Mauricio Macri y Horacio Rodríguez Larreta se reunirán nuevamente este martes por la tarde en el country Cumelén, en Villa La Angostura. La versión había sido anticipada por Infobae y agitó la interna del PRO: el encuentro se producirá una semana después del que mantuvieron allí el ex presidente y Patricia Bullrich, en medio de algunos gestos privilegiados hacia la titular del partido.
Nadie se anima a afirmar si ahora habrá foto Macri-Larreta. En los contactos que tuvieron entre el 31 de diciembre pasado y el 6 de enero, hubo charlas a solas, pero sin fotógrafos presentes. Por eso resultó sugestivo que la reunión de Macri y Bullrich haya incluido una foto de ambos con sus parejas, Juliana Awada y Guillermo Yanco. Todo parece indicar que este martes habrá una foto, por más que en el larretismo le restaron importancia a la imagen: “Fue una reunión (la que tuvieron Macri y Rodríguez Larreta a principios de año), no una exhibición de poder”, dijo un referente del sector.
Esta vez, sin embargo, parece altamente probable que haya una imagen del encuentro e incluso parecida a la que consiguió Bullrich: Macri y Larreta se reunirán por la tarde y a la noche cenarán en la casa del ex presidente con Awada y la novia de Macri, Milagros Maylin. El jefe de Gobierno volverá a Buenos Aires en la mañana del miércoles y retomará una intensa agenda de campaña.
Te puede interesar: La pelea del PRO suma millas: Larreta acampa en el sur, Bullrich se arriesga en Córdoba y Macri apunta a Italia
El jefe de Gobierno pactó entonces un nuevo cónclave con el ex presidente porque ya sabía que iba a volver a la zona para pasar unos días de descanso con su novia. Los dos viajaron el miércoles pasado a San Martín de los Andes con la idea de regresar el domingo. Luego hubo cambio de planes: decidieron quedarse lunes y martes porque acamparon en la zona, aunque seguramente el motivo fue la confirmación del encuentro en Cumelén, a 100 kilómetros de donde pasó unos días Larreta.
Cerca del alcalde porteño confirmaron que se vio unas 4 veces con el ex mandatario a principios de año: hubo dos reuniones a solas y otros encuentros sociales, con familiares y amigos en común como Luis “Toto” Caputo, ex ministro de Finanzas y titular del Banco Central del gobierno de Cambiemos, quien había alojado a Macri y Awada en 2011 en su casa de Cumelén para que conocieran ese paradisíaco lugar. El matrimonio quedó tan deslumbrado por el entorno que compró una propiedad y desde entonces veranean todos los años en el country de Villa La Angostura, Neuquén.
Bullrich viajó a Cumelén el lunes pasado, pocos días después de haber regresado de sus vacaciones en Brasil, y su visita estuvo enmarcada en gestos sugestivos por parte de Macri que Rodríguez Larreta no recibió y que dieron lugar a especulaciones políticas: la invitó a pasar dos días en su casa del sur; le pidió especialmente que fuera acompañada por su esposo; accedió a sacarse una foto de ambos con sus parejas, que incluso publicó en su cuenta de Instagram, y hasta le solicitó a la titular del PRO que postergara unas horas su regreso a Buenos Aires para seguir conversando y almorzar juntos.
El bullrichismo celebró ese trato preferencial de Macri hacia su jefa política, pero admitió que no hubo ni habrá ninguna expresión que denote un apoyo a su proyecto presidencial. En las caminatas que tuvo con Bullrich a orillas del Nahuel Huapi, Macri descartó cualquier acuerdo en el PRO y ratificó que las candidaturas presidenciales del espacio deben definirse en las PASO. Además, le garantizó que mantendrá su imparcialidad sin levantarle la mano a ningún postulante. Y hubo un indicio clave: el ex mandatario le dio a entender con claridad que no competirá en las próximas elecciones.
La ex ministra de Seguridad se sintió fortalecida por su contacto tan cercano con Macri y, además, porque el día en que llegó a Cumelén se confirmó que el dictador venezolano Nicolás Maduro había cancelado su visita a la Argentina para participar de la Cumbre de la CELAC, un dato de alto impacto que está relacionado con la presentación de Bullrich ante la DEA contra el líder bolivariano.
Ahora, aunque no lo haya buscado para equilibrar el trato recibido por Bullrich, Rodríguez Larreta volverá a reunirse con Macri, tendrá una comida familiar y seguramente una foto conjunta. De ser así, las señales políticas de Macri en la interna del PRO se habrán emparejado, aunque no tanto: María Eugenia Vidal, la otra presidenciable del espacio, no tiene previsto viajar a Cumelén y vería al ex presidente a mediados de febrero en Buenos Aires, cuando regrese de la Patagonia.
Seguir leyendo: