Anteponiendo el objetivo de cuidar la ecología, el medioambiente y la mano de obra local, el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, volvió a pronunciarse con un fuerte reclamo hacia el Gobierno nacional: elevar al 20% el corte en el bioetanol y el biodiesel utilizado en la elaboración del combustible. El pedido del mandatario busca incentivar la producción de los cultivos que sirven de base para la elaboración de estos productos, y son fundamentales para las economías de numerosas provincias en el país..
Las palabras del mandatario cordobés se dieron en el marco de la inauguración del ‘1° Congreso Internacional de Maíz’ en el Centro de Convenciones de la ciudad de Córdoba. Allí reiteró que tanto su provincia como Entre Ríos y Santa Fe (bloque de la Región Centro) vienen sosteniendo este pedido.
Actualmente, la ley solo permite que las naftas contengan un 12% de bioetanol, cuando, según el gobernador, este porcentaje podría subir progresivamente. En ese sentido, Schiaretti se refirió a la movilidad en Argentina: “Ya se usa en naftas un porcentaje del maíz de Córdoba, que por ahora es el 12% pero es factible de incrementar el corte. La legislación provincial va en ese camino - indicó- porque “influye en un mejor ambiente y en mano de obra local en las plantas que transforman el maíz en etanol”.
Para Schiaretti esto traería un beneficio inmenso para la provincia ya que no solo hay productores agropecuarios, sino que también quienes transforman la materia en bioetanol con grandes empresas y fábricas.
“Córdoba es responsable del 40% de la producción de maíz y del 40% de la producción de bioetanol. También habría que eliminar gradualmente las retenciones agropecuarias”, afirmó el mandatario.
En ese mismo marco, Schiaretti habló de la proyección futura que tiene el país en esta materia: “Argentina tiene una producción de 50 millones de toneladas de maíz y es el cuarto productor mundial y el segundo en exportación global de ese producto. La Región Centro produce 30 millones de maíz, de los cuales Córdoba aporta 20 millones de toneladas, por lo tanto la convierte en la primera productora nacional”.
Por último, también resaltó el incremento de producción que tuvo su provincia en los últimos años: “Hace dos décadas producíamos 5 millones de toneladas al año, hace una década producíamos 10 millones, y hoy producimos 20 millones. Eso es un avance en productividad que se debe fundamentalmente a la actitud de nuestros productores”.
Al comparar esas cifras con el escenario internacional, el gobernador cordobés manifestó que Estados Unidos produce 400 millones de toneladas y transforma más del 80%; Brasil produce 100 millones de toneladas y transforma el 60% y Argentina 50 millones de toneladas de las que transforma el 25%.
Meses atrás, desde Maizar, una cadena de valor granaria, afirmaron que incluso el corte se podría ir progresivamente a un 27%, y hasta a uno de 85% con unos pequeños ajustes en los motores, algo en lo que la provincia de Córdoba está dando el puntapié inicial. “Este combustible además tiene una huella ambiental tan baja que nos lo compra el exigente mercado de la Unión Europea”, se explicó desde esta cadena.
Según la empresa cambió su matriz productiva: “La Argentina dejó de ser un productor autosuficiente de combustibles fósiles, y destina miles de millones de dólares, que no le sobran, para importarlos. A la vez, desde que en 2006 se promulgó la Ley de Biocombustibles 26093, la cadena bioagroindustrial que solemos denominar “el campo” puso en marcha grandes inversiones y comenzó a producir biodiésel de soja, que se mezcla con el gasoil, y bioetanol de maíz y de caña de azúcar.
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