Quien fuera presidente argentino entre 1958 y 1962 y derrocado por los militares había nacido en Paso de los Libres, Corrientes, el 28 de octubre de 1908. Al acto realizado este viernes en el Cementerio de Olivos asistieron Gustavo Grobocopatel, Elva Roulet, Ricardo Yofre, Carlos Corach, Emilio Perina y Enio Vittorini, secretario de Gobierno de la Municipalidad de Vicente López. De hecho, fue un desagravio ante el intento de la municipalidad de Concepción del Uruguay, Entre Ríos, de querer llevarse los restos mortales de Frondizi y su familia.
Con motivo de los 114 años de su nacimiento se realizó este viernes en el Cementerio de Olivos, Ciudad de Vicente López, un homenaje al presidente Arturo Frondizi cuyos restos descansan desde su fallecimiento en 1995 junto a los de sus padres, su esposa Elena Faggionato y su hija Elenita. Alrededor de setenta personas se concentraron en el estrecho pasillo de acceso al lugar entre los que se destacaron el ex ministro menemista Carlos Corach, la exvicegobernadora de la provincia de Buenos Aires, Elva Roulet, el empresario agropecuario Gustavo Grobocopatel, los almirantes Diego Leivas y Juan Carlos Neves, Emilio Perina y el periodista Julio Lagos.
Representando a la intendente de Vicente López, Soledad Martínez, se hizo presente su secretario de Gobierno, Enio Vittorini; y también asistieron los concejales Susana Orue y Oscar Ponce, el exconcejal Javier Varani, y el ex-Defensor del Pueblo de Vicente López y titular de la Asociación Amigos del Museo y Archivo Documental de Vicente López, Carlos Constenla.
El aniversario se convirtió de hecho en un acto de desagravio por el intento de la intendencia de la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay de llevarse los restos mortales de Frondizi, su esposa y su única hija para ser ubicados en la Basílica Inmaculada Concepción.
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El doctor Román Frondizi, sobrino y colaborador del presidente y exconjuez de la Corte Suprema de Justicia, fue el orador principal y preguntó a la concurrencia: “¿En que otro lugar donde están sus afectos más profundos hubiera querido reposar Arturo Frondizi que no sea este cementerio”.
Luego se refirió a la personalidad de su tío: “Tuvo una vocación inclaudicable en defensa de los principios de justicia y libertad sostenidos en la práctica durante toda su existencia. En el discurso inaugural de la Asamblea Legislativa el 1° de marzo de 1958, Frondizi puso su gobierno bajo una idea moral, la idea del reencuentro entre los argentinos y que ese encuentro se sustentara en una política de desarrollo nacional que le diera permanencia. Llamó a eliminar los motivos de encono y revancha, y a extirpar de raíz el odio y el miedo del corazón de los argentinos. Es hora de recuperar la vigencia de los valores morales y trabajar para detener la decadencia y salir del laberinto en el que está metida la Argentina. Arturo Frondizi soñó con una república democrática, una nación desarrollada y moderna y sobre todo con la unidad nacional sobre la base del reencuentro de los argentinos. Trabajó y luchó por ello, pero su sueño está incumplido. Renovemos la convocatoria porque todos debemos ser obreros de esta empresa superior. Mantengamos encendida la antorcha que encendió Arturo Frondizi.”
Para este evento se constituyó una Comisión de Homenaje integrada por más de 60 personalidades y la misma tendrá un carácter de permanente. Está constituida por la mayoría de los integrantes de las familias Frondizi y Faggionato, y además por los embajadores Félix Borgonovo, José Octavio Bordón, Raúl Estrada Oyuela y Arnoldo Listre; y la historiadora y biógrafa Emilia Menotti. Entre otras se recibieron adhesiones de los diputados nacionales Pablo Tonelli y Rogelio Frigerio; y del Almirante Alvarez González Lonzieme, sobreviviente del crucero General Belgrano y exsubjefe del Estado Mayor general de la Armada.
Una semblanza sobre como era Arturo Frondizi en la vida familiar hizo su sobrina Elena Faggionato quien convivió con el presidente los cuatro años que vivió en la Quinta Presidencial de Olivos. “Arturo no hizo modificaciones de ningún tipo en la Quita -comentó-. Era metódico, se iba temprano a la Casa de Gobierno y cuando regresaba lo esperábamos en la puerta principal y nos daba un beso en la frente. Le gustaba caminar y pensar por los jardines. Un día, regresando a la Quinta, quiso manejar el auto y cambió el lugar con el chofer. Yendo por la avenida Del Libertador había unos muchachos haciendo dedo. Arturo paró el auto y les preguntó hacia donde iban y les dijo que los acercaba. Como hacía mucho calor los invitó a tomar algo en la Quinta diciendo que era amigo del presidente. Los muchachos no salían de su sorpresa al ver que todos le hacían la venia como reverencia”.
También habló sobre la figura del presidente Norma Cadoppi Frigerio, sobrina de Rogelio Frigerio, histórico colaborador y amigo de Frondizi. Hizo referencia a su visión de futuro y su especial interés por la ciencia y la tecnología destacando la amistad conseguida con el Premio Nobel de Medicina, Bernardo Houssay. “Hoy es necesario que tengamos la valentía de hacer una autocrítica que incorpore fe desarrollista, racionalidad de pensamiento y el coraje para explicarnos la razón por la que se detuvo este proceso que nos hubiera conducido a ser una de las grandes naciones y no sufrir la pobreza estructural que nos conduzco a este subdesarrollo económico y social que aún no hemos logrado superar”.
Y una detalla descripción sobre la vida política y su gobierno fue realizada por el dirigente radical de Entre Ríos, Roberto Rodríguez Vagaría. “El acento industrialista de la UCRI modificó definitivamente la programática de la Unión Cívica Radical. Si en dos oportunidades los radicales sentimos que otro radical ya lo había pensado antes fue cuando nos tocó actuar primero en la Hora del Pueblo en noviembre de 1970 y once años después en la Multipartidaria Nacional de 1981. En ambos casos fue obvio que más que una presión a la dictadura militar era contribuir a que el Justicialismo reingresara en un camino de convivencia democrática en la que mucho antes habían meditado Frondizi y sus equipos. Esto fue parte de conversaciones muy discretas con Alfonsín y De la Rúa antes de que fueran presidente, quienes consideraban que Arturo Frondizi fue también un presidente radical con pensamiento y vuelo propio. Un gran presidente radical”.
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