Este martes por la tarde Alberto Fernández mantuvo una reunión bilateral con el dictador venezolano Nicolás Maduro. El encuentro se llevó a cabo en Brasilia, donde se está desarrollado el Encuentro de Presidentes de los países de América del Sur, convocado por el jefe de Estado de Brasil, Luiz Inácio “Lula” Da Silva.
Los dos mandatarios hablaron sobre los pormenores de la relación bilateral entre la Argentina y Venezuela, y cómo se retomó el diálogo fluido luego del quiebre que se produjo en el vínculo institucional durante la gestión del ex presidente Mauricio Macri.
Ese proceso de acercamiento se generó cuando el gobierno argentino designó, en julio del 2022, a Oscar Laborde como nuevo embajador argentino en Venezuela. En ese momento, Maduro lo recibió en tiempo récord y le aseguró que iba a colaborar con Argentina en materia energética.
“En el marco de la reunión bilateral, ambas partes subrayaron la importancia de la normalización del vínculo bilateral, ya que el Embajador argentino, Oscar Laborde, presentó sus Cartas Credenciales ante el presidente Maduro el 25 de julio de 2022 y la Embajadora de Venezuela, Stella Lugo, presentó Cartas Credenciales el 29 de agosto de 2022″, indicó un comunicado enviado por el gobierno nacional.
El encuentro se desarrolló en el Palacio Itamaraty de Brasil, donde se lleva a cabo la cumbre de presidentes y tuvo como objetivo “generar consensos y reforzar los mecanismos de integración latinoamericana”, según detallaron desde el oficialismo.
Durante el encuentro, en el que también participaron el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli; y los cancilleres Santiago Cafiero e Yván Gil Pinto, Fernández le solicitó a Maduro que Venezuela vuelva a estar representado en foros y mecanismos internacionales, remarcando principalmente a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos -CIDH-.
Según informó el Gobierno, durante la reunión bilateral “se destacó el trabajo que ha realizado Argentina con respecto al apoyo al diálogo entre los propios venezolanos para la búsqueda de una salida política que, en el marco de sus mecanismos institucionales y constitucionales, garantice la plena vigencia de la democracia y el respeto de los derechos humanos”.
“Argentina plantea que debe acordarse una hoja de ruta con el oficialismo y la oposición donde se trabaje en las garantías para el proceso electoral del año 2024″, señaló el Gobierno en un comunicado oficial difundido esta tarde.
El gobierno nacional entiende que con esa postura y de esa forma se puede contribuir a la recuperación de la economía venezolana y al bienestar de la sociedad, agobiada por la dictadura de Maduro y una feroz crisis humanitaria. La gestión de Fernández siempre ha evitado definir al régimen venezolano como una dictadura, pero se ha mantenido distante de los elogios. Un equilibrio fino y complejo que logró mantener a lo largo de los tres años de gobierno.
Durante la reunión Argentina volvió a insistir en la necesidad de que se quiten las sanciones impuestas por otros países. Es un pedido que el Gobierno manifestó en diferentes oportunidades como la IX Cumbre de las Américas en junio de 2022 en Estados Unidos, la VII Cumbre de la CELAC y la Conferencia Internacional realizada en Colombia en abril de este año.
“La salida política a la situación en la República Bolivariana de Venezuela no debe tener presiones ni condicionamientos externos para garantizar la plena vigencia de la democracia y el respeto de los Derechos Humanos”, señalaron desde el gobierno argentino luego de la bilateral. Esa postura fue transmitida por Fernández al dictador venezolano.
Durante el Foro de la Paz de París de noviembre de 2022, los presidentes de Francia, Emmanuel Macron; de Argentina, Alberto Fernández, y de Colombia, Gustavo Petro, expresaron su pleno apoyo a la reanudación del proceso de negociación entre venezolanos en una secuencia especial sobre aquel país en la que se reunieron con los representantes para el diálogo del gobierno, Jorge Rodríguez, y de la Plataforma Unitaria de la oposición, Gerardo Blyde, así como con la ministra de Exteriores de Noruega, Anniken Huitfeldt.
En tanto, el 25 de abril de 2023 se realizó en Colombia, por convocatoria del mandatario de Colombia, una Conferencia Internacional para promover el diálogo entre representantes de la sociedad civil, la oposición y el gobierno de Venezuela, con el objetivo de reabrir caminos y construir una hoja de ruta para estimular y apoyar el diálogo. El gobierno de Fernández siempre se inclinó por esa postura.
El encuentro con Maduro se dio cuatro meses después de que el dictador Venezolano haya desistido viajar a la Argentina, donde Fernández encabezó la cumbre de la CELAC que se llevó a cabo en Buenos Aires. En ese momento, el titular del gobierno venezolano prefirió no venir acusando a la oposición de Juntos por el Cambio organizar un escrache en su contra.
“Venimos de sufrir un proceso de desarticulación de América Latina. No puedo dejar de mencionar lo que fueron los años de Donald Trump en la presidencia de los Estados Unidos, no puedo dejar de pensar en cómo se creó el Grupo de Lima con el solo propósito de permitir la intervención militar en un país sudamericano, no puedo dejar de pensar en los bloqueos que dos países de América Latina sufren”, sostuvo Alberto Fernández durante su intervención en la cumbre.
En ese sentido, remarcó: “No puedo dejar de pensar en que la UNASUR se fue diluyendo y se intentó recrear el PROSUR porque esa era la lógica que desde Estados Unidos se imponía. Son cosas que deben llamarnos la atención para que no vuelvan a ocurrir”.
En su discurso Fernández hizo alusión a una frase del ex presidente Kirchner. “Como dijo Néstor Kirchner, los viejos moldes se han roto y los nuevos problemas requieren nuevas soluciones. Celebro la iniciativa del presidente de Brasil, Lula, de impulsar este encuentro que une a los presidentes de América del Sur para integrar a la región”, indicó.
Antes del inicio de la cumbre Lula da Silva ejerció una fuerte defensa sobre Nicolás Maduro. El lunes dijo que que todavía hoy continúa habiendo “prejuicios” contra Venezuela, que prometió superar fomentando la “integración plena” entre ambos países.
Además, sin hacer referencia a los informes de violaciones a los derechos humanos en Venezuela, el presidente de Brasil aseguró: “Yo he ido a países que no saben donde queda Venezuela pero dicen que Venezuela tiene una dictadura. Nicolás Maduro, ustedes tienen que descontruir esa narrativa (...)”.
“Contra la gente se construye narrativas. Nicolás Maduro sabe muy bien la narrativa que han construido contra Venezuela. Ustedes saben la narrativa que han construido sobre el autoritarismo y la antidemocracia. Ustedes tienen como medios desconstruir esa narrativa”, explicó.
Seguir leyendo: