El gobierno porteño espera un fallo favorable del fuero Contencioso Administrativo para que la Policía de la Ciudad de Buenos Aires comience a utilizar las Taser que compró en Brasil y se encuentran retenidas sin poder ingresar a la Argentina por una decisión política del gobierno nacional.
La administración de Horacio Rodríguez Larreta había tramitado en 2020 una autorización de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (Anmac) para comprar 60 pistolas. Ramiro Urristi, el funcionario que firmó la habilitación, fue eyectado del cargo a los pocos días de haber consentido el acto administrativo y la nueva conducción del organismo que depende del ministro de Justicia Martín Soria nunca permitió el ingreso del cargamento al país. La Ciudad pretende destrabar la cuestión con un amparo presentado a mediados de octubre.
El ministro de Seguridad y Justicia Marcelo D’Alessandro participó esta semana del Congreso Mundial de Ciudades Inteligentes realizado en Barcelona y anticipó durante una entrevista con Infobae que empezaron a trabajar en el diseño de las nuevas brigadas Taser.
El proyecto prevé que se desplegarán dos móviles por comuna con oficiales entrenados especialmente para utilizar este tipo de armas. Tendrán como misión principal intervenir en hechos violentos causados por personas que se encuentran fuera de sí, ya sea como consecuencia de alguna alteración mental o una crisis nerviosa de díficil contención. Las otras 30 pistolas se destinarán a efectivos apostados en los subtes y en espacios de concurrencia masiva donde sería imposible intervenir con un arma de fuego.
– ¿En qué estado se encuentra la compra de pistolas Taser para la Ciudad de Buenos Aires?
– Nosotros tenemos un organismo que es la Anmac. Cuando vos querés comprar armamento, les tenés que girar un permiso para que ellos te habiliten. El funcionario que a nosotros nos autorizó la compra de las Taser fue echado a la semana por haber firmado. Nosotros ya hicimos el proceso licitatorio y cuando quisimos entrar las pistolas al país, la Anmac no lo autorizó. Llevamos más de un año intentando ingresar estas armas de baja letalidad que se usan en 190 países. Las quieren comparar con una picana y en realidad lo que hacen es salvar vidas.
– ¿En qué situaciones tiene previsto que sean utilizadas?
– Tenemos ejemplos: frente a alguien que está con alteraciones mentales, con un cuchillo, hoy el policía sólo puede usar su cuerpo o un arma de fuego. Teniendo este tipo de herramientas, el policía va a lograr controlar la amenaza y salvarle la vida a esta persona con alteraciones mentales. También vamos a proteger a quien nos cuida, que es algo fundamental. Hay otras situaciones donde no hay punto de discusión: si en un subte hay una situación específica, un policía no puede sacar el arma y empezar a los tiros.
– ¿De qué funcionario depende que se destrabe el ingreso de las Taser?
– De la titular de la Anmac, que depende del Ministerio de Justicia.
–¿Si el ministro Martín Soria tiene la voluntad y firma la autorización en cuánto tiempo llegan las pistolas a la Ciudad de Buenos Aires?
– En dos horas. Simplemente tiene que firmar un papel y nosotros pedirle al proveedor que las ingrese
– Ahora se habilitó una instancia judicial.
– Lo que hicimos ante el silencio de la Anmac fue ir a la Justicia para dirimir una cuestión política de un capricho del gobierno nacional. Tenemos un amparo por mora que debería resolverse en breve.
–¿Y cómo se van a distribuir esas pistolas si finalmente se destraba la cuestión?
– La Ciudad está dividida políticamente en comunas. Vamos a distribuir estas pistolas en brigadas Taser que van a estar patrullando y ante cualquier llamado al 911 de alguna situación de alguien con alteraciones mentales o bajo efectos de la droga, van a ir estas brigadas. También van a estar en el subte, en eventos masivos y en todos los lugares donde un arma de fuego pueda poner en riesgo la vida de terceros.
– ¿Y a ese oficial qué capacitación se le va a brindar?
– Los instructores ya viajaron a Brasil, ell país donde nosotros compramos estas pistolas. Se entrenaron, se capacitaron y antes del uso se va armar un protocolo y se va a capacitar a quienes las utilicen.
Seguí leyendo: