La definición del ministro de Economía, Sergio Massa, como el precandidato presidencial en Unión por la Patria (UP) con acuerdo del kirchnerismo, el Frente Renovador y Alberto Fernández provocó distintas reacciones en la militancia oficialista. El humorista Dady Brieva, que apoyaba a Eduardo “Wado” de Pedro para las PASO del 13 de agosto, transitó desde un estado de malestar y desconcierto a un respaldo enfático a la fórmula Massa-Agustín Rossi, luego de que ayer la vicepresidenta Cristina Kirchner intervino con un discurso explicando los motivos de la decisión.
“Lo que pasó, pasó. Ya fue. Hace tres meses estábamos para tirarnos del edificio del Correo (Central) y ahora estamos en carrera. Tenemos serias posibilidades de ganar”, graficó el reconocido cómico del trío Midachi sobre su actual estado de ánimo, y confió en que se avecina una victoria de Unión por la Patria en las elecciones presidenciales.
“Ahora vamos a ser vigilantes para que Massa y Rossi no sean mascotas de nadie. Me parece que vamos a estar más alertas y más militantes que nunca”, dijo en declaraciones al canal de El Destape, aunque matizó su comentario: “Me parece que viene un período de cuatro años. Si el kirchnerismo molesta, nos corremos un rato. Después ya volveremos”.
Brieva reconoció que dejó atrás la bronca que le generó la forma en que se designó el binomio final de la alianza de UP durante la tarde del viernes, algo que cayó mal en muchos militantes del kirchnerismo. Por eso, en los primeros días antes del acto este lunes en el Aeroparque Jorge Newbery junto a Sergio Massa, le había exigido a la vicepresidenta Cristina Kirchner que explique los motivos de la decisión.
“Me enojé el domingo cuando fui a (el programa de TV) Duro de Domar, hablé a la cámara y le digo a Cristina ‘tenés que salir y no con un tuit pedorro’. Eso fue literal, porque cuando amo me abro las venas. Como dice Julio Sosa ‘me desangro en besos’, y cuando tengo bronca también me desangro. Medio grosero, medio midachesco, dije que no hay que hacer un tuit pedorro sino que tenés que hablar a esa militancia que va, que se moja, que no sabe de conveniencia, que se le moja el cartel, que se le embarra las zapatillas y canta Cristina presidenta. Había que hablar”, remarcó Brieva.
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Y continuó: “Se ve que las ondas llegan. Ayer habló en un contexto que pareciera como mágico, con el avión atrás. Yo estaba en el supermercado, no la quise escuchar. Después la escuché: me dio una ganas de abrazarla…”. Y añadió: “Es una leona frágil, capaz de matar y de desarmarse porque no tiene nadie a quien la apapache (sic)”.
Según Brieva, lo que pasa con Cristina Kirchner es que genera tanto “amor” como “enojo” en la militancia porque no se analiza su figura desde una “lógica ajedrecista”. “Esta frase que dijo ella de que el enojo prescribe a los seis meses es para los políticos. Para la militancia es distinto. Es amor, es enojo. Con Cristina nos pasa lo mismo. Faltando una hora para el (cierre de listas) el sábado, yo creía que Cristina iba a ser candidata. ¡Y no me siento un pelotudo por tener fe! ¡No me siento un pelotudo por creer, por tener fe, ilusión y estar enamorado! No llegue a pocas cosas siendo un pelotudo como se dice”, afirmó.
Tras elogiar con intensidad a vicepresidenta, Dady Brieva insistió en que apuesta a una victoria del peronismo y que será distinta la experiencia del oficialismo, en caso de concretarse un nuevo triunfo electoral. “En 2019 nos tocó lo que nos tocó. Yo creí que estaba todo hablado, no pensé que mamá iba a invitar a un hombre a la casa y que el hombre se iba a convertir en ocupa. No creí que iba a ser así. Después vino la pandemia y otras emergencias”, planteó.
Además, el conductor televisivo consideró que la oposición de Juntos por el Cambio está teniendo un comportamiento errático tras la postulación de Sergio Massa. “Yo siento que están descolocados en los medios y en las redes. Hace cuatro días que mis hijas no me putena, parece que estuviera viviendo en Noruega”, ironizó. “Realmente no me mido por nosotros, sino por ellos. Creo que están preocupados y es un buen momento para no desarmarse”.
Y concluyó: “Yo milito por el triunfo y lo que se elija, creo que el universo acomoda. Siempre triunfa el que tiene razón. No hay cabida para que la cosa no funcione o no falle; creo que vamos a ganar y estos últimos cuatro años van a ser un sueño feo. Vamos a poder hacer realidad los sueños de toda la gente que murió que estaban en ese avión, el sueño de todas las madres, de Hebe, de los que no están y estuvieron en la plaza”.
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