En la carrera hacia el 2023, los candidatos presidenciales de la UCR comenzaron a dar señales y guiños de posibles alianzas y fórmulas con un objetivo claro: diferenciarse, no sólo del PRO, sino también entre ellos. Tanto Gerardo Morales como Alfredo Cornejo y Facundo Manes son los tres referentes del partido centenario que trabajan en la construcción de sus campañas electorales para lograr imponerse en la coalición de Juntos por el Cambio. Si bien en sus entornos hablan de una “competencia colaborativa”, en las últimas semanas cada uno tomó diferentes posturas en los temas coyunturales, como por ejemplo, el pedido de juicio político a Alberto Fernández, la polémica por la suspensión de las PASO y la estrategia para ampliar la coalición opositora.
El senador Cornejo es uno de los que más levantó el perfil. Este viernes compartió un acto en San Juan con Patricia Bullrich y publicaron una foto juntos con señales de posible fórmula. Desde el entorno del mendocino le bajaron el tono a las especulaciones electorales. Sin embargo, en diálogo con Infobae, reconocieron que ambos se sienten “cómodos trabajando”, en especial, porque tiene una idea en común: “Que la narrativa de Juntos por el Cambio sea lo más contundente posible, antipopulista y antikirchnerista”.
Cornejo suele reiterar insistentemente a los suyos que no es momento para lanzar candidaturas debido a la crisis económica y social que vive el país. Cree que hay que mostrar propuestas y “contribuir a un programa de gobierno” para estar preparados en caso de lograr la victoria en las próximas elecciones del 2023. En ese sentido es que acompañó a Manes las semana pasada a un acto que realizó en La Plata.
Enfrentado con Horacio Rodríguez Larreta, el neurólogo - que se sumó a la competencia política en las legislativas del 2021- es el candidato que mayor apoyo recibe de aquellos radicales que buscan independizarse del PRO, dolidos por el rol que ocuparon durante la gestión de Cambiemos con Mauricio Macri presidente. De hecho, fue apuntado por “halcones” por ser el único diputado de la coalición opositora que no firmó el pedido político a Alberto Fernández por haber hecho un paralelismo entre el fiscal Diego Luciani y Alberto Nisman, en medio de la causa de Vialidad. “Quiere diferenciarse”, protestaron en el bloque de la UCR de la Cámara baja.
Manes milita la ampliación de Juntos por el Cambio y, en esa línea, es que se coquetea con una alianza con Juan Schiaretti. En su entorno reconocen que ambos comparten el deseo de “construir una nueva mayoría”, un “espacio multipartidario” que sirva para cambiar la lógica Cristina-Macri. De hecho, consideran al gobernador cordobés como un “personaje clave” para el armado electoral del año que viene y aseguran que ambos mantienen un diálogo fluido y sin intermediarios. “Hay respecto mutuo y coincidencias sobre lo que hay que hacer en la Argentina que viene”, reconoce el diputado con sus allegados.
Pero el resto de los boinas blancas, sobre todo los referentes más históricos, descreen que Schiaretti efectivamente tenga intenciones de competir o construir una fuerza a nivel nacional por sus reiterados amagues en los últimos años. “Hay que ampliar Juntos por el Cambio desde adentro, por afuera nada. Los que se quieran sumar que lo manifiesten públicamente, no hay que cometer errores como sucedió con Javier Milei”, le advierten algunos radicales a Manes.
Mientras Manes toma distancia (en cada oportunidad que se presenta) de Rodríguez Larreta y Cornejo se acerca a Bullrich, Gerardo Morales dispara contra Mauricio Macri. Con el ex presidente se enfrentaron por la renegociación de la deuda con el FMI que llevó adelante el Frente de Todos, por sus dichos sobre Hipólito Yrigoyen y el populismo y ahora por la posibilidad de la suspensión de las PASO en Chubut. “Le dije a Mauricio ‘antes de salir por Twitter habla conmigo que soy el presidente del partido’ y donde yo tenga que ordenar, ordeno, como hago yo con Patricia (Bullrich) que es presidenta del PRO”, protestó públicamente el gobernador de Jujuy.
Si bien un sector del radicalismo consideró, en diálogo con Infobae, que sus denuncias conta el ex mandatario contribuyen a la “desunión” de Juntos por el Cambio, una gran parte de los militantes y dirigentes le reconocen a Morales su buena gestión al frente de la UCR. Según analizan, desde que el jujeño le ganó la elección a Martín Lousteau el partido recuperó “escena política” y “musculatura”.
A principios de julio, Morales desembarcó en el territorio bonaerense con su campaña “Mística”. Desde entonces, visita los Comités de todas las localidades - algunas de ellas no recibían a un presidente del partido hace más de 20 años, como el caso de Vicente López- y se muestra con los dirigentes que buscan pelear las candidaturas locales, como fue el caso de Gustavo Posse el pasado jueves, quien busca suceder a Axel Kicillof. Tanto en público como en privado mantiene la cordialidad con sus correligionarios que también quieren ser candidatos a la Casa Rosada, pero en cada acto oficial habla de su mayor capita político: su gestión en Jujuy.
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