El canciller de Ecuador, Juan Carlos Holguín, acusó al gobierno argentino y al ex embajador en Quito, Gabriel Fuks, de ser cómplices de la fuga de la ex ministra María de los Ángeles Duarte, condenada por hechos de corrupción.
“Por los elementos que se han ido recopilando, existe una complicidad en la salida de una persona que estaba sentenciada por corrupción”, aseguró Holguín en diálogo con el periodista Eduardo Feinmann en radio Mitre.
Duarte fue condenada en 2020 a ocho años de prisión por cohecho, un delito de corrupción en contra de la administración pública que fue juzgado dentro del caso Sobornos 2012-2016. Esta investigación judicial reveló una trama de financiamiento irregular del movimiento Alianza País, la coalición política que encabezó el expresidente Rafael Correa, también condenado, y que tuvo como una de sus principales protagonistas a la entonces ministra de Transporte y Obras Públicas.
Desde ese entonces, la ex funcionaria se refugió en la Embajada de Argentina en Ecuador junto a su hijo. Como las sedes diplomáticas son consideradas territorios extranjeros, las autoridades locales no podían ingresar a detener a la prófuga. El gobierno de Alberto Fernández autorizó su ingreso y estadía como “huésped por razones humanitarias” hasta que en diciembre del año pasado decidió concederle un asilo.
Semanas atrás, Duarte salió de la embajada y se escapó hacia Venezuela. El gobierno de Guillermo Lasso está convencido de que la ex ministra recibió ayuda de autoridades argentinas para fugarse y en virtud de eso declaró persona no grata al embajador y lo expulsó.
“Hay un sentimiento de impunidad bastante complejo. La incoherencia del embajador en sus primeros argumentos ante el gobierno de Ecuador dejaron mucha claridad de que existían falsedades directas y por eso el Estado Ecuatoriano en su conjunto decidió declararlo persona no grata”, afirmó Holguín.
Los investigadores creen que la ex funcionaria salió de la Embajada en el baúl de un vehículo. Al respecto, el canciller aseguró: “Nosotros vamos a esperar que termine la investigación, acá hay independencia de poderes, pero sí puedo mencionar que hubo contradicciones en las versiones del mismo embajador con las autoridades de Ecuador”.
Por ejemplo -explicó Holguín- en un principio dijo que no había grabaciones de cámaras de seguridad sobre la fuga, luego dijo que sí existían y se habían dañado y finalmente admitió tener los registro pero no quiso entregarlos a la Justicia.
La semana pasada, durante una entrevista con Infobae, el ex embajador Fuks rechazó las acusaciones del canciller: “Es un mentiroso, no puede comprobar ninguna de las cosas que dice”