El intendente de Pinamar, Martín Yeza (PRO), aseguró que para el kirchnerismo “la provincia de Buenos Aires es un botín electoral”, cuestionó al gobernador Axel Kicillof y reconoció que su candidato a presidente es Mauricio Macri.
Aseguró que el nivel de ocupación este año en esa ciudad de veraneo está en niveles por encima del 83% en la semana y del 93% los fines de semana, un poco por debajo de los registros récord que hubo el año pasado, en las primeras vacaciones posteriores a la pandemia. De todos modos, destacó que se trata de un porcentaje óptimo: “Así se evita la saturación de los servicios”, resaltó.
Si bien destacó que este año el gobierno bonaerense envió más efectivos policiales y agentes de tránsito y transporte a Pinamar, cuestionó a Kicillof y advirtió que las intendencias del PRO fueron perjudicadas en la distribución de los recursos girados por la administración provincial a las municipalidades. “Creo que Kicillof tiene un problema con las personas que pensamos diferente”, afirmó en el reportaje.
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“Va a ser muy difícil que alguien pueda ser un buen presidente de la Argentina si no tiene un buen gobernador o un gobernador con experiencia en la provincia de Buenos Aires”, manifestó el dirigente opositor en una entrevista con Infobae.
- Empecemos por la temporada. ¿Cómo viene el turismo en Pinamar y estas primeras semanas del 2023?
Desde que asumí como intendente de Pinamar, conforme al oficio, fui evolucionando en lo personal conforme también evolucionar a mi vida personal, me casé fui papá de un bebé. Dos bebés -un nene y una nena- y a medida que pasan los años vas tomando como una mayor noción de ciertas cosas.
Mucha de la gente que viene a Pinamar viene y algunos de los mejores recuerdos de su vida, van a estar vinculados con Pinamar, por eso también la ciudad crece como crece. Mucha gente se vino a vivir, pero también gente que se viene 15 días 30 días, 2 meses o la temporada completa. Eso es una sensación muy linda.
Cuando te cruzás gente que te dice “vos sabés que yo acá pasé los mejores veranos con mi papá” o “acá me enamoré y me terminé casando con la que después fue mi esposa o mi marido”.
Así que gobernar una ciudad como esta es una cuando tenés las antenitas paradas, pasa a ser una cosa muy linda, con buena ocupación, lindas actividades, lindo clima.
- ¿Cómo viene la ocupación?
Mirá, en la semana estás en el 83% y los fines de semana pasás al 93%.
- ¿Comparado con el año pasado es más o menos?
Un poquito menos, pero es una cantidad, si pudiera tener un joystick, lo haría así, así como está ahora.
- Así creés que es ideal..
Sí, porque el año pasado, por ejemplo, los fines de semana tuvimos al 98% y nada está diseñado para funcionar al 100%, técnicamente, demasiado tiempo. S te saturan los servicios. Yo tengo una idea sobre el turismo que es, para un montón de ciudades, turismo es que venga la gente, pero para Pinamar es distinto, porque tiene una cantidad de camas solo comparable con Mar del Plata y Capital Federal.
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Tenemos aproximadamente 50.000 camas vinculadas a la hotelería, aparthotel, departamento con servicios y demás, mientas que somos 50.000 habitantes y en total hay 380.000 camas en Pinamar.
Es decir, casi octuplicamos población en verano: eso es una bestialidad. Para nosotros turismo no es que venga la gente, sino que venga la gente, que consuma bienes y servicios, que se queda a dormir y que consuma bienes y servicios y, si hicimos las cosas bien, que quieran volver.
- Te paso al tema de controles. Hasta ahora no hubo grandes episodios de violencia ni accidentes graves con cuatri, ni episodios desagradables.
Es para hablar del tema en dos planos: entre el 2015 y el 2019 yo había logrado esto. De hecho hasta el 2019 y 2020, los últimos tres años, no había tenido ninguna fatalidad vinculada al tema cuatri. Y con el tema de la nocturnidad lo mismo: en la pandemia lo que pasó es que mucha gente vino acá, habían estado encerrados y evidentemente pasó algo en otro plano.
