Luego de varias horas de movilización y concentración sobre la Avenida 9 de Julio, la Unidad Piquetera decidió levantar las protestas y comenzó la desconcentración de miles de personas en el centro porteño. Al igual que toda la mañana, el tránsito continúa muy complicado en el centro porteño.
Tras acampar durante toda la noche en Plaza de Mayo, los manifestantes de la Unidad Piquetera partieron este jueves hacia el Ministerio de Desarrollo Social, donde reclamaron contra el Gobierno por el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, y contra la ministra Victoria Tolosa Paz por la baja en los planes. La novedad es que al corte en la 9 de Julio se sumaron por primera vez en la gestión de Alberto Fernández las organizaciones sociales oficialistas.
El acceso vehicular en las inmediaciones de Plaza de Mayo y hacia la avenida 9 de Julio registra aún cortes parciales y severas complicaciones, particularmente en la zona de Avenida de Mayo e Independencia.
Las organizaciones sociales enroladas en Unidad Piquetera marcharo hacia la sede del Ministerio de Desarrollo Social junto con las agrupaciones que integran la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) y la CTA Autónoma. También desde el Bloque Social por el Trabajo, compuesto por la Federación Nacional de Trabajadores cooperativistas, precarizados y de la economía social (FNT) y el Frente Milagro Sala participaron de la protesta para “rechazar el programa de miseria planificada que se acordó con el FMI diseñado para que la enorme riqueza que produce cotidianamente nuestro país se quede en el extranjero, o repercuta nacionalmente en los balances de un puñado de grandes corporaciones”.
La movilización de hoy, además de ser un reclamo a la gestión de Alberto Fernández, representó una advertencia a un posible gobierno opositor frente a las propuestas de candidatos como Patricia Bullrich y Javier Milei de realizar ajustes si llegan a la Presidencia.
La Marcha Federal Piquetera comenzó el lunes en la Quiaca. Los días siguientes se fueron sumando manifestantes de distintos puntos del país encolumnados en la Unidad Piquetera que llegaron a la Ciudad de Buenos Aires el miércoles.
Frente a Casa Rosada reclamaron “políticas contra el hambre y la pobreza”. “(Horacio Rodríguez) Larreta, (Javier) Milei y Cristina (Kirchner) castigan a los piqueteros porque estamos contra el ajuste. Estamos orgullosos de que estén en contra nuestro. Somos piqueteros contra los gobiernos de derecha, de centro derecha y de izquierda que ajusten a los trabajadores”, dijo el referente del Polo Obrero (PO), Eduardo Belliboni, desde un escenario improvisado en el centro de la histórica plaza.
Ayer, miércoles, a las 17, distintos referentes de organizaciones sociales arribaron desde distintos puntos del país a Plaza de Mayo y pidieron “seguir la lucha en las calles” en contra del “ajuste” y “las políticas del Fondo Monetario Internacional (FMI)”. Los piqueteros reclamaron primero frente al Congreso y pasadas las 15 instalaron las carpa para realizar el “acampe y vigilia” de cara a la manifestación de este jueves.
Lo que motivó el reclamo de las organizaciones sociales oficialistas es la baja de unos 400 mil beneficiarios del Potenciar Trabajo que se superponen con otros planes, según la solicitud del FMI al ministro de Economía, Sergio Massa. Al ser consultados por Infobae, desde el Ministerio de Economía y desde Desarrollo Social negaron que esto vaya a suceder. Sin embargo, Tolosa Paz ya dio de baja a casi cien mil beneficiarios por no haber validado su identidad y pertenencia al programa.
“BASTA DE AJUSTE DEL FMI”, afirma la cartelería del Movimiento Evita, la organización social -junto a Somos Barrios de Pie- más cercana a Alberto Fernández. Sus dos principales referentes, Emilio Pérsico y Fernando “Chino” Navarro, son funcionarios y dirigentes de diálogo con el Jefe de Estado, pero que desde hace más de seis meses le quitaron su devoción, armaron su propio partido político -La Patria de los Comunes- y se disponen a jugar fuerte en la interna del Frente de Todos. Inclusive tendieron puentes con la organización kirchnerista La Cámpora. De hecho, Pérsico se reunió con Cristina y Máximo Kirchner en su casa de Isidro Casanova, en La Matanza.
Las organizaciones sociales y los grupos piqueteros exigieron también más alimentos para los comedores y merenderos populares. “No hay morfi”: fue la frase con la que los dirigentes del Movimiento Evita resumieron a Infobae la crítica situación social que se atraviesan en los barrios populares a los cuales asisten ya no solo niños, sino jubilados y hasta empleados formales que no llegan a fin de mes.
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