La segunda jornada de actividades especiales organizadas por la CAF (Banco de Desarrollo de América Latina) se desarrolla este martes en la ciudad de Manhattan, en Nueva York, en el marco de la 77 Asamblea General de las Naciones Unidas. En esta oportunidad, las temáticas están orientadas a la inclusión a través de deporte, la problemática de la juventud y la innovación en educación, con la presentación los expresidentes de Colombia, Juan Manuel Santos; del Gobierno de España y miembro del Club de Madrid, José María Aznar; y de Panamá, Martín Torrijos, entre otros.
Ayer, durante el evento “Muchas voces, una sola región: América Latina y el Caribe trabajando juntos en la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible”, referentes políticos y del ámbito privado advirtieron sobre grieta, violencia política y el avance del narcotráfico organizado América Latina y el Caribe y, además, se pusieron a disposición para avanzar en soluciones a problemas globales como el cambio climático, la desigualdad, la pobreza y el crecimiento económico.
“Uno de los problemas más serios que tiene América Latina es la polarización, es algo que le impide a la democracia resolver el problema de la gente”. El diagnóstico lo aportó Santos, pero la misma preocupación, aunque con matices, plantearon el presidente Alberto Fernández, los también premios nobeles de la Paz Rigoberta Menchú y Adolfo Pérez Esquivel, y otros referentes latinoamericanos.
El mandatario argentino, con una apretada agenda de actividades y luego de reunirse con la directora del FMI, volvió a reclamar el cese de los bloqueos a países como Cuba y Venezuela (algo que ya había planteado a mediados del mes pasado en ocasión de una reunión de la CELAC) y afirmó que la región ya sufrió “los costos de trabajar desunida”. Sin nombrarlo, se trató de otra crítica a la gestión presidencial de Mauricio Macri, en este caso a su política exterior.
“(Se trató) de un tiempo en el que se le puso final a ONASUR; el tiempo en que se puso en crisis el MERCOSUR; el tiempo en que florecieron otros grupos, como el Grupo del LIMA, el PROSUR, diferentes intentos, que no eran esencialmente latinoamericanos y que realmente solo generaron dispersión en América Latina”, cuestionó. Y destacó la necesidad de “seguir pregonando la paz, para que el mundo entienda que no se soportan más guerras; tenemos que involucrarnos en la búsqueda de la paz allí en el norte: porque en el norte vuelan los misiles, pero el hambre se siente en el sur”.
Santos, por su lado, además de condenar la división y la polarización, planteó como preocupación que atenta contra el desarrollo de América Latina el avance del narcotráfico organizado. “El incrementos del poder de las mafias del narcotráfico está haciendo estragos, desde México hasta Argentina, esto se va a seguir agravando mientras no cambiemos el enfoque en esta guerra contra la droga”. En este sentido, planteó que si se sigue “con un enfoque punitivo”, la situación se agravará e instó a un tratamiento de la problemática “más humano y más efectivo”.
Durante su intervención, Rigoberta Menchú, líder indígena y activista guatemalteca, planteó una mirada más positiva, aunque reconoció que América Latina “es un continente lleno de desafíos, humanos, económicos, sociales y político”. Además, sostuvo que las democracias “tienen muchos que avanzar en la inclusión y participación de los ciudadanos”.
Pérez Esquivel, en tanto, señaló que “la paz no se regala, se construye, y no es el trabajo de una persona, sino compartido por miles de personas en toda la región”. Además, cuestionó que se quiera imponer el pensamiento único a los ciudadanos, algo como calificó como el “monocultivo de las mentes”, y abogó por construir “la diversidad para la convivencia en paz”. “Este continente vive entre la angustia y la esperanza, no somos pobres, pero somos pueblos empobrecidos por la explotación económica, y la dominación a la que someten a nuestro pueblo”, indicó.
El concepto de polarización también lo planteó el presidente ejecutivo de la CAF, Sergio Díaz-Granados. “La grieta está en todos lados, y trasciende lo generacional, lo ideológico y lo político”, advirtió en su discurso de introducción a la primera mesa debate en Nueva York, dedicada a los desafíos de los liderazgo.
La CAF conmemora 10 años de su ingreso a las Naciones Unidas como observador permanente, en el que ha suscrito al menos 40 instrumentos (acuerdos, convenios y cartas de cooperación) con más de 20 entidades, orientados a enfrentar de manera conjunta y articulada problemáticas relacionadas a la agricultura, finanzas, educación, empleo, salud, género, gobernabilidad, medio ambiente, entre otros.
Durante el día de hoy disertarán el presidente de Guyana, Irfaan Ali; de líderes del sector privado y la sociedad civil como Qu Dongyu, director general de la FAO; Achim Steiner, Administrador Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD); y Luis Felipe López-Calva, director regional para América Latina y el Caribe del PNUD. También, de Kate Behncken, vicepresidenta de Filantropía de Microsoft; Jeffrey Sachs, director del Centro para el Desarollo Sostenible de la Universidad de Columbia; Darren Ware, vicepresidente senior de Relaciones con Gobierno de Mastercard; Alejandro Werner, director del Instituto de las Américas, Georgetown; los expresidentes de España y Panamá, José María Aznar y Martín Torrijos; Dan Restrepo, ex director para Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo Seguridad Nacional de Estados Unidos, entre otros.
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