Este verano lo que sí cambió respecto a otros es que estamos con un mayor acompañamiento de la provincia de Buenos Aires tanto del Ministerio de Transporte, como del Ministerio de Seguridad, en los distintos controles en distintos puntos.
Acá pudimos un punto de colaboración y cooperación, que hace que a los esfuerzos municipales se sumen los provinciales de manera coordinada y que estemos teniendo la temporada que tenemos.
Dicho esto, no estamos exentos de que pase algo. Si pasa algo es alguien que tuvo que haber violado muchos controles muy intensos. Hoy, si vos te prendes en las redes sociales, la mayor cantidad de insultos o lo que sea es porque estamos haciendo demasiados controles de tránsito porque el ingreso a La Frontera, tanto en Pinamar como en Cariló, se hace lento, se hacen colas. Y sí, eso es porque muchos van sin los papeles y sin la documentación.
- Tuviste críticas del kirchnerismo muy fuerte por el tema “trapitos”. Fueron bastante duros y hasta te hicieron una denuncia penal.
Primero: que se consigan un problema real, un problema honesto, porque el problema lo tuvieron además con el uso del lenguaje. Como dije “estamos deteniendo trapitos a full”. Entonces dicen que es un uso del lenguaje tal, que incita a la violencia, que deviene en un abuso de la autoridad. Yo lo que digo es… “bueno, está bien, dale”.
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Lo bizarro es que además hacen una denuncia penal y van a hacer que un secretario de juzgado o una persona del juzgado tenga que estar trabajando plus, según en qué juzgado caiga, y capaz coincide ideológicamente con ellos. Entonces tenés que ir y es un uso el del recurso judicial.
Dicho eso, para mí el orden no es ni de izquierda ni de derecha. Ciertamente, tener un repasador en el antebrazo no configura ni un delito ni una contravención. Ser amable y dar una mano para estacionar, tampoco. Lo que es una contravención o un delito es la extorsión o la amenaza.
Lo que hicimos es algo muy simple, muy básico. Para mí es una obviedad, que es que la persona que amenaza o extorsiona en una ciudad que es segura, que tiene un operativo Sol extraordinario, coordinado con el Ministerio de Seguridad de la provincia, con la Guardia Urbana Municipal, con la gente de tránsito, no es necesario que haya un cuidacoches. Si lo hay, no puede extorsionar ni amenazar.
Ya es el séptimo verano que lo hago, aunque cada año tenemos que estar trabajando porque vienen a probar suerte, a tirar del hilito, vienen de distintas provincias. Cuando asumí en 2015 en una nota contaron que lo mandaban de la propia Gobernación y había generado como un “quilombo diplomático”. Esas personas pedían que le diéramos 15.000 pesos, que a plata de hoy serían como 350 mil pesos a cada uno de los trapitos que habíamos sacado. Y que les pagáramos el bondi para volver.
- ¿Volver a qué lugar?
A Tucumán. Eran personas que habían venido de Tucumán… Dejate de joder…
- Mencionaste a Axel Kicillof y al gobierno de la provincia de Buenos Aires. En realidad por el tema del Operativo Sol. ¿Cómo es la relación con Kicillof?
Me gustaría que fuera mejor, pero no lo es. Sí que, afortunadamente, en este último año pudimos lograr con algunos ministerios en particular laburos que son pre-ideológicos: la seguridad, el transporte, la seguridad de los ciudadanos. Hasta ahí llega. Me gustaría que fuera mejor, pero creo que Kicillof tiene un problema con las personas que pensamos diferente.
- A ver…
Casi que le molesta los lugares en donde hay un intendente que no es de su propio partido político. No le gusta. Que es legítimo, pero el problema es cuando eso quizás es llevado a la gestión. Las mismas cosas que a las que acceden, desde un fondo infraestructura para los municipios, que hemos trabajado en el presupuesto, a un municipio del oficialismo le llegan en un mes y a nosotros nos tarda un año.
