“Cristina va a ordenar”, repiten en el Frente de Todos porteño incluso los que no pertenecen al núcleo duro del kirchnerismo. En la ciudad de Buenos Aires, al igual que a nivel nacional, el armado electoral sigue en stand by a la espera de una definición de la Vicepresidenta que termine de aclarar el panorama.
La Cámpora, que mantiene un hermetismo total sobre posibles fórmulas, sigue firme en su posición: no puede haber definiciones en el distrito si no se resuelve la interna a nivel nacional. De hecho, no descartan la posibilidad de extender las negociaciones hasta más cerca del 24 de junio, fecha límite para el cierre de listas.
Por su parte, el sector que nuclea al diputado nacional Leandro Santoro, al ministro de Turismo, Matías Lammens, y al vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos, puso el pie en el freno y decidió no avanzar con las acciones de campaña para no hacer naufragar las posibilidades de un acuerdo de unidad. “No queremos imponer nada”, explicaron a Infobae.
Habían sido los primeros en entrar en “modo campaña” con la difusión de una foto de presentación -que no cayó bien en las filas camporistas- y con el lanzamiento del primer spot con tono proselitista. Sin embargo, quienes impulsan la candidatura de Santoro para jefe de Gobierno esperarán por lo menos hasta el acto por el 25 de Mayo, donde CFK podría dar nuevas pistas de su estrategia.
A pesar de las diferencias sobre los tiempos electorales, parece haber una coincidencia entre los principales referentes de la coalición: van por el buen camino para lograr una fórmula de unidad en la capital.
Para eso, también esperan que la estrategia marcada por CFK termine de ordenar a los sectores que insisten con hacer una PASO, como el Frente Patria Grande de Juan Grabois, que lanzó las precandidaturas de Pedro Rosemblat y Ofelia Fernández, y “Movemos”, que promueve a la ex ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta.
“Los partidos más chicos se van a tener que ordenar, no se pueden exponer a quedar en ridículo sacando muy pocos votos y tampoco pueden perjudicar la estrategia general”, analizaron.
A nivel nacional, alcanzar un consenso no es un capricho sino un punto táctico central, ya que dividir el voto en una interna podría dejar al candidato más votado del Frente de Todos en cuarto lugar, detrás de Horacio Rodríguez Larreta, Patricia Bullrich y Javier Milei.
“¿Te imaginás los títulos de los diarios al otro día si quedamos cuartos? ¿A cuánto se va el dólar? ¿Cómo hacés para seguir gobernando después?”, especulaba un legislador que considera que lo mejor es afianzar el núcleo duro del kirchnerismo para mantenerse competitivo, alejar cualquier posibilidad de un desbarajuste económico y asegurarse el balotaje.
Para muchos, la mejor estrategia para garantizar un “piso alto” es que Axel Kicillof sea el candidato a Presidente debido a que retiene la totalidad de los votos de Cristina Kirchner. “Por eso CFK el jueves hizo hincapié en los pisos electorales”, señaló el legislador a Infobae.
“Estas elecciones van a ser de tercios. Así como la elección del año 19 fue de ‘techos’ porque había dos partidos nada más -el FdT y JxC sumaron el 90% del electorado- ahora estamos ante una elección de tercios donde lo importante, más que el techo, es el piso. Al ser tercios, lo importante es entrar al balotaje”, había analizado la Vicepresidenta en Duro de Domar.
La preocupación por el balotaje también está en la mente de la coalición porteña. Saben que no podrán dar un batacazo que los haga ganar la Ciudad, pero son conscientes de que una disparada del dólar o una corrida cambiaria entre las PASO y las generales los podría dejar en tercer lugar.
“La negociación en CABA es un poco más fácil porque no hay cargos o cajas que se puedan ganar, como por ejemplo en una intendencia. Solo tenemos que lograr listas de legisladores que reflejen la representatividad de cada sector”, concluyó el legislador.
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