La rusa investigada por traer embarazadas a parir a la Argentina cobró dos asignaciones familiares

La Anses se presentó en la causa para dar precisiones sobre los subsidios que recibió Elena Kuklina

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La jueza María Servini presentó una denuncia por el cobro de las AUH
La jueza María Servini presentó una denuncia por el cobro de las AUH

Elena Kuklina es rusa, tiene 26 años, vive en Puerto Madero, tiene oficinas en Recoleta, posee una camioneta 4x4, es madre de una nena y un nene nacidos en Argentina y está inscripta como monotributista. Está bajo investigación judicial en el juzgado a cargo de María Servini porque es la dueña de una de las agencias que traen embarazadas rusas a parir en la Argentina.

Los investigadores señalan que la meta final de la llegada a Buenos Aires es conseguir la ciudadanía y el pasaporte argentinos. A partir de haber tenido un hijo en el país se puede aspirar a la residencia permanente, paso necesario para tramitar ante la Justicia la ciudadanía. Para conseguir la residencia permanente se tiene que presentar una constatación del domicilio en Argentina, lo que muestra la voluntad de quedarse en el país.

Hasta ahora en la investigación se detectaron unos 70 trámites iniciados ante la Dirección Nacional de Migraciones en los que la constatación de domicilios es falsa. Fue allí que la justicia posó la mirada sobre los gestores encargados de esos trámites que trabajan para las agencias bajo investigación. Hasta ahora los imputados son Kuklina, su esposo Ruslan Yuldashev -en tanto dueños de la agencia- y la gestora Olga Guz que fue la que hizo los trámites.

La causa comenzó en diciembre de 2022. Entre las primeras informaciones recibidas por el juzgado en enero de 2023 se encuentra un oficio de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES). En ese oficio electrónico se adjuntaron capturas de pantalla en las que se registró el cobro de una prestación por cada uno de los hijos de Kuklina. Según fuentes judiciales no había ninguna explicación que dijera cuál era la prestación social que cobraba Kuklina.

En el juzgado de Servini interpretaron que cobraba una Asignación Universal por Hijo (AUH) por cada uno de sus hijos, y por eso hicieron la denuncia por el delito de defraudación contra la administración. A todas luces no daba el perfil económico para acceder a esa prestación. Cobró durante varios meses la suma de 10.000 pesos por cada hijo.

La ANSES se presentó ante el juzgado de Servini para aclarar que Kuklina no cobrar AUH sino Asignaciones Familiares
La ANSES se presentó ante el juzgado de Servini para aclarar que Kuklina no cobrar AUH sino Asignaciones Familiares

En un allanamiento realizado en su casa hallaron caso 70.000 dólares y 3000 euros. Se comprobó en la causa que Kuklina es dueña de una camioneta de alta gama, que sus oficinas están en Recoleta y que alquila un departamento en Puerto Madero por un valor de 3000 dólares mensuales. Ante esa situación Servini presentó la denuncia que le tocó al juez Julián Ercolini quien este año está de turno con el fiscal Eduardo Taiano.

Ante la difusión pública de la denuncia, ANSES se presentó ante el juzgado de Servini para aclarar que Kuklina no cobra una AUH por cada uno de sus hijos sino que es beneficiaria de una Asignación Familiar. En el escrito presentado ante el juzgado de Servini se explica que: “la Asignación Familiar (AAFF) alcanza a las/os trabajadoras/es en relación de dependencia (Ley Nº 24.714) y a “[l]as personas adheridas al Régimen Simplificado para Pequeños Contribuyentes (RS) que tengan efectivamente abonadas las imposiciones mensuales al Régimen Simplificado para Pequeños Contribuyentes” (art. 3º, inc. a) del Decreto de Necesidad y Urgencia N° 593 del 15 de abril de 2016).

Según se explica en la web de ANSES, los monotributistas están en condiciones de cobrar Asignación Familiares. En la misma web se resalta que “Incrementamos el tope de ingresos por grupo familiar para acceder a las Asignaciones Familiares. El nuevo tope pasa a ser de $316.731 y el tope individual es $158.366. Con esta medida, sumamos a casi 1 millón de chicas y chicos a las asignaciones familiares, acompañando a 2,5 millones de familias argentinas”.

Los investigadores tienen la hipótesis de que se llega a cobrar 35.000 dólares por el servicio de asistencia y entrega de documentación a las rusas que vienen a la Argentina. Eso implicaría que Kuklina no encajaría en el perfil de monotributista declarado ante las autoridades impositivas. Su vida en Puerto Madero, tampoco. Es por eso que sostienen que debe investigarse el modo en que consiguió el beneficio. No es una AUH, es una AAFF, como se abrevia en ANSES a la Asignación Familiar.

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