El ministro de Justicia y Seguridad de la ciudad de Buenos Aires, Marcelo D’Alessandro, denunció hoy al diputado del Frente de Todos Rodolfo Tailhade por presunto espionaje ilegal luego que se difundieran chats del funcionario porteño en conversaciones con empresarios y funcionarios de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
D’Alessandro señaló que Tailhade dijo este jueves en una entrevista radial que se iban a conocer nuevas filtraciones del celular del ministro de Seguridad y que lo difundió en sus redes sociales. “Dicha circunstancia llama poderosamente mi atención en cuanto a cómo está persona tuvo a su alcance tales conversaciones antes que cualquier otra”, planteó en la denuncia a la que accedió Infobae.
Y agregó: “Dicho interrogante me llega a construir dos posibles hipótesis en las que el nombrado se encuentra claramente vinculado: Su autoría en la vulneración de mi dispositivo telefónico y su posterior manipulación y/o adulteración de la información allí contenida; o su participación dentro de la organización criminal con el mismo plan delictivo”.
La denuncia fue presentada hoy en los tribunales de Comodoro Py. Como se trata de un día inhábil por el asueto en la administración pública nacional por la víspera del año nuevo la denuncia se sorteará el próximo lunes cuando se conocerá el juez y el fiscal que intervendrán.
Ayer se filtraron chats del celular de D’Alessandro de conversaciones con distintas personas, entre ellas con Silvio Robles, vocero del presidente de la Corte, Horacio Rosatti; con Silvia Majdalani, ex número dos de la AFI, y con Marcelo Violante, titular de Dakota, empresa de acarreo contratada por la Ciudad de Buenos Aires.
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A principio de mes había ocurrido lo mismo con conversaciones con jueces, fiscales, particulares y empresarios con los que el ministro viajó a Lago Escondido, en Bariloche, propiedad del empresario Joe Lewis. En esas charlas hablaban de cómo hacer aparecer que el viaje había sido pagado por ellos y no una invitación. Por eso hecho hay una causa penal en la justicia federal de Bariloche.
En su denuncia, D’Alessandro señala que el 19 de octubre pasado había presentado una primera en la Justicia Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires “con motivo de las abrigadas sospechas que me generaba haber tomado conocimiento que fui víctima de un robo de identidad ante la prestadora de servicios telefonía correspondiente a mi abonado particular con el objeto de duplicar el ´chip´ de mi celular para así poder acceder a mis conversaciones privadas”.
Luego explicó que es víctima de un espionaje ilegal que “seguramente son parte de un plan criminal sistemático dirigido a dañar ante la opinión pública no sólo mi imagen y reputación como Ministro de Seguridad y Justicia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, sino inclusive la de otros Funcionarios y Magistrados, que cumplen sus labores con honestidad y probidad en distintas áreas y poderes del gobierno”, dijo en referencia al viaje que realizó a Lago Escondido junto a un grupo de personas.
“Claramente este plan delictivo está dirigido a instalar en la opinión pública dudas sólo el regular funcionamiento y legitimidad de las instituciones que resultan ser el pilar fundamental sobre el que reposa todo el sistema republicano y democrático de gobierno; coincidentemente a pocos días de haber sido condenada la actual Vicepresidenta de la Nación. Y a su vez, se intenta con ello atacar directamente el orden democrático y el sistema republicano de gobierno”, agregó.
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Luego señaló concretamente lo que entiende que es la responsabilidad del diputado Tailhade. Sostuvo que el legislador publicó en su cuenta de la red social Twitter la página web donde están las conversaciones filtradas. “Con total desparpajo, brindó a la opinión pública la dirección de un sitio web donde poder consultar esas conversaciones, cuyo contenido fueran o no reales, con lo cual, no podía desconocer dada su investidura el origen ilícito de las mismas”, sostuvo.
Agregó que como diputado, Tailhade tiene el “deber, entre otros, de velar por la protección de cualquier violación al orden democrático, en este caso en concreto, debió haber denunciado ni bien tomó conocimiento de los hechos ya descriptos”. “Empero, decidió hacerse eco de dichas falacias mediatizándolas en distintos medios que responden al gobierno actual, siendo por ello que llama mi atención cómo pudo haber obtenido dichas filtraciones antes de que tal escenario haya tomado estado público”, sostuvo. También añadió que " parte de distintas comisiones dentro de la Cámara en la que cumple funciones, como ser: Justicia, Juicio Político, Bicameral Permanente de Control del Ministerio Público de la Nación (Ley 24.946), Legislación penal y, lo más irónico, es vocal de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia”.
El funcionario de Horacio Rodríguez Larreta sugirió al juez que le toque la causa una serie de medidas de prueba par avanzar en la investigación.
Por su parte, y enterado de que sería denunciado por D’Alessandro, el diputado oficialista publicó una serie de mensajes en sus redes sociales. Según Tailhade, el entorno del ministro porteño “ya sabía de los chats” porque hubo respuestas a “consultas periodísticas desde la noche del 28, antes de que ningún medio los publicara” (en referencia al contenido de los chats”.
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