La decisión del ex presidente Mauricio Macri de no ser candidato presidencial en las próximas elecciones empezó a acelerar un debate no solo en la fuerza opositora, sino también en el oficialismo. En las primeras horas post anuncio, varios dirigentes del Frente de Todos opinaron sobre el camino que definió tomar Macri. Dentro de la interna que atraviesa el Frente de Todos, hubo unidad con la línea con respecto a la definición del ex presidente: Macri se baja porque no le dan las encuestas. Sin embargo, la determinación oficializada este domingo también tiene su impacto en el oficialismo y la estrategia electoral a seguir. El debate está abierto y ahora una parte de la atención del kirchnerismo se focaliza en La Plata y en la figura del gobernador bonaerense Axel Kicillof.
Es que Kicillof busca ser candidato a la reelección bonaerense y para ello trabaja desde finales del año pasado en la búsqueda de consensos internos. Sin embargo, desde hace algunas semanas, en La Plata volvió sobrevolar la idea de que el mandatario bonaerense no quede fuera del lote de eventuales presidenciables del cristinismo, en caso de que Cristina Kirchner no sea la candidata presidencial del peronismo y la candidatura del Frente de Todos termine definiendo en una elección primaria.
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Luego de la definición de Macri, el panorama en la oposición empezó a ordenarse en lo que sugiere a intenciones presidenciales del PRO. Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich acelerarán sus campañas y en el peronismo ahora esperan señales de Cristina Kirchner. Según pudo reconstruir Infobae, no las habrá. Tampoco hay certezas inmediatas de qué hará el presidente. El kirchnerismo se resigna a un escenario de PASO, mientras no se despega el operativo Cristina 2023.
Pero si Cristina Kirchner efectivamente no es candidata presidencial, en el cristinismo hay dos caminos: un nombre que se repite y otro que suena un poco por necesidad y urgencia. El que se repite como probabilidad es el del ministro del Interior de la Nación, Eduardo de Pedro; el que asoma como una condición de necesidad es el de Kicillof. La lectura es que el gobernador bonaerense es dentro del oficialismo y en el ámbito de la provincia de Buenos Aires la figura con mayor reconocimiento detrás de CFK. La provincia de Buenos Aires, que representa el 38% del padrón electoral del país. También se agrupa allí el nombre de Sergio Massa, que en las últimas intervenciones públicas Cristina Kirchner suele mencionarlo en su rol de ministro de Economía. El caso del líder del Frente Renovador está, en parte, más atado al resultado económico.
Kicillof prefiere no hablar al respecto. Su Jefe de Asesores y especie de alter ego, Carlos Bianco, planteó tras la decisión de Macri, que Kicillof sigue trabajando para “sumar el mayor caudal de votos para la elección nacional”, pero desde la provincia de Buenos Aires.
“Lo más lógico es que -Kicillof- se dedique a gestionar la provincia y a juntar votos para nuestro frente, para poder gestionar nuestro proyecto político en esta jurisdicción y sumar el mayor caudal de votos para la elección nacional”, planteó el funcionario bonaerense este lunes en declaraciones a Radio Provincia. Bianco es una de las voces autorizadas por Kicillof para hablar sobre estos temas y además es uno de sus colaboradores que le lleva parte de las relaciones políticas con diferentes sectores del kirchnerismo. A cada actividad por fuera de la gestión que lleva adelante el gobernador es acompañado por su ex Jefe de Gabinete.
Pero Bianco también planteó que la decisión que se tome sobre la suerte de Kicillof será colectiva. Como contó Infobae semanas atrás, cerca del mandatario barajan la posibilidad -no deseada- de que salte a la pelea nacional. El líder de La Cámpora y presidente del PJ nacional, Máximo Kirchner, sigue repitiendo que no es momento de aferrarse a aventuras personales. El destinatario obvio de ese pedido es el presidente Alberto Fernández.
En las últimas semanas, empezó a circular inquietud sobre si esa bajada de línea que viene repitiendo Kirchner en realidad no tiene también como interlocutor al gobernador bonaerense. Cerca de Kicillof se ocupan de aclarar: “Si la decisión del espacio es que Axel sea candidato a presidente o a cualquier otro cargo, lo será porque no se trata de caprichos ni aventuras individuales”. Mientras, la mira sigue puesta en la reelección de la gobernación bonaerense.
Bianco planteó que en la provincia de Buenos Aires todos los sectores del Frente de Todos están ordenados detrás de la candidatura Kicillof. “Las encuestas dicen que el principal elector es Axel, quien además ha ido cosechando muchísimo apoyo político de la CGT, la CTA autónoma, CTA de los Trabajadores, Barrios de Pie, Movimiento Evita, de Juan Grabois”, deslizó este lunes.
Además, como Kicillof y buena parte del kirchnerismo, Bianco instó a ponderar a Cristina Kirchner como la candidata presidencial. “Nuestro programa de trabajo se basa en crear las condiciones para que Cristina sea candidata. Después decidirá ella si se presenta o no”.
Lo mismo piensa Kicillof, que el último viernes en el marco del Día de la Memoria participó de la movilización a Plaza de Mayo y luego, junto a un grupo de organizaciones nucleadas en La Patria es el Otro, se trasladó hasta la Corte Suprema en repudio a la situación judicial que pesa sobre Cristina Kirchner. Arriba del trailer de Madres de Plaza de Mayo y con una remera con la cara de su presidenta, Hebe de Bonafini, el gobernador bonaerense fue uno más de los que cantó “Cristina presidenta…”.
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