La marcha de San Cayetano, que encabezan los movimientos sociales y que se inició hoy en el santuario del patrono del pan y el trabajo en Liniers y culminará en el centro porteño, tiene un fuerte símbolo: el cardenal primado de la Argentina y Arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, estuvo a cargo de la homilía, y el obispo auxiliar monseñor Juan Carlos Ares bendijo las herramientas que alzarán como plegaria el grupo de desocupados de la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) que encabezarán el peregrinaje de 16 kilómetros.
La peregrinación, que combina fe y la lucha social de los sectores más postergados del país tiene un alto impacto político.
Las decenas de miles de participantes en la manifestación le reclaman al gobierno de Alberto Fernández urgencias básicas: “Tierra, Techo y Trabajo”. Al rezo, este año se agregaron dos “P”, paz y pan.
La ley general de las “tres T” presentada en el parlamento, y que incluye el Salario Básico Universal (que el Gobierno adelantó no impulsara), es, para las organizaciones sociales, una necesidad que el Papa Francisco expuso en el mensaje del Encuentro Mundial de Movimientos Populares realizado en el contexto de la Pandemia el 16 de octubre de 2021 “para que a ningún ser humano le falte lo mínimo indispensable para el consumo de sus necesidades básicas”.
Hay otras demandas y están centradas en las políticas económicas, el rumbo del Gobierno y la inflación. De hecho, esta última demanda fue tomada por el cardenal Poli, ante los feligreses y militantes sociales: “El ejemplo del Buen Samaritano nos devuelve una mirada solidaria de la realidad, no para escandalizarnos, sino para conmovernos y comprometernos. Mientras tanto, ‘suplicamos’ el pan de cada día, como nos enseñó Jesús. El pan que alimenta nuestra vida y que diariamente se hace más inalcanzable a causa de la inflación asfixiante que padecemos y que genera miseria. ¿Cómo no pensar en la cantidad creciente de hermanos y hermanas que se acercan cotidianamente a los comedores, en los adultos mayores que no pueden comprar sus medicamentos, en las familias cuyos ingresos son cada vez más insignificantes? Como reza una canción: ‘No es posible morirse de hambre en la tierra bendita del pan’”.
Un pasaje de su homilía que remite a la actual realidad social, política y económica del país y centro de preocupación de las flamantes autoridades en la cartera económica.
Si bien la mayoría de los movimientos populares que integran la movilización están alineados al Frente de Todos, y varios de sus dirigentes forman parte del Gobierno, las consignas están cargadas de fuertes reclamos a la administración de Fernández al que le exigen cambios en las políticas sociales y cuestionan la “falta de anuncios dirigidos a los sectores más vulnerables”.
Tal como informó este medio de manera exclusiva, la marcha cuenta con un destacado peregrino que no estuvo presente en las convocatorias anteriores: Gustavo Beliz, el ahora ex secretario de Asuntos Estratégicos. El amigo del Presidente que renunció de manera “indeclinable” al cargo en el mismo momento en el que se confirmaba que Sergio Massa, el hasta entonces presidente de la Cámara Baja, aterrizaba en el Gabinete Nacional como ministro de Economía con facultades ampliadas. Beliz no habló sobre el tema.
El lento recorrido, cruzado por la fe y los imperativos concluirá en la intersección de las Avenida de Mayo y 9 de Julio. Este año, a diferencia de los cinco anteriores, los discursos de cierre no tendrán a la Casa Rosada como telón de fondo. Un gesto de los organizadores al Poder Ejecutivo en medio de la crisis interna que derivó en cambios de funcionarios y reordenamiento de la grilla de ministerios.
El cierre de la convocatoria está a cargo del secretario general de la UTEP, Esteban “Gringo” Castro, referente de los Misioneros de Francisco; un movimiento católico que nació poco después de la elección de Jorge Bergoglio como Papa, en 2013.
De la Basílica de Luján a San Cayetano
La peregrinación por “Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo; que culmina hoy, inició el martes 2 de agosto con una misa en la Basílica de Luján a la que asistieron Esteban Castro, dirigentes de la UTEP, sacerdotes, evangélicos y Gustavo Beliz quien, de esa manera, hacía su primera aparición pública después de alejarse de las mieles del poder.
El ex funcionario, de profunda fe católica, es un hombre muy allegado a Francisco. Tanto que fue el nexo entre el secretario general de la UTEP y el Papa, quien lo recibió en varios encuentros con los movimientos populares en Roma. Después, la relación de Bergoglio con Castro creció por empatía.
Castro, Beliz y el resto de los peregrinos, caminaron los 60 kilómetros que separa Luján de Liniers, entre martes y ayer sábado. Fueron de los primeros que llegaron al santuario del quien en 1513 fundó una sociedad de sacerdotes y prelados, llamada el “Oratorio del Amor Divino”.
Infobae captó a castro y Beliz en varias momentos del trayecto. Pararon varias veces para participar de asambleas barriales que preparaban la marcha de hoy. Así como a Castro se lo identificaba rápidamente por su espesa barba y báculo; el ex estrecho colaborador de Alberto Fernández destacaba por su ropa holgada y cómoda color marrón, gorra, pañuelo, botellita de agua en la mano y mochila en la espalda. “No voy a hablar. Vine en silencio. Vine por mi fe y acompaño al Gringo, mi amigo”, se lo escucha decir.
“No separamos la fe de la lucha”, dijo Castro, también dirigente del Movimiento Evita en las asambleas de Merlo y General Rodríguez y repitió la frase que el obispo de Mercedes-Luján, Jorge Eduardo Scheining expresó en la homilía: “No somos masa, somos pueblo”.
El discurso del dirigente del Movimiento Evita, así los adelanto en las asambleas barriales tendrá tres ejes: “Este sistema no se aguanta más. Es un sistema mata”, tal como se lo escucho decir en persona al jefe de la iglesia católica. “Los pobres no esperan, se organizan, trabajan y luchan” y el tercero: “Las tres T, tierra, techo y trabajo, es un derecho sagrado”, y por el Salario Básico Universal.
Según explicó Castro, sus demandas son “una actualización al pedido que hace 40 años realizó el secretario general de la CGT, Saúl Ubaldini cuando, en las puertas de San Cayetano recitó la consigna: ‘Paz, Pan y Trabajo, la dictadura abajo’”, concentración que terminó, recuerda el dirigente: “con los trabajadores de los gremios que integraban la CGT cagados a palo por los milicos y con heridos y encarcelados”.
Para Castro, los actuales movimientos populares que marchan hoy “son continuadores de ese hito histórico que tiene base en San Cayetano”, el cura de los humildes beatificado el 8 de octubre de 1629 por el papa Urbano VIII y canonizado el 12 de abril de 1671 por el papa Clemente X.
Al salir de la iglesia de San Cayetano para ir a descansar a la Unión Obrera Ladrillera, ubicada en Ciudadela, el dirigente social le reclamó al ministro Massa “escuchar las necesidades del pueblo” y resaltó que “las expectativas están puestas en que los gobiernos tengan una mayor afinidad con el pueblo más humilde, para lo cual hay que tener una relación más unida”.
-¿A qué se refiere?, le preguntó este medio.
-Tiene que haber una interlocución con los sectores populares. Más expectativas que eso no tenemos. Hoy nuestra expectativa está puesta en la marcha de San Cayetano, teniendo en cuenta la situación que vive el país y el pueblo”.
“Los Cayetanos”
La primera “marcha cayetana”, cargada de una fuerte ideología social y de exigencia hacia la administración central, fue el 7 de agosto de 2016. Estaba dirigida contra el gobierno de Mauricio Macri, por la “la difícil situación económica para los sectores más vulnerables de la sociedad”, y que fueron clave para que tres años después se promulgue la ley de “emergencia alimentaria” aún vigente.
