Alberto Fernández se reunió esta tarde con el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, para conocer los detalles del operativo de desalojo a los grupos mapuches instalados en Villa Mascardi, Bariloche, que realizó el último martes un comando de operaciones integrado por las cuatro fuerzas de seguridad federal.
En un encuentro que duró cerca de una hora, ambos analizaron los pormenores del plan de acción, la violenta reacción de los mapuches en la jornada de hoy y la tarea que siguen realizando los efectivos de la Policía Federal, la Gendarmería, la Prefectura Naval y la Policía de Seguridad Aeroportuaria que están en la zona.
Más temprano, cerca de las 16, Aníbal Fernández se reunió en el ministerio de Seguridad con los jefes de las cuatro fuerzas federales, con los que también evalúo el estado de situación. En ese encuentro se terminó de resolver que los 250 efectivos que participaron del operativo en Villa Mascardi sigan allí en los próximos días. Aún no hay un tiempo determinado de permanencia.
“Los efectivos van a seguir en Villa Mascardi para custodiar las viviendas y terrenos que fueron desalojados, y para mantener el rastrillaje que se está realizando en la zona, en búsqueda de algunas personas que tienen pedido de captura”, indicaron desde el ministerio de Seguridad.
Según trascendió, son cerca de 14 personas que forman parte de la agrupación que tomó las casas en Villa Mascardi las que tienen orden de detención por delitos prexistentes a la toma de terrenos. Ese grupo está siendo buscado por las fuerzas federales.
Hasta el momento hubo siete detenciones. Todas son mujeres y ninguna se quiso identificar. “Yo no soy nadie, soy mapuche”, respondieron ante la pregunta de las fuerzas de seguridad. Sus parejas huyeron de las casas tomadas antes de que se concretara el operativo.
Fuentes de Seguridad aclararon que las personas con pedido de captura que se están buscando ahora, no se encontraban en las casas en el momento que avanzaron los efectivos de las cuatro fuerzas. Es decir, no se escaparon durante la mañana del lunes. No estaban en la zona en el momento en que ingresó el comando.
En la Casa Rosada están conformes con el operativo realizado porque no hubo heridos y se cumplió con el objetivo de desalojo. Uno de los pedidos del ministro Fernández había sido que nadie salga lastimado: ni las fuerzas de seguridad, ni los mapuches. Avanzar sobre el territorio pero con la suficiente precaución para evitar que haya heridos.
Respecto a los ataques que se produjeron durante la madruga de ayer en una capilla de Villa La Angostura, en la cartera de Seguridad consideraron que son “grupos minoritarios”, pero destacaron que “hay que estar en alerta” frente a los actos vandálicos en otras zonas de la provincia de Río Negro.
Tanto en el ministerio de Seguridad como en la Casa Rosada advierten que el conflicto no se terminó con el desalojo y que el avance de las fuerzas federales lo que hizo fue cumplir con una orden judicial. Es un capítulo de la historia que no se terminó esta semana.
Aún no se sabe por cuánto tiempo se quedarán los efectivos de las fuerzas federales y hasta que momento durará el operativo en Villa Mascardi. El Presidente sigue de cerca lo que sucede, en contacto permanente con Fernández, porque tiene en claro que es un conflicto que puede tomar volumen en poco tiempo.
El gobierno rionegrino, que conduce Arabela Carreras, le pidió al gobierno nacional que continúen en el territorio y apliquen medidas preventivas para evitar que los grupos mapuches vuelvan a invadir las casas y los terrenos. Pretenden que la tensión no vuelva a escalar y que el desalojo sea el principio de una solución que sea sostenida en el tiempo.
“Vamos a solicitar al Ministerio de Seguridad de la Nación continuar trabajando con todo lo que tenga que ver con las medidas preventivas con respecto a este tema”, sostuvo la ministra de Seguridad y Justicia, Betiana Minor, que es el nexo político de la gobernación con el comando unificado de las cuatro fuerzas.
La gobernadora Arabela Carreras ha preferido no hacer declaraciones sobre el operativo. a Carreras, y también desde los Ministerios de Seguridad de Nación y Provincia, que esta situación no guarda relación con las comunidades origisnarias, sino que tiene que ver con una usurpación en el marco de un delito que debía cesar”, explicó la funcionaria.
La gobernadora Arabela Carrera ha preferido no hacer declaraciones sobre el operativo. Se mantiene retirada del foco de atención y atenta a lo que sucede en la zona del conflicto. “Estamos dejando todo en manos de Nación. No tuvimos participación en el operativo. Colaboramos en lo que nos piden”, indicaron desde el gobierno de Río Negro a Infobae.
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