- ¿Te pasó eso?
Sí, concreto.
- ¿Sentiste que fuiste discriminado por la provincia?
No. Yo no. En general muchos intendentes del PRO, particularmente.
- ¿Pinamar entonces sí fue discriminado?
El uso de la palabra discriminado. Sino estoy como el abogado del kirchnerismo…
- Perjudicado.
Ocurren cosas que no son saludables para los vecinos, que a los vecinos de Pinamar no les importan en absoluto a qué partido político pertenece cada uno, pero bueno.
- ¿Pero sentiste que para los vecinos de Pinamar hubo un perjuicio?
Sí.
- De parte del gobierno de Kicillof.
Sí. No sé si por Kicillof, pero a veces las segundas líneas, terceras líneas hacen esas cosas. Es parte de la política, no que nunca nadie se termina de hacer cargo de las cosas y por eso yo creo que que necesitamos un cambio rotundo en la cultura de hacer política. No tiene nada que ver con cerrar la grieta: si hay alguien que está a favor de la usurpaciones y alguien que está en contra de las usurpaciones no vamos a hacer que se cierre esa discusión.
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Pero sí que hay cosas donde me parece que la política no se tiene que meter de ninguna manera que son ciertas reglas institucionales, ciertos deberes del Estado.
El año pasado con el vacunatorio en todos los municipios del oficialismo, el vacunatorio se hizo con el sistema municipal. Acá lo hicieron con un sindicato y lo pusieron el 6 de enero, porque había salido en los diarios que acá en Pinamar no había ningún vacunatorio. Había vacunatorio en todos los distritos, menos en Pinamar. Decís, “che, por qué?”, acá no viene la gente, son ciudadanos de segunda, no es tan importante, el impacto cuantitativo no era el relevante. ¿Cuál era la explicación? Después se terminó corrigiendo y generó discusiones.
Es parte de las discusiones que tienen que cambiar y de mi parte siempre va a estar la mejor para tratar de encontrar coincidencias y hacer que esto funcione.
- Vamos a la política. ¿Cuál es tu rol en la política interna de Juntos por el Cambio y cuál es tu proyección? ¿Qué vas a hacer el próximo verano?
Mi prioridad es ser intendente de Pinamar, amo Pinamar, es el el lugar en el que me crié, el lugar que amo, el lugar en el que me imagino que mis hijos se críen, pero no le corro el cuerpo al asunto y yo quiero ser parte de una generación que venga a cambiar las cosas. Una generación que venga a cambiar la forma de hacer política, que venga a innovar sobre la política y estoy tratando de dar esa batalla dentro del PRO.
Creo en el liderazgo de Mauricio Macri en ese sentido. Lo que representó el PRO a partir del 2014, la primera fuerza política que después de mucho tiempo logra configurar una identidad que no estaba diseñada desde el mero antikirchnerismo o el mero antiperonismo, sino con una visión de país.
Esa visión implica estar conectados al mundo, conectados geopolíticamente con ciertos países, con Occidente, con Europa, con Estados Unidos, que entendía que no había una dicotomía tal entre distribución de riqueza y generación de riqueza, con una agenda que me hubiera gustado que se desarrollara más -y que el propio Mauricio lo dice- desde burocratización, nuevas regulaciones más modernas.
Creo que ahí hay una algo súper interesante de lo que representó el PRO para un montón de gente, personas, ciudadanos y que ahora requiere otra fuerza, otra potencia y yo quiero estar ahí, quiero ser parte de los que estén discutiendo eso.
- En provincia de Buenos Aires, hay superpoblación de candidatos, 6 o 7 de Juntos por el Cambio. ¿Cuál es tu candidato a gobernador?
