Unión por la Patria está por terminar una semana intensa. En los últimos seis días, los dirigentes de la cúpula nacional y bonaerense se dedicaron a tiempo completo a barajar y dar de nuevo en el tablero político que se dio vuelta el viernes pasado a partir del acuerdo entre Cristina Kirchner y Alberto Fernández para que Sergio Massa sea el único candidato a la Presidencia. Sin embargo, aún está borrosa la articulación de los espacios, que están funcionando por separado aunque en contacto.
Hoy se cumple una semana del cierre de listas, es el primer fin de semana de la campaña adelantada para la PASO del 13 de agosto y se conmemora un nuevo aniversario del fallecimiento de Perón. Pero nadie en el oficialismo se atreve a decir aún, con firmeza, cómo será el funcionamiento definitivo del frente hacia la elección. “Espérennos un poco más”, dicen unos. “Esto va a ser dinámico”, agregan otros.
La opción de máxima para hoy era organizar un acto de unidad, con todos los referentes del acuerdo sellado el viernes pasado, que ungió a Sergio Massa como precandidato único para la Presidencia; al albertista Agustín Rossi como compañero de fórmula; mantuvo al kirchnerista Axel Kicillof en la carrera por la reelección en la provincia de Buenos Aires; y ubicó a los camporistas Máximo Kirchner y Eduardo de Pedro al tope de las boletas para la Cámara de Diputados y el Senado.
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Pero, aunque reinaba la reserva, algunos armadores admitían que no hubo acuerdo para ir todos juntos. Sobre todo a partir de la distancia que se impuso entre los candidatos de Alberto Fernández, Victoria Tolosa Paz y Santiago Cafiero, y el espacio que comanda Cristina Kirchner con Máximo Kirchner y Eduardo Wado de Pedro a la cabeza, a pesar de que todos integran la misma lista para Diputados y, en el caso de “Wado”, para el Senado.
La ministra de Desarrollo Social, de origen platense, no volvió a expresarse en público desde el martes, cuando le contestó a Cristina Kirchner que se sentía “dolida” por el discurso que dio la vicepresidenta post-cierre de listas. Esto a pesar de que el kirchnerismo duro, en las voces de referentes como Sergio Berni y María Teresa García, se ocupó de cuestionarla con dureza después, inclusive deslizando que ni ella ni el canciller merecían ser candidatos.
En el contexto de fragmentación política, el primer sábado de campaña con las listas oficializadas transcurrirá compartimentado. Por un lado, habrá muestras de unidad entre el kirchnerismo y el massismo en el conurbano. Pero desde la Casa Rosada dijeron Alberto Fernández no tiene agenda definida para hoy. Y tampoco Tolosa Paz y Cafiero confirmaron sus actividades del día, mientras que Agustín Rossi se encuentra en Santa Fe.
Desechada la posibilidad de un acto en conjunto, se imponía otra alternativa: participar de varios eventos políticos, aprovechando la presentación de listas de candidatos para las PASO en los distritos del GBA, desde donde los intendentes vienen invitando a los principales competidores por la Provincia. El primero que acordó la presencia de Sergio Massa fue el aliado de Máximo Kirchner y jefe de gabinete bonaerense, Martín Insaurralde, que el martes lo recibió en Lomas de Zamora, donde juega su delfín, Federico Otermín.
En principio, según pudo reconstruir Infobae, se manejan cinco distritos para dar los primeros pasos del camino hacia las Primarias, y Merlo será uno de los escenarios a los que habrá que prestar atención. Gustavo Menéndez, que busca la reelección, recibirá a Eduardo de Pedro, que hará su segunda aparición en público después de participar en la pastoral social de Mar del Plata, ayer por la tarde, y de acompañar a Cristina Kirchner en Aeroparque el lunes. Se especulaba con la posibilidad de que también Máximo Kirchner y Massa fueran a ese distrito, pero hasta anoche no lo habían confirmado.
También analizaban desembarcar en Hurlingham, uno de los municipios complicados por las internas en el oficialismo, donde La Cámpora y el albertismo se enfrentan en las figuras de Juan Zabaleta, el actual intendente, y Damián Selci, que estuvo a cargo de la gestión local cuando “Juanchi” se hizo cargo del Ministerio de Desarrollo Social a pedido de Alberto Fernández. Y los precandidatos barajaban ir al “Foro de Gobierno Abierto” de la gestión organizado por la intendenta ultra k de Quilmes, Mayra Mendoza. El “espacio de encuentro, participación y debate” empieza a las 13, en la Universidad Nacional de Quilmes.
Y también podrían visitar Moreno, donde la intendenta Mariel Fernández, que pertenece al Movimiento Evita pero tiene buen vínculo con el kirchnerismo, levantará a sus figuras locales en el boulevard Perón, frente al busto del general.
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La presencia de Masa, Máximo Kirchner y Kicillof no estaba confirmada en ninguno de los municipios. Pero en todos especulaban con que participen y los habían invitado. La clave de esta elección, además de la articulación entre la carrera presidencial y provincial, estará en la sinergia que logren forzar el gobernador y el hijo de Cristina Kirchner, entre quienes hubo ruidos inocultables durante los tres años y medio de gestión del Frente de Todos.
Ambos buscaron saldar la disputa subterránea con el cierre de listas, donde el ex ministro de Economía de CFK pudo quedarse a pelear por un segundo mandato a pesar de las presiones para que pasara a disputar a la Nación. Esto, además de elegir a su compañera de fórmula, Verónica Magario, y ubicar a varios de sus alfiles en la repartija de posiciones a nivel legislativo provincial y municipal.
La información sobre el devenir del primer sábado de campaña se conocía a cuentagotas. “No hay nada confirmado”, repetían desde los entornos de todos los intendentes del GBA y de los precandidatos nacionales por la Provincia a pesar de que la reconfiguración del espacio, cuando sólo faltan seis semanas para las PASO, se volvió imperativa.
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