A las 18, en la histórica sede de la calle Matheu, el Consejo Nacional del Partido Justicialista se reunirá para articular acciones a favor de la vicepresidenta, Cristina Kirchner, en todo el país y discutir si, finalmente, se realiza una marcha masiva en su apoyo, tal como empuja el kirchnerismo desde hace algunos días.
La convocatoria se resolvió el jueves pasado cuando un puñado de dirigentes, que son autoridades del PJ, junto al presidente del partido y de la Nación, Alberto Fernández, decidieron ponerle fecha al encuentro, donde también se definirá la fecha en la que se realizará el Congreso Nacional.
El Presidente volará mañana a la mañana a Bariloche, donde inaugurará, junto al ministro de Ciencia y Tecnología, Daniel Filmus, el Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (INIBIOMA), de bipertenencia entre el CONICET y la Universidad del Comahue.
Por ese motivo no estará presente en el encuentro partidario. Sí estarán la mayoría de los consejeros del PJ, entre los que se encuentran Santiago Cafiero, Eduardo “Wado” de Pedro, Héctor Daer, Axel Kicillof, Agustín Rossi, Verónica Magario, Cristina Álvarez Rodríguez y Juan Manzur, entre otros.
En el encuentro también estarán presentes los presidentes de los partidos que integran el Frente de Todos. Es decir, que no será una reunión solo del Partido Justicialista, sino de otros sectores que conforman la coalición y que serán parte de las definiciones que marquen el pulso del peronismo en los próximos días.
La idea de amplitud condice con el mensaje que brindó la semana pasada Alberto Fernández, cuando, durante la reunión del partido, aseguró que una posible manifestación para respaldar a Cristina Kirchner debía ser convocante para los peronistas, pero también para toda la comunidad democrática.
La principal intención de la reunión es definir y articular acciones de apoyo a la Vicepresidenta en todo el país. Tratar de hacer coincidir las consignas de las convocatorias. Unificar criterios y tiempos, con la intención de que todas la manifestaciones públicas estén coordinadas.
La definición más relevante que deben tomar es si realizarán una marcha masiva en respaldo a la ex presidenta o si ese pedido que viene haciendo el kirchnerismo quedará flotando en el aire. Lo que está claro es que, si se concreta, debe salir de un consenso entre todas las partes.
El temario no está claro, pero dirigentes que acudirán al encuentro le adelantaron a Infobae que la intención es que la posible realización de la marcha sea parte del debate y que en esa mesa, con integrantes de todos los sectores del Gobierno, pueda avanzarse sobre la discusión de la organización.
“Nos preparamos para realizar acciones conjuntas, como una movilización de todo el peronismo de la Argentina”, aseguró un importante dirigente del PJ que estará presente en el encuentro de hoy. Otro dirigente histórico agregó: “Tenemos que ordenar un poco las manifestaciones en las ciudades y las provincias. Que respondan a una estrategia política”.
La idea que permanece vigente es la que señala que el peronismo está en “alerta y movilización” en forma permanente, desde que el fiscal Diego Luciani le pidió 12 años de condena a la Vicepresidenta. Ese estado es el que atraviesa al espacio político y que le sirve de argumento al kirchnerismo para volcarse a la calle cada día.
Del encuentro también saldrá un comunicado en el que el PJ Nacional vuelva a marcar un posicionamiento institucional respecto a la causa judicial en la que está involucrada Cristina Kirchner y los enfrentamientos que se generaron con la oposición, especialmente con el gobierno porteño, durante el fin de semana.
Después de la euforia que se generó alrededor de la ex jefa de Estado, en el oficialismo se empezaron a reproducir dudas sobre hasta qué punto la agenda judicial y política de Cristina Kirchner tapará la que tiene que llevar adelante el Jefe de Estado en materia de gestión.
El Gobierno está transitando el comienzo de una nueva etapa, en la que la Vicepresidenta tiene una absoluta centralidad y Fernández se reacomoda en el esquema de poder, recostado exclusivamente en la gestión. Por eso aún no está claro cuáles son los márgenes que tiene cada uno para moverse.
“Alberto no tiene la centralidad política, pero es el que sigue gobernando, el que toma las decisiones y mantiene el contacto permanente con las acciones que lleva adelante Sergio Massa”, explicó un funcionario cercano al Jefe de Estado, que remarcó así que el día a día de la gestión pertenece a Fernández.
La idea que está anclada en el ala albertista de la coalición es que el Presidente sigue siendo el punto de unidad de todo el espacio político y que ese valor es importante, sobre todo en un momento donde todo el peronismo está en crisis por el pasado, el presente y el futuro de la alianza oficialista.
El próximo viernes, cuando se festeje el Día de la Industria, Alberto Fernández viajará a Vaca Muerta y volverá a poner en valor su rol en la gestión. Será un hecho que, probablemente, se convierta en un punto de inflexión en la dinámica que tiene el peronismo en los últimos días.
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