Miguel Tessandori es considerado un outsider de la política, pero no una cara nueva: en Rosario todos lo conocen por su labor como periodista deportivo y por los shows de stand up que realiza en los barrios. A dos años de haber logrado un lugar en el Concejo Deliberante, forjó un acuerdo con el radical Maximiliano Pullaro, postulante a la Gobernación de Santa Fe, para pelear por la intendencia de una ciudad que representa el 40% del padrón electoral provincial y está atravesada por el avance del narcotráfico.
Enfrentará una primaria numerosa en Unidos por Cambiar Santa Fe, el frente de frentes que integran Juntos por el Cambio y el socialismo. Su principal contrincante es el intendente actual, Pablo Javkin, quién buscará un nuevo mandato de la mano de la candidatura provincial de Carolina Losada, alineada con los “halcones” de Patricia Bullrich.
En el marco de una visita a CABA para realizar una recorrida por dependencias de la Policía Científica, Tessandori explicó en diálogo con Infobae por qué decidió dar el salto a la política, cuáles son los ejes de su campaña y cómo encarará la gestión en caso de ganar las elecciones.
— ¿Por qué decidió involucrarse en política?
— Rosario me dio todo. 40 años en la televisión rosarina me permitió ser parte de las familias de mi ciudad. Crecieron, crecimos, juntos. Y hace rato que me duele ver cómo está Rosario. Muchas veces vinieron a proponerme ser candidato, pero recién fue hace 2 años que hice el click y me dí cuenta que si dejaba pasar el tiempo -aparte de morirme- me iba a lamentar no haber hecho el esfuerzo que Rosario merece, porque sé que la gente precisa que le devolvamos la esperanza de que éste puede ser un gran lugar para vivir, porque lo es.
— ¿Cuáles son los principales ejes de su campaña?
Primero hacerse cargo de la agenda mas importante que atraviesa la ciudad que es la seguridad. Junto a Maxi Pullaro ya sabemos que si él es gobernador y yo intendente Rosario va a ser una sede constante del gobierno. El gobernador tiene que estar en Rosario para que el estado se haga cargo de lo que hay que hacer. Y mucha inversión y apoyo en tecnología, Rosario no tiene hoy un centro de monitoreo. La segunda es achicar el gasto político, los recursos de los rosarinos no son para mantener un estado ineficiente y muchas veces molesto, menos plata en publicidad y contratos y más plata para los clubes de barrio y la infraestructura que precisa la ciudad. Tercero, alfombra roja para que el que viene a invertir en Rosario, el que trae sus genuinos recursos para generar trabajo acá tiene que ser ayudado por el municipio a empezar su emprendimiento. Y déjame agregar una cuarta, voy a ser intendente por cuatro años y nada más, Rosario merece tener un intendente que sólo piense en gestionar y no en una futura carrera política hacia otro lugar.
— ¿Por qué se encolumnó detrás del liderazgo de Pullaro y no de Carolina Losada?
Porque “Maxi” Pullaro vino y me dijo claramente que sabía que no podía ser un gobernador exitoso si fracasaba en resolver el drama que vive Rosario. Me prometió instalarse acá. Y lo veo trabajar y recorrer con unas ganas que pocas veces ví en los políticos mas dedicados a la rosca y a los sets televisivos.
— ¿Qué opina de la gestión del actual intendente Pablo Javkin?
El que hace la gente de rosario…con cualquier rosarino que hables escuchás un relato de una gestión fallida. Incluso de gente que lo votó y lo aprecia, me sorprende cuando me dicen “Te voy a votar a vos, no me hagas lo mismo que Pablito”.
— ¿Cuál cree que ha sido la responsabilidad del intendente en el avance del narcotráfico?
- En la Ciudad más violenta de la República Argentina no hay ni un solo caído de las fuerzas de seguridad. Es decir, no hay enfrentamientos entre la policía y los delincuentes ¿No resulta extraño?
Se mueven 170 toneladas de cobre al año por robos de cables. Son cientos de camiones y nadie ve nada. ¿Cómo puede ser? En Rosario un solo barrio privado tiene el doble de cámaras que toda la Ciudad de Rosario.
— ¿Pero usted considera que hay connivencia del intendente o negligencia?
Javkin no entendió o no tiene la capacidad de comprometerse con el reclamo de la gente. Se convirtió en un relator y el ciudadano espera que lidere y tenga la capacidad de pegar un grito y que algo pase. Es evidente que su propia estructura municipal no le responde. Las cosas con Javkin no ocurren.
Las limitaciones propias del municipio no pueden ser una excusa, el intendente debe poner a disposición del Ministerio de Seguridad toda su estructura edilicia y logística para colaborar en la ocupación del espacio público en materia de seguridad.
A modo de ejemplo, es inentendible que un barrio privado tenga el triple de cámaras que toda la ciudad de Rosario. Pablo debió reasignar partidas presupuestarias de áreas menores y colocar una red de 1500 cámaras de alta tecnología que desnuden y permitan denunciar desde el municipio la ineficacia policial.
Rosario es una ciudad liberada.
— El narcotráfico en Rosario se transformó en un tema de discusión en la agenda nacional. ¿Cuáles son las otras urgencias que tiene la ciudad?
— El transporte es un problema que debe ser resuelto de una buena vez, en Rosario se viaja mal, un poco por la mala gestión que hace el municipio y otro poco por la injusta distribución de los recursos que hace que el transporte del interior reciba mucho menos que el transporte del AMBA. La ciudad esta desprolija y abandonada, eso es desidia de la gestión. Los barrios parecen otra ciudad. Los taxistas me viven contando de las maniobras que deben hacer para evitar romper sus herramientas de trabajo.
— ¿Y por qué cree que los rosarinos deberían votarlo a usted y no al resto de los candidatos? ¿Qué lo diferencia del resto de sus competidores?
— No lo sé, no quiero tener la soberbia de los políticos que desde un pedestal nos dicen que sí y que no. Pero déjame que te diga algo, Rosario vive un largo duelo. No solo de los cientos de muertos que acumulamos año a año, sino de una ciudad que conocimos, quisimos y hoy no está. Yo sé lo que son esos duelos, y sé que en esos momentos no querés escuchar a nadie, sólo un abrazo. Camino todos los días mi ciudad para dar ese abrazo que no es consuelo, pero si compromiso con lo que nos pasa, acompañar. Desde el municipio quiero que ese abrazo sea el de una gestión que pone a los rosarinos y a la ciudad en el lugar que merecen estar.
— ¿Qué Rosario se imagina dentro de cuatro años en caso de ser elegido intendente?
Mucho menos violenta, mucho más limpia y prolija y, principalmente , muchísimo mas integrada. Y sobre todo me imagino el momento que me vuelvo a mi casa y la gente me da su abrazo y me dice “Gracias Miguel”
— ¿A quién va a respaldar en la interna nacional: Horacio Rodríguez Larreta o Patricia Bullrich?
— Al que elija la gente…el voto es secreto.
Seguí leyendo: