La inquietante frase que el presidente Alberto Fernández pronunció ayer durante una entrevista televisiva mientras intentaba defender a Cristina Kirchner de la acusación por corrupción en el marco de la causa Vialidad despertó todo tipo de reacciones, entre las que se destaca la de Juntos por el Cambio, que hoy difundió un escueto pero fuerte comunicado contra el mandatario. “Sus dichos son una velada amenaza a la seguridad personal del fiscal federal”, consideraron hoy desde la coalición opositora.
“Exigimos que el Gobierno Nacional garantice en forma absoluta la integridad física de los jueces y fiscales que están llevando adelante las causas que involucran a la Vicepresidenta de la Nación. En la Argentina no puede haber más impunidad ni más muertos por razones políticas, ideológicas o por querer buscar el legítimo deseo de verdad y justicia”, subrayó la mesa nacional de JxC.
Por último, explicaron que “las acciones legales y parlamentarias que desarrollan los distintos actores de Juntos por el Cambio son parte de una estrategia de protección institucional y constitucional al Poder Judicial y al Fiscal Luciani en particular.
Fernández, al ser consultado por los periodistas Marcelo Bonelli y Edgardo Alfano sobre la decisión que había tomado la Corte Suprema de reforzar la seguridad de los funcionarios judiciales que intervenían en la causa Vialidad, respondió: “Realmente, alentar que le pueda pasar al fiscal Luciani lo que le pasó a Nisman... miren hasta acá, lo que le pasó al fiscal Nisman es que se suicidó. Hasta acá no se probó otra cosa. Yo espero que no... que no haga algo así el fiscal Luciani”.
Los dichos de Fernández provocaron un inmediato rechazo desde distintos sectores. La Asociación de Fiscales, por ejemplo, consideró que las declaraciones del mandatario “poseen un contenido desagradable y temerario”.
“La Asociación de Fiscales y Funcionarios del Ministerio Público Fiscal de la Nación repudia enfáticamente los dichos vertidos por el Sr. Presidente de la Nación Alberto Fernández”, contestó la entidad remarcando que el mandatario “posee un desconocimiento profundo del caso en el cual se investiga el asesinato del Fiscal General Alberto Natalio Nisman”, señaló la entidad en un comunicado difundido ayer por la noche.
Elisa Carrió, por su parte, advirtió hoy sobre la “gravedad institucional” de las declaraciones del mandatario nacional sobre los fiscales Nisman y Luciani, tras el alegato contra Cristina Kirchner sobre los presuntos delitos cometidos en la obra pública de Santa Cruz, y reclamó a la Corte Suprema de Justicia que refuerce la custodia de los magistrados que instruyen en la causa Vialidad, pero por “fuera de la jurisdicción federal” de los uniformados que conduce el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández.
“Estamos en una situación sumamente delicada, donde tenemos que prevenir que suceda algo grave con la familia (de los fiscales) y de todos incluidos. No se equivoquen, no solo se trata de los fiscales, es una amenaza a los jueces y también hijos”, dijo la ex diputada nacional y líder de la Coalición Cívica (CC).
Ante la polémica que despertaron los comentarios del presidente Fernández, hoy la vocera presidencial, Gabriela Cerruti, intentó aclarar la situación en la habitual rueda de prensa que brinda todos los jueves desde la Casa Rosada, y dijo que “el Presidente no hizo ninguna comparación, la hicieron los periodistas”.
En este sentido, agregó que lo que hizo el Presidente fue recomendarle al fiscal Luciani leer más libros de derecho penal o la Constitución, porque “realmente es lamentable el alegato por la falta de pruebas y la inconsistencia que tiene”.
“No lo conoce, no sabe quién es, pero le recomienda que lea un poco más para entender que cuando alguien pide una prueba en principio tiene que probar que está hablando del autor de quien cometió dolo y que en este caso, en el alegato, en toda esta causa no hay ninguna prueba que incrimine a la vicepresidenta. Es un verdadero disparate jurídico y se está montando un show mediático judicial de persecución”, señaló.
Fernández, en tanto, brindó un nuevo reportaje esta mañana y dijo que no está arrepentido por su polémica frase sobre el fiscal Luciani. “La pregunta no fue sobre la seguridad de los fiscales, la pregunta fue si yo temía que a los fiscales les sucediera lo mismo que a Nisman. Y como la pregunta hablaba de Nisman particularmente, contesté lo que creo: Nisman se suicidó y no encuentro ningún motivo para que eso ocurra con el fiscal”, planteó el mandatario, en diálogo con El Destape Radio.
Y en la misma línea, continuó: “Si la pregunta era “¿Cómo se preocupa usted por la seguridad de los fiscales?”, yo hubiera dicho: “En mi gobierno no amenazamos, ni perseguimos, ni operamos sobre fiscales ni jueces y por lo tanto nadie debe sentirse en riesgo”, continuó.
Al ser consultado sobre las repercusiones que provocó su comparación entre Luciani y Alberto Nisman, el fiscal que investigaba la voladura de la AMIA y apareció muerto con un tiro en la cabeza en su departamento, dijo que hubo “una enorme tergiversación”.
“Apareció el nombre de Nisman porque fue parte de la pregunta concreta. “¿No tiene miedo de que le pase lo mismo?”, me preguntaron y me sorprendió; ¿qué tiene que ver Nisman con todo esto? Pero bueno: no, yo no tengo ningún temor que pueda pasar esto”, aseguró.
SEGUIR LEYENDO: