El próximo martes 10 de enero el canciller de Japón Yoshimasa Hayashi se reunirá con el presidente Alberto Fernández alrededor del mediodía en la Casa Rosada como parte de la gira que el diplomático de 61 años está realizando por diversos países del continente americano. También mantendrá un encuentro bilateral con su par, Santiago Cafiero, como parte de una estrategia que apunta a fortalecer el vínculo comercial entre ambas naciones y también con un costado geopolítico de relevancia.
Japón está preocupado por el avance de la influencia de China en América Latina. El gobierno de Xi Jinping profundizó su vínculo con varias naciones del continente, entre ellos Argentina, a través del mecanismo conocido como “Una Franja, una Ruta” (o la Ruta de la Seda) que le permitió asegurarse mayores negocios en la región. La buena sintonía entre el gobierno de Alberto Fernández y el presidente chino no es un dato menor para los japoneses.
Hayashi ya visitó durante esta gira México, Ecuador y Brasil. Arribará el lunes 9 a Buenos Aires y luego su periplo continuará hasta el 15 con un paso por Estados Unidos. En todos los casos Hayashi mostró su propósito de continuar trabajando en la Asociación Estratégica. Es por eso que en el encuentro entre ambas cancillerías se analizará la posibilidad de avanzar juntos hacia una Asociación Estratégica Global, como mantiene con Brasil y México, teniendo presente los valores comunes, la cooperación creciente y el intercambio de visiones en materia de la agenda global.
Antes de emprender el que es su primer viaje oficial en 2023 el ministro de Relaciones Exteriores japonés expresó que eligió América Latina, “dado el potencial político y económico de la región”.
Además, destacó que Japón comparte con México, Ecuador, Brasil y Argentina valores y principios fundamentales como “la libertad, la democracia y el imperio de la ley”, y subrayó que Tokio viene tratando de reforzar con ellos la colaboración en los foros internacionales, además de seguir promoviendo “unas relaciones bilaterales estrechas e históricas”.
El embajador japonés en Buenos Aires desde 2019, Takahiro Nakamae, había reconocido en una entrevista con un medio periodístico argentino a mediados de 2022 que le preocupaba la situación inestable del país en el aspecto económico ya que podría afectar las inversiones de los empresarios de su país. Señaló que más de 30 firmas de ese origen se habían alejado de la Argentina en los últimos años y también que esperan la aprobación por parte del Congreso argentino del acuerdo de promoción de inversiones y del acuerdo de doble imposición tributaria para avanzar en más acuerdos comerciales.
Luego de ver al Presidente y a Cafiero, por la tarde el canciller nipón tendrá una reunión con el ministro de Economía, Sergio Massa. El comercio bilateral de bienes entre los dos países en el período enero-octubre 2022 ascendió a 1.682 millones de dólares con un saldo comercial desfavorable para Argentina de -264 millones (-15% respecto al mismo período del año anterior). Por eso reimpulsar el comercio será una de las premisas de Alberto Fernández y de Massa.
Un año antes se había producido una importante recuperación del comercio bilateral de bienes, que ascendió a USD 1.862 millones, resultando el mayor valor de los últimos seis años y representando un incremento interanual de casi 79%.
Los temas de la agenda bilateral a abordar están relacionados con la cooperación en usos pacíficos de la energía nuclear y cooperación satelital. Hay proyectos en estudio de la empresa INVAP, que se especializa en tecnología y tiene su sede en San Carlos de Bariloche, con Japón, y asimismo reuniones entre las agencias espaciales, y conversaciones iniciales con la empresa ARSAT para explorar el potencial que existe para la cooperación satelital.
Asimismo, promover el comercio mutuo y el desarrollo de proyectos de inversión, especialmente en los sectores del litio, fertilizantes, hidrógeno, biotecnología y el desarrollo de start-ups.
Existen actualmente inversiones japonesas en nuestro país en sectores estratégicos de gran relevancia como el automotriz, la minería, sector energético, sector alimentario y otros. Se negocia la apertura de mercado de carne bovina de todo el país, ampliando a la zona libre de fiebre aftosa con vacunación la habilitación vigente para la Patagonia.
“Con el fin de trabajar juntos para superar los retos mundiales, entre los que se encuentran las crisis alimentaria y energética a las que se enfrenta actualmente la comunidad internacional, durante esta visita mantendremos francos intercambios de puntos de vista con nuestras contrapartes de otros países y haremos un llamamiento a una sólida cooperación”, había anticipado el diplomático antes de partir hacia esta gira.
Cuando le consultaron sobre cómo aspira Japón a mejorar sus relaciones con Latinoamérica en un momento complejo dados los cambios de Gobierno y crisis políticas en varios países de la región, Hayashi señaló el impacto de algunos problemas globales y de otros “estructurales” y apeló a la importancia del multilateralismo para resolverlos.
América Latina “se ha visto duramente golpeada por los efectos de la caída del precio de los recursos naturales desde mediados de la década de 2010, el cambio climático, la pandemia del coronavirus y la invasión rusa de Ucrania, y se enfrenta a problemas políticos y económicos, incluida la resolución de problemas estructurales, como la desigualdad social”, afirmó.
En 2018 el entonces canciller de Japón, Taro Kono, realizó una visita oficial al país y en enero de 2021 lo hizo Toshimitsu Motegui. Hayashi se transformará en el tercer canciller japonés en pisar tierras argentinas en menos de 5 años, una clara muestra del interés de seguir estrechando aún más las relaciones bilaterales entre ambos países en este año donde se cumplen 125 años de amistad.
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