El tridente que componía -y que hoy perdura- a los denominados “cayetanos” estaba compuesto por la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), antecesora de la UTEP, uno de sus impulsores fue Juan Grabois, el líder del Movimiento de Trabajadores de la Economía Popular (MTE); La Corriente Clasista y Combativa (CCC), del diputado nacional Juan Carlos Alderete; el Movimiento Evita, que reporta como referentes nacionales a Emilio Pérsico y Fernando “Chino” Navarro y Somos Barrios de pie, su coordinador nacional es Daniel Menéndez, estos tres últimos integrantes del gobierno de Fernández.
A esto espacios se suman, por ejemplo, Dina Sánchez, secretaria adjunta de la UTEP y referente del Movimiento Popular Darío Santillán; y dirigentes como el ex Jefe de Gabinete de Cristina Fernández de Kirchner, Juan Manuel Abal Medina, del Movimiento Evita; Gildo Onorato, secretario gremial de la UTEP; y entre otros, Lito Borello, Secretario de Derechos Humanos de la misma organización.
Según adelanto Castro a este medio, como viene ocurriendo en los últimos años, a la marcha cayetana “se van a sumar otros sectores sociales, políticos, sindicales de la CGT y de la de la CTA”.
Alderete, integrante del bloque del Frente de Todos en la Cámara Baja vaticinó que la marcha de hoy “será una movilización muy grande, porque las necesidades del pueblo son muchas” y recordó que: “Vamos a llenar la avenida 9 de Julio y el Obelisco con el pedido de que se garantice el programa de Tierra, Techo y Trabajo que venimos reclamando las organizaciones sociales”.
-¿Y para usted, qué medidas debe aplicar el Gobierno?, lo consultó Infobae.
-Congelamiento de precios y aplicación de la ley de abastecimiento. Paritarias libres, no montos fijos, como quieren dar. Aumento urgente de jubilaciones y pensiones. Aumento del número de beneficiarios y monto de los Potenciar Trabajo. Un Ingreso Básico de Emergencia con contraprestación laboral. aprobación de la Ley “Programa Tierra Techo, Trabajo” y un aumento del cien por cien en los alimentos que envía el Ministerio de Desarrollo Social.
-¿Tan mal están las cosas?
-Sí. Esto no da para más. La gente está muy angustiada.
Dina Sánchez, también consultada por este medio, tuvo expresiones de dureza con el gobierno de Fernández: “Volvemos a las calles para plantear la necesidad urgente de que haya respuesta a los sectores populares. Venimos de seis años de pérdida de poder adquisitivo y estamos viviendo un escenario cada vez más duro en la clase trabajadora. Entendemos que es urgente que haya respuestas a la agenda para la economía popular organizada, pero fundamentalmente exigimos una respuesta para los más desprotegidos: los jubilados y jubiladas y los millones de personas que están por debajo de la línea de indigencia”.
Por esas razones, coincide la militante feminista: “Es necesario avanzar con la Ley Integral de Tierra Techo y Trabajo y con el Salario Básico Universal”.
Desde el Movimiento de Trabajadores Excluidos, referenciados en Grabois, un duro dirigente social que hasta ahora viene apoyando al Gobierno, aunque con fuertes cuestionamientos, emitieron un documento en apoyo a la marcha de hoy como una manera de continuar las concentraciones que vienen realizando “por un pliego reivindicativo de siete leyes, que incluye el Salario Universal”. El texto destaca que “si no hay respuesta, continuarán las asambleas y concentraciones la semana siguiente”, y que pueden coincidir con la que ya tiene prevista la Unidad Piquetera.
Como se advierte, la marcha de San Cayetano, la que unió a la virgen de Luján con el santo del pan y el trabajo, no es una movilización en favor de Alberto Fernández, sino una peregrinación de fe y esperanza con fuertes reclamos sociales urgentes al Gobierno y que proviene de los sectores más humildes, desprotegidos y vulnerables.