valores indican- no tuvieron impacto alguno en el sistema de transporte”, agregó para sellar la comparación.
Finalmente, y sin nombrar al fundador del PRO, CFK también ironizó: “Ahora se entiende por qué su mamá lo castigaba por mentir”. La referencia parece desprenderse de una entrevista en la que Alicia Blanco Villegas, madre de Mauricio Macri, contaba a la Revista Noticias una anécdota de crianza del ex presidente, afirmando que le había “llegado a pegar por mentir”.
Un día antes, Macrí había defendido el desempeño de su gobierno en relación a la obra. “En 2019 dejamos la licitación lista y el financiamiento preparado. Solo tenían que avanzar. En lugar de eso, tuvimos discursos rimbombantes sobre soberanía, autoabastecimiento e independencia”, inició el ex mandatario nacional.
A ello agregó un saludo a “ingenieros y a las constructoras por una obra formidable”, a pesar de que “por el apuro y la falta de previsión del gobierno costó 800 millones de dólares más de lo que habría costado en condiciones normales”.
“La historia de este gasoducto (disculpen si no lo llamo por su nombre oficial) es otro ejemplo de las oportunidades, los millones y el tiempo que perdimos los argentinos por la obstinación del kirchnerismo de destruir cualquier cosa que estuviera hecha por nosotros. Ahora por lo menos tenemos algo concreto. Aprovechémoslo”, había escrito Macri. Esas expresiones generaron la respuesta de la vicepresidenta este lunes 10 de julio.
Las afirmaciones de Macri ya habían generado una reacción en cadena en la primera fila del arco oficialista. El presidente Alberto Fernández, por caso, lo acusó de intentar darle la obra “a sus amigos” cuando le tocó gobernar, y buscar que se convierta “en un negocio privado para dolarizar de nuevo la tarifa de gas”.
La obra del gasoducto cobró notoriedad en por la posibilidad de transportar y exportar la energía que se produce en el yacimiento Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén, en un contexto de escasez de divisas en el país. En los últimos 8 meses el gobierno nacional llevó adelante la conexión entre la localidad de Tratayén, en la provincia de Neuquén, y Salliqueló, en la provincia de Buenos Aires, lo que representa una primera etapa de la obra. Ese tramo quedó inaugurado el domingo 9 de julio.
La obra se considera clave para, en esa primera etapa, ahorrar importaciones de gas, tanto del fluido proveniente de Bolivia, por gasoducto, como del que llega como Gas Natural Licuado (GNL) en buques metaneros, a las estaciones flotantes de regasificación de Escobar y Bahía Blanca.
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