El oficialismo cerró el reglamento interno que regirá en las PASO (Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) y solamente faltan definir quiénes serán los ocupantes de las distintas fórmulas que competirán.
Así prevaleció la necesidad de unidad y algunas de las partes debieron ceder en sus pretensiones para alcanzar el acuerdo. La disputa, una vez más, parece ser entre quienes quedan bajo el ala del presidente Alberto Fernández y los que impulsará el kirchnerismo.
El Presidente avala, aunque sin explicitarlo, las condiciones del embajador en Brasil, Daniel Scioli, y de su jefe de Gabinete, Agustín Rossi, para pelear por la presidencia de la Nación, y a Victoria Tolosa Paz en la provincia de Buenos Aires.
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Mientras que la Vicepresidenta, que hoy participará de la ampliación de un hospital en Santa Cruz, donde dará un discurso acompañada por su cuñada Alicia Kirchner, todavía analiza si apoyará al ministro de Economía, Sergio Massa, o al ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, para darle luz verde a Axel Kicillof para que juegue por la reelección, aunque deba enfrentar una interna. Un cuarto aspirante es Juan Grabois, quien pretende “colarse” en la discusión del peronismo gracias a su inserción en los movimientos sociales.
Ahora que las reglas del juego quedaron establecidas todos ajustan detalles para mostrarse en campaña. El más activo parece el titular de Interior que viaja por distintas provincias y también recorre el Conurbano con distintas actividades. Más allá del duro mensaje en el cierre de las listas en Buenos Aires con críticas a lo que exigían Alberto Fernández y sus aliados.
“Parece mentira que el sector que encabeza Alberto Ángel Fernández se queje del trato que se brinda a la minoría que representa. Siendo que en 2019 era minoría de minorías y fue propuesto como candidato a presidente por Cristina Kirchner”, consignó ese comunicado. “Ojalá hubieran puesto la misma dedicación y esfuerzo en recuperar el poder adquisitivo de ciudadanos y ciudadanas″, agregaron en otro fragmento.
De Pedro fue hasta Tucumán a felicitar a Osvaldo Jaldo por su triunfo en las elecciones de Tucumán el domingo. Ayer se reunió con Gildo Insfrán, gobernador de Formosa y designado de hecho como interlocutor en la disputa de los distintos sectores en la interna, en la Casa Rosada. Luego viajó a La Pampa, donde compartió un acto con el mandatario provincial, Sergio Ziliotto.
Aunque formalmente no es precandidato, el ministro se mueve como tal. Intentando mayor visibilidad, algo que se reforzó con mayor cantidad de gente en sus equipos de comunicación y ampliación del despliegue en las redes sociales.
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Hoy encabezó la apertura del Encuentro Iberoamericano sobre Bullying que se desarrolló en el Centro Cultural Kirchner junto a su par de Educación, Jaime Perczyk, y el director nacional de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), Luis Scasso. De Pedo está muy involucrado en el tema, ya que arrastra dificultades en el habla (disfluencia),
Su agenda continuará en La Matanza. A las 13 entregará tablets de Enacom junto al intendente Fernando Espinoza. A continuación, se trasladará a la ciudad de Morón donde, acompañando al intendente Lucas Ghi, hará entrega de bienes adquiridos a través de la Línea Ambiental del Programa Municipios de Pie, y posteriormente participará de un acto. Por la tarde, De Pedro participará de un plenario en el municipio de Tres de Febrero.
Scioli, quien todavía no decidió a su acompañante de fórmula -pero está lanzado en su determinación de llegar al sillón de Rivadavia- decidió profundizar su presencia en los medios de comunicación. “Yo no soy títere de nadie ni candidato de nadie. Soy candidato de Daniel Scioli, punto, ¿está claro?“ Y agregó: “Quiero legitimarme y tener el poder político, independencia, autonomía, para el tiempo que se viene en Argentina a partir del resultado de las PASO”.
El ex gobernador bonaerense, quien afirmó que aspira a ser presidente “para poner a Argentina en la agenda del desarrollo”, eligió un tono más tranquilo que Aníbal Fernández, el ministro de Seguridad a quien Scioli le delegó el puesto de apoderado de su sector, al referirse al comunicado del PJ bonaerense.
El funcionario nacional dijo que “está escrito con bronca porque nosotros sostuvimos lo que hay que hacer. Lo del carguito es absolutamente peyorativo porque estamos discutiendo diputados nacionales”. La pretensión del sciolismo de que el piso en la interna sea del 30% fue incluido en el reglamento, algo que el kirchnerismo quería que se hiciera con reglas mucho más restrictivas.
Mientras tanto, Agustín Rossi está abocado a sus funciones en la Jefatura de Gabinete que absorben la mayor parte de sus energías. Tras su exposición en la Cámara de Diputados, donde brindó un informe de gestión y respondió 2769 preguntas de los legisladores, sigue intentando cerrar las nóminas que lo acompañará, por ejemplo, en la provincia de Buenos Aires. También, como en el caso de Scioli, su estrategia tiene un componente mediático de peso.
Esta mañana en El Destape radio dijo que “lo sustancial es tener una candidatura a presidente que refleje expectativas en el conjunto de la sociedad y yo estoy trabajando para eso”. Con su Corriente Nacional de la Militancia sostiene que le alcanzan los avales a nivel nacional y celebró que en todo el país exista “la duplicación de las listas que permite apoyar a dos candidatos a presidente distintos”.
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