Desde hace 14 años trabajo con María Eugenia Vidal y con Cristian Ritondo y la verdad que lo que más me gusta de trabajar con Cristian -él me invitó a ser su jefe de equipos técnicos- es que es una persona primero que tiene calle, es normal, tiene sentido común, está conectado con cosas simples y además tiene experiencia. Sabe lo que es gobernar la provincia de Buenos Aires, sabe lo que es la provincia de Buenos Aires y además conoce la provincia desde un lugar que es uno de los más sensibles, como fue la lucha contra el narcotráfico, conocer los barrios más humildes, lo más postergados, los más marginados, sabe cuál es la dinámica en algunos barrios.
- ¿Cómo se dirime esa interna y esa superpoblación de candidatos? Tenés Santilli, Néstor Grindetti, Joaquín De la Torre, Javier Iguacal, y otros. ¿Cómo se dirime eso?
El PRO en particular, sacando Juntos, siempre fue una fuerza política moderna que hasta acá, al menos, ha sido una fuerza política profesional, en donde las decisiones se toman basadas en números. Si tuvieras un candidato que puede asegurar determinados resultados y tenés otro con un resultado muy inferior, es una situación. Ahora si tienes una paridad y ves que entre las candidaturas se complementan, alcanzan lugares sociales que son sumamente interesantes, que el orden de los factores no altera el producto, que son liderazgos complementarios,: creo que ahí puede pasar interesante, a mí me entusiasma mucho pensar en el día después de las PASO, de las elecciones de las primarias.
Que todos esos nombres se junten: tenés un Néstor Grindetti, que es un genio de los números, tenés un Javier Iguacel, que es una persona súper innovadora, que tiene el foco puesto en reducir los procesos de burocratización. Tenés a Diego Santilli, que es una persona que tiene experiencia, que le gusta estar con la gente.
Lo tenés a Cristian (Ritondo) que conoce la provincia de Buenos Aires, que es un profesional, que tiene sentido común y a mí me gustaría que este proceso lo lidere él.
Además, el próximo presidente de la Argentina va a tener una tarea titánica y si ese próximo presidente de la Argentina tiene un gobernador de la provincia de Buenos Aires que no tiene experiencia en la provincia de Buenos Aires, esa tarea se le va a hacer más difícil.
Ahora invierto el razonamiento: ¿puede alguien ser un buen presidente de la Argentina si no tiene un buen gobernador? Buen gobernador no lo pongo en un sentido sólo ético-moral, lo pongo en otro contexto, que es que no te llame para preguntarte cómo es cerrar una paritaria tan compleja como es la provincia de Buenos Aires.
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Ahí me parece que lo de Cristian Ritondo toma otro sentido completamente diferente y que le da un valor por encima de los demás.
- Está la idea de que el kirchnerismo se quiera refugiar en la provincia de Buenos. Que la elección nacional está casi perdida y que quieren asegurar la provincia de Buenos Aires. ¿Te imaginás un gobierno de la provincia continuando Kicillof con un presidente de Juntos por el Cambio? ¿Cómo sería ese país?
La provincia de Buenos Aires requiere un rediseño institucional y es parte de lo que vengo discutiendo con Cristian Ritondo. La provincia de Buenos Aires está dividida por secciones electorales, no por regiones productivas. Entonces, como dice la Chiqui Legrand “como te ven, te tratan?
¿Si vos estás dividida en secciones electorales, cómo te van a tratar? Como un botín electoral. Si su diseño institucional es meramente electoral y no productivista, no economicista… y bueno, ciertamente, el abordaje y el sesgo que va a tener una parte del sistema político para con la provincia va a ser de un lugar electoral.
Por eso creo que acá hay que romper el paradigma de cómo fue abordada la provincia. Ellos querrán hacer eso, pero yo creo que la provincia de Buenos Aires requiere un cambio en el diseño institucional, en la manera de relacionarse con la Argentina.
