El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, aseguró que la Justicia determinará finalmente si el intendente de Vicente López en uso de licencia y ministro porteño Jorge Macri podrá competir o no este año para sucederlo en el cargo.
“Yo hablé con él y de alguna manera nos mostró toda la evidencia que dice que puede ser candidato, pero la última palabra la tendrá la Justicia”, anticipó Rodríguez Larreta en diálogo con el periodista Marcelo Longobardi en radio Rivadavia.
La semana pasada, Martín Lousteau y la Coalición Cívica plantearon que existe una presunta incompatibilidad con la candidatura de Jorge Macri a jefe de Gobierno. Ambos sectores consideran que el primo del ex presidente Mauricio Macri no cumple con los requisitos de la Constitución de la Ciudad, que establece que los postulantes deben haber vivido 5 años en el distrito.
Jorge Macri es intendente con licencia en Vicente Lopez hasta el día de hoy, es el presidente del Pro de la provincia de Buenos Aires y votó en la última elección en Olivos. Semanas atrás se viralizó un fragmento de un reportaje realizado en 2021 que expone las contradicciones y deja al propio Macri en una situación incómoda. “¿Qué dirían si yo quisiera ser candidato en CABA?”, se lo escucha preguntar irónicamente.
Independientemente de lo que defina la Justicia, Rodríguez Larreta aclaró que sus ministros de Salud, Fernán Quirós, y de Educación, Soledad Acuña, continúan en la carrera por su sucesión. “Soledad ratificó ayer que continúa siendo candidata y Fernán es un lujo, fue quien mejor encaró la pandemia en toda la Argentina”, puntualizó. No obstante reconoció que lo ideal sería trabajar para tender a que el PRO tenga un solo candidato en las primarias porteñas de agosto para no dividir el voto. “Hay que ver cómo está cada uno, cómo están las encuestas y si finalmente lo logramos. Yo soy el jefe de Gobierno y por supuesto voy a tener opinión sobre la cuestión”, dijo. También anticipó que podría haber fórmulas cruzadas, lo que abre la posibilidad de que algún dirigente del PRO escolte a Lousteau, el postulante de la UCR, en la boleta.
Rodríguez Larreta vive horas intensas. Ayer decidió que habrá elecciones desdobladas y concurrentes en la Capital Federal. Esto implica que los porteños votarán dos veces el mismo día: a Presidente con boletas tradicionales y a jefe de Gobierno con boleta única electrónica. La jugada provocó el enojo de Mauricio Macri, quien entiende que su aliado político buscó beneficiar la candidatura de Lousteau.
El malestar de Macri es analizado también en otros términos. Por primera vez, Rodríguez Larreta planteó límites frente a quien fuera su jefe político y muestras los dientes anticipando que en caso de llegar a la Casa Rosada tendrá independencia. No quiere ser el Alberto Fernández de Cristina Kirchner, grafican en su entorno. “¿Tiene previsto reunirse con Macri?”, le preguntó hoy Longobardi. “No lo tengo en agenda”, minimizó el alcalde.
Macri, por su lado, quiere imponer a su primo como jefe de Gobierno. Es el único dirigente que puede garantizarle el control sobre ciertas áreas de la administración porteña. Además, teme que el PRO pierda la Ciudad por primera vez desde 2007 y se termine desdibujando como partido ante un eventual traspié en la contienda nacional.
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