En el último tramo al cierre de listas, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich afinan su estrategia para ganar la interna dentro de Juntos por el Cambio en la carrera por llegar a la Casa Rosada. En ese punto los dirigentes radicales se convirtieron, en las últimas semanas, en un factor clave para los presidenciables del PRO en busca de mostrar mayor fuerza territorial. La exministra de Seguridad reclutó a un grupo de correligionarios en Córdoba, heridos por el cierre de listas local, mientras el jefe fe Gobierno porteño viajó a Mendoza y se mostró con Alfredo Cornejo, con quien mantuvo diferencias por la postulación de Omar de Marchi. El territorio bonaerense es el que se mantiene más incierto, ya que un sector del partido centenario sostiene el reclamo de la conformación de la Lista Y y otro se niega a compartir a Diego Santilli.
“Todos los días recibimos radicales que quieren sumarse al proyecto de Horacio”, aseguraron a Infobae desde Parque Patricios. En la alianza que mantienen con Gerardo Morales y Martín Lousteau comenzó un operativo para retomar el vínculo con los radicales del Grupo Malbec con el objetivo de lograr un acuerdo antes de la Convención Nacional que se desarrollará el próximo 12 de junio que, a su vez, facilite lo que ya se pronostica como un tenso cierre de listas el 24 del mismo mes.
El gobernador de Jujuy, por ejemplo, retomó las conversaciones con Facundo Manes -su contrincante dentro de la UCR- y lograron mostrar una foto de unidad en el congreso programático que se realizó el fin de semana pasado en Córdoba. “Está buena esta foto, no sé si pueden lograrla otros partidos”, ironizó durante su discurso el presidente de la UCR en referencia al PRO y la feroz interna que protagonizan Bullrich y Rodríguez Larreta. Además, según confiaron a este medio, mantiene un diálogo constante con Gustavo Valdés, el mandatario de Corrientes. Con quien no lograr componer es con su mayor rival: Alfredo Cornejo.
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En todas las conversaciones públicas y privadas, el alcalde porteño insiste en que es necesaria la unidad de la UCR, sobre todo cuando es consultado por la conformación de su fórmula presidencial. Apuesta, incluso, a que el partido centenario llegue a un amplio acuerdo y designe su postulante a la vicepresidencia. Con esa estrategia en mente, este viernes arribó a la provincia de Mendoza -que el próximo 11 de junio tendrá elecciones PASO- para darle su apoyo a Cornejo en su candidatura a la Gobernación. Su visita tomó relevancia política por dos puntos centrales: hace pocos meses estuvieron enfrentados por la amenaza de Omar de Marchi de romper el frente local y, además, el senador radical es un fiel aliado de Bullrich.
Cornejo se encargó de aclararle a sus cercanos que nunca tomó la interna con De Marchi como algo personal. Sin embargo, el ex gobernador vivió meses de arduas negociaciones en Mesa Nacional de Juntos por el Cambio para frenar la amenaza de una posible ruptura de la alianza Cambia Mendoza. Es que el aliado de Rodríguez Larreta pretendía competir por fuera del espacio pero con el sello del PRO. En el entorno del alcalde porteño resaltan que su decisión de quitarle el apoyo a De Marchi e inclinarse por Cornejo en la elección local fue “un gesto para mantener la unidad”.
También fue un gesto que este viernes, cuando llegó a Mendoza, Rodríguez Larreta pasó por Luján de Cuyo -territorio de De Marchi- junto con Cornejo, Suárez y el candidato oficialista a la intendencia de ese departamento, Natalio Mena. Los armadores del referente del PRO aseguran que uno de sus objetivos es, además, acercar posiciones dentro de la UCR. Del espacio “moderado” de Juntos por el Cambio es el único que mantiene diálogo fluido con el senador y máximo referente del Grupo Malbec. Según especificaron, se reúnen cada 20 días.
Su visita a Mendoza también fue una señal a su contrincante. En un primer momento, Cornejo era el nombre cantado para integrar la fórmula mixta con Bullrich. Sin embargo, al decidirse por la pelea provincial, Suárez pasó a encabezar la lista de radicales para acompañar a la presidenta en licencia del PRO. Pese a ese dato, Rodríguez Larreta fue consultado por la posibilidad de que “Rody” vaya como su vicepresidente y respondió: “La conversación y la decisión debiera ser con el radicalismo. Estoy convencido de que las fórmulas mixtas y que la diversidad ayudan”.
Pero Bullrich también empezó a mover fichas radicales y esta semana apostó por el segundo padrón más importante el país: Córdoba. La ex ministra de Seguridad aprovechó las heridas que dejó el cierre de listas local -donde Luis Juez y Marcos Carasso quedaron como fórmula para pelar contra el peronismo local- y reunió a un grupo de intendentes y dirigentes del partido centenario que trabajarán en su armado para la pelea interna nacional.
Encabezados por Oscar Aguad, recibieron a Damián Arabia (armador político de Patricia Bullrich), en un encuentro realizado este martes en el Hotel Panorama, en Córdoba Capital. Además de contar con la presencia del suegro de Rodrigo de Loredo, estuvieron los dirigentes cercanos a referente local de Evolución, entre ellos, Luis Picat y Soledad Carrizo. El candidato a intendente es uno de los correligionarios apoyados por Mauricio Macri por considerarlo uno de los representantes de la renovación de la UCR, según expresó en distintas entrevistas televisivas. Además, es uno de los que aún integran la lista de posibles vices del ala dura.
Bullrich aprovechó para enviarles un video que fue transmitido durante el encuentro: “Los necesito para cambiar el destino de Argentina. Trabajar juntos es un honor. Es muy importante para mí establecer un vínculo directo con ustedes cuando gobernemos el país. Ustedes son vitales para una gestión exitosa”.
La interna se dificulta en la madre de todas las batallas. Tanto Rodríguez Larreta como Bullrich se enfrentan al pedido del presidente de la UCR bonaerense de tener un candidato único para poder ganarle a Axel Kicillof. Pese a que ya fueron anunciados Diego Santilli y Néstor Grindetti en la lista para gobernador, Maximiliano Abad confía en que todavía se puede lograr la unidad. En su argumento está el escenario de los tercios, lo mismo que planteó Cristina Kirchner. “Hay que salir primero o segundo para poder ir a buscar el voto útil y ganar la elección. Si el Frente de Todos o Javier Milei ponen un solo y nosotros vamos divididos - en dos o en más ofertas electorales - corremos el riesgo de salir terceros, cuartos y quintos. Se atomizó la oferta opositora”, explicó durante una entrevista que brindó a este medio.
“Todavía falta para el 24 de junio. Puede pasar de todo”, advierten los correligionarios que aseguran que la discusión por la Lista Y no está cerrada. Son los mismos que sostienen que las puntas de las boletas son las definitorias, es decir, que lo que importan son los postulantes presidenciables y los intendentes. En caso de no poder colarse a la lista de Santilli, todo indicaría que acompañarán al candidato de Bullrich.
Pero en el armado bonaerense de Morales la mirada es totalmente distinta. De hecho, fueron los que le insistieron a Rodríguez Larreta para que descartada de plano la posibilidad de armar Listas Y. Las autoridades del Comité Nacional de la UCR buscan arrinconar a Abad para que defina a qué armado nacional apoyará. “El acuerdo de Maxi es para él mismo, lo que proponemos nosotros es más amplio para la UCR”, denuncian los radicales moderados.
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