Sergio Massa esperó el momento indicado para jugar su carta electoral. Después de una semana convulsionada por el pedido de una lista de unidad por parte de los gobernadores y la resistencia de Daniel Scioli y Agustín Rossi a bajar sus candidaturas, el ministro de Economía tensó la cuerda al máximo al decir que está dispuesto a competir en las PASO.
Si bien no dijo que será candidato, para toda la dirigencia del Frente Renovador no hay dudas de que si habrá un representante del espacio en la interna, ese es Massa. Los rumores que se instalaron algunas semanas atrás sobre una posible candidatura nacional del gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, fueron solo eso: rumores.
“Creo que la unidad es lo mejor para la Argentina y para el Frente de Todos. Pero si se decide que haya PASO, anótennos en las PASO que ahí vamos a estar”, fue el grito de guerra del ministro de Economía, que generó una ovación de la dirigencia y de sus funcionarios más íntimos que lo acompañaron. No nos bajamos. Nunca. Ese fue el mensaje.
En la antesala del discurso de Massa, Malena Galmarini había dejado en el aire una frase por de más de elocuente. “Muchas veces nos golpearon y nos pegaron en el piso. Y acá estamos, indestructibles, porque tenemos al mejor líder. Y cuando los argentinos le den la oportunidad va a ser el mejor presidente”, exclamó. Los aplausos retumbaron en el estadio ubicado en Malvinas Argentinas, hasta el que llegaron cerca de 12 mil dirigentes de todo el país.
En ese momento y en el final del discurso del ministro de Economía, algunos pocos se animaron a cantar “Massa presidente”. No fue generalizado, sino más bien sectorial. No hizo falta que ese canto esté presente en el estadio para que quede claro que toda la dirigencia del Frente Renovador quiere que Massa sea candidato a presidente y que logre, con esta jugada política, dejar sin efecto las candidaturas del sector que tiene el respaldo de la Casa Rosada.
Los dirigentes del Frente Renovador que hablaron se refirieron a Massa como “el líder” y pidieron a “apoyarlo” en esta etapa compleja de la gestión económica, donde la inflación agobia al gobierno nacional y a toda la estructura política del Frente de Todos. El pedido de respaldo tiene un doble sentido. Entienden que hay que apoyarlo para que sea el candidato de unidad del peronismo. Es el momento.
En su discurso Massa aclaró que no se irá del Ministerio de Economía. Dejó sin efecto las amenazas que había lanzado Cecilia Moreau, una de sus dirigentes más cercanas, sobre una posible salida del Gobierno frente ante la falta de acuerdo en la estrategia electoral y el impacto que el resultado de las PASO tendría en su gestión económica. Especialmente en la reacción de los mercados.
“No debemos someter a una fuerza de gobierno a una división, a una pelea, y confundirle a la gente el rumbo. Todos tenemos responsabilidades. El momento de fragilidad nos obliga a tener unidad porque todavía estamos gobernando”, sostuvo. El mensaje está dirigido al sector del Frente de Todos que hace campaña y pide las PASO. Sin nombres y apellidos, los apuntados son ellos.
Durante su discurso Massa recalcó en varias oportunidades el concepto de “responsabilidad” para aclarar que no se irá del ministerio y que debe seguir haciendo equilibrio desde el quinto piso del Palacio de Hacienda. No todo es electoral, aunque la dirigencia política solo hable de elecciones y candidaturas.
Massa ejerció presión sobre el escenario electoral del peronismo -por demás convulsionado- donde hay cada vez más sectores que reclaman que haya un acuerdo integral para que sea solo uno el candidato a presidente del Frente de Todos. El ministro de Economía plantó su postura, mostró sus cartas y empezó a jugar la partida final.
En el acto hubo pedidos de unidad de parte de gobernadores y legisladores que grabaron videos con saludos. Gustavo Melella (Tierra del Fuego), Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Gustavo Sáenz (Salta) fueron alguno de los que destacaron “la mirada federal” de Massa. Fue un guiño para el ministro, el candidato que todavía no es candidato formal pero que trabaja para serlo. Hoy lo dejó más que claro.
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