Tras la fallida convocatoria del oficialismo a la oposición para participar de una misa luego del intento de asesinato a Cristina Kirchner, el ministro de Desarrollo de la Comunidad de la provincia de Buenos Aires, Andrés “Cuervo” Larroque, apoyó la idea de que haya una conversación entre la vicepresidenta y el ex mandatario nacional Mauricio Macri, pero “siempre y cuando sea sincera y no una cuestión superficial”.
“Yo creo que eso es imprescindible, siempre partiendo de la base de que el primer diálogo de cualquier dirigencia se tiene que dar con sus representados. Y creo que cumpliendo esa parte del contrato social, obviamente, también es importante que lo hagan todos los sectores del espectro político y aquellos que lo trascienden”, explicó.
Durante una entrevista que brindó a Radio Con Vos, el funcionario bonaerense y uno de los máximos referentes de La Cámpora, remarcó que “cuando se llega a una situación de la magnitud de lo ocurrido con Cristina, todo se tiene que subordinar a poder recuperar algún cauce de normalidad, y no es bueno relativizar, minimizar o tratar de cambiar el sentido de lo que ocurrió”.
“Yo creo que es importante que podamos generar los ámbitos, los espacios y los mecanismos, siempre y cuando, por supuesto, el diálogo sea sincero y no una cuestión superficial, o que sea para buscar una foto o tranquilizar conciencias y que todo siga como venía hasta ahora”, aclaró.
Al respecto, el “Cuervo” remarcó que, “más allá de los nombres propios”, es “muy necesario ponderar” que el ataque a la vicepresidenta “ha traspasado un límite” y destacó que, si bien “la democracia, naturalmente, alberga tensiones y disputas”, las mismas “deben ser resueltas en su seno y a través de los mecanismos establecidos por la Constitución”.
“Creo que, en el escenario que abordamos a partir del 1° de septiembre (cuando se produjo el intento de asesinato de la ex jefa de Estado), le tenemos que poner un freno a la locura, al proceso de estigmatización y hostigamiento permanente, sobre todo a la figura de Cristina. Porque también es importante destacar que no es para todos por igual y que, en todo caso, hay una desproporción inmensa entre las capacidades de direccionar o construir sentido respecto de una fuerza política”, agregó.
Tras defender las gestiones de Néstor y Cristina Kirchner, Larroque sostuvo que el oficialismo y la oposición deberían “discutir cosas reales, tangibles, no hacer una cuestión para la tribuna, sino poder abordar el tiempo que viene con certezas imprescindibles, como respetar el sistema democrático”.
Luego del ataque a la vicepresidenta, el Frente de Todos convocó al resto de los espacios políticos a “abordar el tema de la intolerancia política” y tratar de “reencauzar la convivencia democrática”. El sábado pasado, se celebró en la Basílica de Luján una misa “por la Paz y la Fraternidad de los argentinos” que no contó con la presencia de ninguno de los principales referentes de Juntos por el Cambio.
De hecho, ese acto fue muy cuestionado por el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, una de las principales figuras de la oposición. “Tomó un tono partidario y ahora es la propia Iglesia la que está cuestionándolo, veía que un obispo pedía disculpas, haber politizado una misa es un extremo”, aseguró el mandatario porteño a la radio cordobesa Cadena 3.
SEGUIR LEYENDO: