En medio del festejo colectivo por el triunfo de la selección argentina en la Copa del Mundo de Qatar 2022, el Frente de Todos convocó este lunes a una sesión especial para las 13. Si bien el oficialismo busca dejar atrás el último debate que terminó en escándalo —con gritos, agresiones e insultos—, los temas elegidos siguen dejando en evidencia las dificultades para encontrar consensos con la oposición.
Durante la sesión, que podría terminar a la madrugada, se tratarán el nuevo plan de pagos de deudas previsionales (la actual moratoria vence a fin de años), la creación de nueve universidades nacionales en diferentes provincias del país y varios acuerdos internacionales.
Tras el anuncio, desde Juntos por el Cambio y el Interbloque Federal aclararon que no bajarán al recinto dado que el temario —aseguran— no refleja un intento genuino de volver a tender puentes con la oposición. Entre los proyectos que reclamaban se destacan el de Alquileres y el que exime de Ganancias a las Pymes que reinviertan utilidades en bienes de capital.
No obstante, la creación de nuevas universidades volverá a generar tensiones dentro de la coalición opositora. Se trata de las Universidades del Delta, que comprenderá a los partidos de Tigre, Escobar y San Fernando; de Saladillo, de Pilar, de la Cuenca del Salado; y de Ezeiza que estarán ubicadas en la provincia de Buenos Aires. También se crearán las Universidades de Madres de Plaza de Mayo, en la ciudad de Buenos Aires; de Río Tercero, en Córdoba; y en Entre Ríos, la Universidad Juan Laurentino Ortiz, con sede en la ciudad de Paraná.
Según pudo saber Infobae, parte de Evolución Radical podría aportar para llegar al quórum de 129 diputados. Tal como ocurrió en la última sesión, el pasado 1 de diciembre, donde estaba previsto tratar estos mismos proyectos educativos.
El espacio conducido por Rodrigo de Loredo y referenciado en Martín Lousteau ya había despertado críticas de los sectores “halcones” por haber acompañado el dictamen del oficialismo y por haber habilitado la última sesión, en medio de la disputa por los nombramientos de los representantes para el Consejo de la Magistratura.
“El Frente de Todos ha solicitado una sesión especial. Entendemos que es el oficialismo quien debe garantizar el quórum para sesionar”, dijo a Infobae el presidente del Interbloque Federal, Alejandro “Topo” Rodríguez, poniendo en duda que el Frente de Todos llegue a los 129 presentes.
El feriado de ayer también impidió que se reúnan varias comisiones por lo que no se pudo avanzar con los dictámenes de otros proyectos como la demorada ley de agroindustrias, la de lavado de activos y el nuevo blanqueo impulsado por el ministro de Economía, Sergio Massa. No habían sido incluídos en el temario de hoy, pero tampoco habrá chances de intentar una sesión en la última semana del año.
El proyecto de plan de pago de deudas previsionales es una prioridad para el kirchnerismo, que hizo de las moratorias para jubilados una de sus políticas insignia. El proyecto, que ya tiene media sanción del Senado, consta de dos partes. Por un lado, un plan de pago similar a los que se implementaron en 2004 y 2014 que permite que los hombres de 65 años y las mujeres de 60 que no tengan todos los aportes puedan regularizar los períodos faltantes en hasta 120 cuotas que serán descontadas de manera directa del haber jubilatorio que obtenga.
Por otro lado, también se permitirá que los trabajadores que estén en actividad y no lleguen a completar los 30 años de aportes por estar cerca de la edad jubilatoria puedan anticipar y empezar a pagar los períodos faltantes hasta el 31 de marzo de 2012. Estas personas podrán pagar unidades de cancelación de aportes, que son equivalentes a un mes de servicios y tendrán un valor fijo del 29% de la base mínima imponible de remuneración, en coincidencia con lo que pagan los trabajadores en actividad cuando se realizan sus aportes en tiempo y forma.
Hasta el momento no hay confirmación sobre un eventual llamado a sesiones extraordinarias para febrero. Si bien este es el objetivo del ministro de Economía, Sergio Massa, que impulsa los proyectos de lavado de activos y un nuevo blanqueo, en la Casa Rosada todavía dudan, dado el antecedente del año pasado, cuando no se debatió ninguno de la decena de proyectos que envió el Ejecutivo.
Seguir leyendo: