El diputado Omar De Marchi estará obligado a competir dentro del frente Cambia Mendoza para las PASO que esa provincia disputará el próximo 11 de junio. En caso contrario, no podrá usar el sello del PRO para su candidatura a gobernador. A ese acuerdo llegaron los equipos estratégicos del partido amarillo y el radicalismo que trabajaban en las últimas horas para destrabar la interna que amenazaba con romper Juntos por el Cambio, según pudo saber Infobae.
La particularidad de Mendoza es que, pese a contar con la instancia de PASO, el diputado De Marchi (apoyado por Rodríguez Larreta) consideraba que el PRO no tenía participación en la coalición mendocina y que, por ese motivo, podía presentarse por afuera del frente. Más allá de las denuncias por la cercanía del radicalismo local con el Frente Renovador y Libres del Sur, en el interior de Juntos por el Cambio a nivel nacional el caso era leído como una jugada de presión del jefe de Gobierno porteño hacia su contrincante Bullrich.
En las últimas horas, el equipo estratégico del jefe de Gobierno porteño le confirmó al entorno de Cornejo que no le prestará el sello del PRO a De Marchi para competir como candidato a gobernador por fuera de Juntos por el Cambio que, a nivel local, se representa con el nombre Cambia Mendoza. Esa era la postura que mantenían Mauricio Macri y Bullrich en las últimas reuniones de la Mesa Nacional.
“Horacio le soltó la mano”, repiten en Mendoza. Sin embargo, en el larretismo insisten en que la decisión del ya lanzando candidato a presidente tiene como objetivo “sostener los principios de la coalición y defender la unidad”. Mientras tanto, según pudo reconstruir este medio, De Marchi no descarta ningún escenario: presentarse en la PASO con el sello del PRO o presentarse por fuera. “No va a romper pero hasta el 11 de junio pueden pasar muchas cosas”, aclaran.
“El PRO de Mendoza tiene su propio sistema de decisión. La fecha límite para resolver es el 12 de abril. Es intensión de Horacio que haya unidad, pero las definiciones son en abril”, agregó Álvaro Martínez, presidente del partido amarillo local, en referencia a la instancia para la presentación de alianzas.
Larreta almorzó la semana pasada con el gobernador mendocino, Rodolfo Suárez, y el senador radical Cornejo, y les había prometió solucionar “antes del jueves” (por ayer) el conflicto con el PRO ante la insistencia del diputado De Marchi en competir por afuera de JxC por la gobernación de Mendoza.
La postura de De Marchi
En reiteradas oportunidades, De Marchi denunció que en Mendoza no existe Juntos por el Cambio: “En Mendoza no gobierna un frente sino el radicalismo, con todo lo bueno y lo malo que eso pueda significar. Hoy, los que aparecen con algún nivel de proximidad al radicalismo tienen que ver con Libres del Sur y con (Sergio) Massa, con el Frente Renovador”, dijo a Infobae.
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De Marchi se había convertido en un problema político para Rodríguez Larreta, quien predica la unidad de la coalición y asegura que debe cumplirse el reglamento electoral del PRO y de Juntos por el Cambio, donde se afirma que en aquellas provincias en donde hay PASO, como Mendoza, “todos los partidos se comprometen a utilizarlas como método de selección de candidatos”.
Bullrich, aliada de Cornejo, fue muy crítica contra De Marchi: en una reunión de la Mesa Nacional partidaria, le recordó que debía cumplir el reglamento electoral y que “todo el PRO está bregando por la unidad” de la oposición. El diputado larretista alertó que es difícil competir contra “el aparato” del radicalismo gobernante en Mendoza, mientras la titular partidaria, ante la presencia del jefe de Gobierno, dijo: “Es el mismo aparato que vos conocés y utilizás desde la ciudad de Buenos Aires”. Y le advirtió: “Bancátela, Omar: si no te gusta Cornejo, ganale en las PASO, pero no rompas Juntos por el Cambio por un proyecto personal. Te vamos a intervenir el partido”.
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