El Senado de la Nación se encuentra virtualmente paralizado. Desde que comenzó el año, sin tener en cuenta la sesión preparatoria y la visita del jefe de Gabinete, Agustín Rossi, sólo tuvo dos sesiones. Una que fracasó por falta de acuerdo con el temario y una segunda que se llevó adelante con la misma agenda de la anterior, que había naufragado.
En las últimas semanas retomó de manera esporádica el trabajo en comisiones, pero las dificultades para lograr un acuerdo y, a partir de ahí, obtener el quórum necesario para poder sesionar hicieron que la Cámara alta se encuentre sin sesionar hace tres meses y el panorama es que no vuelva hasta después de las PASO, el 13 de agosto.
“Tenemos muchos temas en la agenda legislativa que son importantes para el país, es necesario que la oposición aporte el quórum para poder tratarlos en sesión del Senado”, dijo el presidente del interbloque oficialista, José Mayans.
“Está complejo con el año electoral, tenemos temas como por ejemplo la autorización de entrada y salida de tropas, 80 pliegos para el Poder Judicial, y otra ley que viene de Diputados que es el de Lavado de Activos, además de otros proyectos que piden las provincias. Espero que se regularice todo cuando pasen las elecciones PASO”, agregó en declaraciones radiales.
“Nosotros no tememos los números propios para tener quórum tras la división del bloque y eso impidió todo. Tengo la esperanza que lo hagamos la semana que viene y saquemos leyes que están aguardando”, expresó.
La esperanza de Mayans se materializó el viernes a última hora. Los senadores del oficialismo empezaron a recibir el aviso de cómo será la agenda de esta semana para que vayan organizando su llegada a la Ciudad de Buenos Aires. El martes habrá reunión de bloque a las 19 y el miércoles se sesionará.
Con la negativa de JxC de prestar el quórum, el oficialismo avanzó por otro camino y retomó conversaciones con el bloque de peronistas de Unidad Federal. Logró lo que buscaba, por lo que el próximo miércoles a las 10.30 comenzará a sonar el timbre que llama a los senadores para sesionar a la hora establecida: las 11 de la mañana.
“Hubo algunas reuniones entre los presidentes de los bloques y desde JxC ya avisaron que no iban a bajar entonces las conversaciones se concentraron con algunos de los senadores de UF que se mostraron cercanos a la fórmula de Massa-Rossi”, explicó una alta fuente del oficialismo en la Cámara alta.
El informante básicamente hizo referencia a la senadora puntana Eguenia Catalfamo y al entrerriano Eduardo Kueider, ya que ambos celebraron públicamente la fórmula de Unión por la Patria.
“Nosotros somos 32 y contamos con la ayuda de los senadores Alberto Weretilneck (Juntos Somos Río Negro), Magdalena Solari Quintana (Misiones) y Clara Vega (La Rioja), pero no nos alcanza. Con Catalfamo y Kueider llegamos a 37 por lo que tendríamos quórum y podríamos sesionar”, explicó la misma fuente quien señaló que el lunes podría haber novedades.
El temario que llevarán al recinto se terminará de definir entre lunes y martes. Hay un posibilidad de tratar sobre tablas la media sanción que llegó de Diputados sobre la modificación de la ley de créditos UVA, algo que algunos radicales podrían acompañar también, al igual que sucedió en la Cámara baja. Pero está claro que Mayans y el interbloque del Frente de Todos en principio buscará avanzar con la aprobación de los pliegos para el Poder Judicial y la ley de lavado de activos.
Pero, mientras la mayoría de los senadores se encuentran en sus provincias y la actividad en los pasillo es casi nula, hay una parte del Senado en la que el ir y venir de personas es incesante. El despacho de Cristina Kirchner tiene un trajín más parecido al de un centro de campaña que al de la Presidencia del de la Cámara alta.
Es cotidiana la presencia de funcionarios nacionales, provinciales y dirigentes del PJ en el despacho de la Vicepresidenta. En especial, de Máximo Kirchner y del jefe de la campaña de la fórmula presidencial del oficialismo, Eduardo “Wado” de Pedro.
En el despacho del primer piso del Senado, lejos de las miradas indiscretas, con casi nulo acceso a la prensa y con la ausencia de los miembros de la oposición que puedan observar esos movimientos, están los miembros del kirchnerismo encargados de planificar la campaña electoral junto a la ex mandataria.
Fue en esta oficina donde se gestó el acto de este domingo en Salliqueló con la presencia de Alberto Fernández, Cristina Kirchner y Sergio Massa -además de otros funcionarios y candidatos- que servirá como puntapié inicial de la campaña de Unión por la Patria de cara a las elecciones del próximo 13 de agosto.
Seguir leyendo: