El acuerdo que presentó el gobernador de Neuquén ante la comunidad mapuche para establecer un mecanismo de “consulta previa” para el desarrollo de Vaca Muerta, en momentos en que se apura la puesta en marcha del Gasoducto Néstor Kirchner, generó un fuerte rechazo desde el ámbito político, principalmente por la posibilidad de que esa propuesta pueda comprometer la inversión más importante que tiene en marcha la Argentina.
En diálogo con Infobae, el líder del Peronismo Republicano y ex candidato a vicepresidente por Juntos por el Cambio, el rionegrino Miguel Ángel Pichetto; y el diputado nacional y precandidato a gobernador neuquino, Pablo Cervi (UCR Evolución) cuestionaron con dureza la propuesta que presentó Gutiérrez a la comunidad mapuche.
“Esta es una concesión inexplicable y es aceptar y ceder ante hechos extorsivos. Es poner de rodillas al Estado Argentino ante los mapuches, o grupos étnicos que se proclaman de ese modo. Decisiones como esta lesionan la soberanía”, manifestó el dirigente peronista y auditor general, quien tiene una posición crítica sobre el modo en el que el gobierno nacional enfrenta el desafío de esos sectores indigenistas, con reivindicaciones que han adquirido incluso caracter violento.
Pichetto también fue muy crítico contra el gobernador Gutiérrez: “Nunca tuvo una posición clara ni hizo uso legítimo y legal de la fuerza pública para los comportamientos y acciones ilegales. La Justicia muchas veces no toma medidas, pero cuando las toma y decide aplicar una orden de desalojo, el gobernador no siempre la hace cumplir”.
El ex senador resaltó que los grupos aborígenes se instalaron en la periferia de Vaca Muerta cuando se descubrió la existencia del megayacimiento, con una riqueza y un potencial productivo inmenso. “Lo que único que falta es que haya que pedirles autorización a los mapuches para explotar el gas y el petróleo argentino”, advirtió.
“Se debe ejercer la autoridad y principio del orden y que las fuerzas de seguridad, sobre todo las federales, hagan todo lo que sea necesario para custodiar y garantizar las condiciones para que Vaca Muerta pueda producir. No entiendo, lo que ocurre en la Patagonia es muy peligroso y no se toma dimensión de que se está afectando la soberanía”.
Por último, recordó: “Lo vengo diciendo largamente. Hablé de este tema de Vaca Muerta y entiendo que con una decisión como esta registra un punto más de la claudicación. Lo que se hizo es el camino previo a que la extorsión se haga amparada por el Estado sobre empresas”.
En una tónica similar se expresó el diputado y precandidato a gobernador Pablo Cervi -que pertenece al espacio radical de Evolución que lidera Martín Lousteau- quien también fue, como empresario, víctima de una toma mapuche.
“Con el argumento de darle a la comunidad mapuche la consulta previa que estable la OIT mete la cola la política y los intereses. En el departamento de Añelo no había mapuches y por una toma que tuvimos nosotros se pudo confirmar ante la Justicia que no tenían personería jurídica para actuar, principalmente, porque no se puede conformar una asociación civil para tomar tierras, es decir para delinquir”, explicó Cervi.
El diputado resaltó que “no hay ninguna comunidad en la traza del Gasoducto Néstor Kirchner, por lo que darle participación es darle un derecho que no tienen. Lo que han hecho siempre es juntar gente decir que son una comunidad y ocupar tierras fiscales. Después empiezan a reclamar y conseguir beneficios. Con este protocolo fue igual: presionaron, y el gobierno provincial terminó cediendo”.
Según el legislador nacional un acuerdo como el que propuso Omar Gutiérrez a los mapuches “es probable que dificulte el desarrollo de Vaca Muerta, incluso que desalienta las inversiones. Se va a terminar agregando un problema al que tienen las empresas petroleras, como es el de sacar las divisas para los que invierten”. “Termina condicionando al gasoducto y la actividad en general de Vaca Muerte. Lo concreto es que pidieron ser parte del negocio y lo lograron”, concluyó el dirigente radical.
El protocolo de consulta
El gobernador de Neuquén presentó ayer el protocolo de “Consulta Previa, Libre e Informada” (CLPI) a la Confederación Mapuche, ante el inminente inicio de las obras del Gasoducto Néstor Kirchner, que se extenderá desde la localidad de Tratayén, en Vaca Muerta, hacia Salliqueló, en la provincia de Buenos Aires.
La propuesta de Gutiérrez fue entregada en un encuentro realizado en la ciudad deportiva de la capital provincial ante representantes de las seis zonales de la Confederación Mapuche de Neuquén, de empresas que desarrollan yacimientos de petróleo y gas no convencional en Vaca Muerta, intendentes y miembros del Poder Judicial.
El gobernador neuquino justificó el protocolo al decir que “lo que busca es mayor hermandad y mayor integración en nuestro territorio”, y manifestó “la predisposición del Gobierno para promover y facilitar este espacio”.
SEGUIR LEYENDO