Eventualmente se verá. No será ni la primera ni la última vez que la provincia de Buenos Aires tenga un color distinto a la de la nacional. O podría pasar al revés: que tenga un gobernador del PRO y que tenga un presidente de otro color político. Todo eso puede pasar y está dentro del universo de las variables, pero no es deseable.
Ya nos dimos cuenta con María Eugenia Vidal, con Mauricio Macri, con Horacio Rodríguez Larreta que cuando coinciden las tres jurisdicciones se pone mucho más interesante. Y para algunos de los cambios estructurales que hay que hacer, va a requerir una gimnasia de diálogo muy aceitada.
- Perdieron, Martín. Tenían las tres jurisdicciones y perdieron.
Felipe González dice que la democracia es una ética de la derrota. Ganar es más fácil que perder, por supuesto que viene con una responsabilidad, con una presión, pero bastante más difícil es tener que perder, volver a tu casa tomar envión.
Pero perder es parte del ejercicio. Pero que el resultado electoral no opaque lo que fue ese proceso, donde se había avanzado en un montón de sentidos, en una gimnasia metropolitana. Para lo que sería un segundo tiempo va a ser ya en ese proceso que se empezó en ese primer tiempo, entre el 2015 y el 2019, institucionalizarlo. Hay que institucionalizar un área metropolitana de Buenos Aires.
Por eso creo que va a ser sumamente importante y por eso lo creo así. Va a ser muy difícil que alguien pueda ser un buen presidente de la Argentina si no tiene un buen gobernador o un gobernador con experiencia en la provincia de Buenos Aires.
- Dijiste botín político o botín electoral. ¿Es la provincia de Buenos Aires un botín electoral para el kirchnerismo?
Tal como está diseñada la provincia de Buenos Aires, sí e, incluso dentro de sus propias filas, tenés a algunos representantes como Paco Durañona que son más específicos todavía y dicen que ya no es la provincia de Buenos Aires siquiera, sino solamente el Gran Buenos Aires.
- ¿El botín?
Lo dicen ellos mismos.
- Hablaste del segundo tiempo recién y Mauricio Macri se presenta en Mar del Plata. ¿Mauricio Macri es tu candidato a presidente?
Uno de mis tres deseos de fin de año fue que Mauricio vuelva a ser Presidente. Después vos me dirás que las encuestas… pero no sé. Te hablo de mi experiencia personal: cuando lo escucho, me doy cuenta que está en un punto de madurez tal, de las cosas de las que aprendió, las cosas que ve, las cosas que haría diferente, las cosas en donde tendría el cuero curtido de una manera diferente.
Cosas que capaz en otra época lo preocuparon de una manera saber que sí, que hay cosas que vas a tener que tener una resistencia distinta y que va a haber un montón de personas que lo vamos a acompañar en ese proceso.
Hoy no es candidato a presidente, pero es un deseo personal. Y si no lo fuera es fundamental. Él es una pieza estratégica: para mí Mauricio está como Messi, como Di María, en esta dinámica, en esta etapa en donde tiene tanto para aportar.
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Dicho eso, trabajo con María Eugenia Vidal y ella es mi candidata a presidente, pero lo hemos hablado con María Eugenia. Si Mauricio tomara una decisión de este estilo evidentemente lo tendríamos que pensar. Eso no quita, que pienso que Horacio Rodríguez Larreta es un genio de la gestión, que ha diseñado un modelo de gestión en la ciudad de Buenos Aires, que Patricia Bullrich como presidenta el PRO, que ha demostrado con su coraje que podía poner de pie al PRO luego de la derrota del 2019 y yo siento, porque además trabajo con ella hace muchos años.
Siempre me gustó de María Eugenia Vidal que reúne requisitos de ambos y configure una síntesis. Mauricio además tiene la experiencia. Proceso que viene de la Argentina tendría que ser algo así como un Mauricio Macri liderando esta agenda de transformación para la Argentina de una manera sostenible, con un diseño institucional y, además, generando capas de renovación generacional dentro del propio Juntos, dentro del propio PRO.
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